Política social y modelos de desarrollo - Estudios del trabajo
Política social y modelos de desarrollo - Estudios del trabajo
Política social y modelos de desarrollo - Estudios del trabajo
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
<strong>social</strong>es, y especialmente como respuesta a la <strong>de</strong>sarticulación <strong>de</strong> las re<strong>de</strong>s populares<br />
participativas en el seno <strong>de</strong> las instituciones formales, tales como la salud y la educación<br />
pública. Esto vino a <strong>de</strong>mostrar históricamente que las iniciativas <strong>social</strong>es autogestionadas<br />
por los propios sectores populares organizados y apoyados por instituciones abiertas a la<br />
participación, constituyen no sólo alternativas relevantes en tiempo <strong>de</strong> crisis, sino también y<br />
principalmente, son un factor <strong>de</strong> <strong>de</strong>sarrollo <strong>social</strong> autosustentado.<br />
Este es el esquema heredado por el actual gobierno <strong>de</strong> la Concertación <strong>de</strong> Partidos por la<br />
Democracia (1990-2003), cuyo lema, “crecimiento con equidad”, preten<strong>de</strong> constituirse en<br />
una <strong>de</strong> las claves <strong>de</strong> su “diferencia” con el período dictatorial. Cabe, al respecto,<br />
preguntarse: ¿cuál es el sentido y contenido que adquiere la fórmula “equidad <strong>social</strong>” en un<br />
Estado neo-liberal? Esta constituye, a nuestro juicio, una <strong>de</strong> las preguntas centrales <strong>de</strong> esta<br />
última década que ponen el <strong>de</strong>do en la llaga <strong>de</strong> una <strong>de</strong> las contradicciones principales en las<br />
que se <strong>de</strong>bate el mo<strong>de</strong>lo político actual en Chile.<br />
Al respecto, salta a la vista que el énfasis puesto en el concepto <strong>de</strong> equidad dice<br />
actualmente relación, por una parte, con un aspecto cuantitativo relacionado con un<br />
persistente crecimiento <strong>de</strong> la inversión pública en gasto <strong>social</strong> (el incremento <strong>de</strong>l porcentaje<br />
<strong>de</strong>l PIB <strong>de</strong>stinado a gasto <strong>social</strong> en Chile ha sido <strong>de</strong> 86,4% entre 1989 y 1998 [E. Moreno,<br />
1999]) y, por otra parte, con la proyección <strong>de</strong> ciertas reformas que, especialmente en el<br />
campo <strong>de</strong> la educación y la salud, buscan potenciar algunas áreas especialmente críticas y<br />
que hacen vulnerables los <strong>de</strong>safíos <strong>de</strong>l propio <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l contexto <strong>de</strong>l mo<strong>de</strong>lo.<br />
Cabe, al respecto preguntarse, si tal aumento cuantitativo <strong>de</strong>l gasto <strong>social</strong> y si tales<br />
proyectos <strong>de</strong> reformas, son capaces <strong>de</strong> producir, efectivamente, la equidad y <strong>de</strong> refundar la<br />
<strong>de</strong>mocracia en Chile. Es <strong>de</strong>cir, ¿hasta qué punto es capaz el aumento <strong>de</strong> la inversión <strong>social</strong><br />
y las reformas <strong>de</strong> <strong>de</strong>sarticular los engranajes <strong>de</strong> la <strong>de</strong>sigualdad que habitan en el interior <strong>de</strong><br />
las propias políticas <strong>social</strong>es <strong>de</strong>l neo-liberalismo? Es la pregunta <strong>de</strong> esta parte <strong>de</strong>l texto.<br />
Nuestra primera hipótesis tentativa es que dicho aumento <strong>de</strong>l gasto <strong>social</strong> y las reformas<br />
planteadas tien<strong>de</strong>n a hacer <strong>social</strong>mente coherente el mo<strong>de</strong>lo <strong>de</strong> <strong>de</strong>sarrollo capitalista en su<br />
nueva fase <strong>de</strong> inserción global, especialmente expresado en los tratados <strong>de</strong> libre comercio<br />
recientemente firmados. Es <strong>de</strong>cir, una vez más, la política <strong>social</strong> forma parte sustantiva <strong>de</strong>l<br />
mo<strong>de</strong>lo <strong>de</strong> <strong>de</strong>sarrollo impulsado. Pero nuevamente asalta la pregunta: ¿hay algo que vaya<br />
más allá <strong>de</strong> dicho condicionamiento funcionalista entre política <strong>social</strong> y <strong>de</strong>sarrollo<br />
económico? Es <strong>de</strong>cir, ¿cuál es la dimensión equitativa, inclusiva-<strong>de</strong>mocratizadora <strong>de</strong>l<br />
mayor gasto <strong>social</strong> y <strong>de</strong> las reformas impulsadas? Surge, así, una segunda hipótesis<br />
tentativa que plantea que si bien el horizonte utópico <strong>de</strong> las actuales políticas <strong>social</strong>es como<br />
vía <strong>de</strong> paliar el neoliberalismo resi<strong>de</strong> sin duda en el anhelo <strong>de</strong> una mayor equidad, esta no<br />
se va a producir automáticamente como resultado <strong>de</strong> dicho aumento <strong>de</strong> inversión o <strong>de</strong><br />
dichas reformas focalizadas e impulsadas por arriba. Nuestra impresión es que el<br />
reforzamiento <strong>de</strong> las políticas <strong>social</strong>es en el seno <strong>de</strong> un sistema construido para la reorganización<br />
<strong>de</strong> la <strong>de</strong>sigualdad, tien<strong>de</strong> a mo<strong>de</strong>rnizar y/o a hacer una “puesta al día”<br />
tecnológica y/o curricular <strong>de</strong>l mismo sistema o los mismos aparatos culturales intervenidos,<br />
pero no rompen necesariamente los engranajes estructurales que permitan abrir el sistema<br />
hacia la equidad o igualdad propia <strong>de</strong> un sistema nacional <strong>de</strong>mocrático. En esta perspectiva,<br />
pensamos que, si bien existe un amplio campo <strong>de</strong> acción e intervención sobre la pobreza a