Hernán Feldman.pdf - Saberes de Estado - IDES
Hernán Feldman.pdf - Saberes de Estado - IDES
Hernán Feldman.pdf - Saberes de Estado - IDES
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
Cronistas como Mansilla van a advertir, <strong>de</strong> este modo, los efectos <strong>de</strong> la combinación que<br />
se opera entre una legión <strong>de</strong> niños dotados <strong>de</strong> dudosas lealta<strong>de</strong>s y una lengua sobre la que se<br />
producen transformaciones inesperadas. La crónica <strong>de</strong> costumbres urbanas, en última instancia,<br />
se va a constituir en el lugar <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el cual el cronista impulsará dos vectores narrativos: el que<br />
constata la sensación <strong>de</strong> un <strong>de</strong>salojo inminente y el que fragua la resistencia frente a ese atrevido<br />
intento <strong>de</strong> <strong>de</strong>spojo. Construyendo un tiempo presente dominado por lo ininteligible, entonces, el<br />
registro <strong>de</strong> la evocación regulará esos vectores y los pondrá en contacto para resolver la relación<br />
<strong>de</strong> causalidad entre un presente intranquilizante y un futuro volátil.<br />
En noviembre <strong>de</strong> 1863, por ejemplo, un Carlos Pellegrini con diecisiete años recién<br />
cumplidos hacía referencia a estos problemas cuando escribía “Sobre la instrucción pública”, la<br />
tesis con la que cumpliría el requisito <strong>de</strong> ingreso a la Facultad <strong>de</strong> Derecho. En el texto, un joven<br />
que recién abandonaba el ámbito <strong>de</strong> travesuras infantiles tan documentadas como las <strong>de</strong><br />
Mansilla, abogaba por una instrucción obligatoria que interviniera directamente en aquellos<br />
hogares que se consi<strong>de</strong>raran perjudiciales para el <strong>de</strong>sarrollo virtuoso <strong>de</strong>l niño. En la opinión <strong>de</strong><br />
Pellegrini, “la sociedad <strong>de</strong>be poner especial cuidado en esta educación, <strong>de</strong>be arrancar al hijo <strong>de</strong><br />
manos <strong>de</strong>l padre corrompido, para que la conducta <strong>de</strong> éste no pueda pervertir la <strong>de</strong> aquél”. 11 El<br />
futuro Presi<strong>de</strong>nte, a<strong>de</strong>más, va a <strong>de</strong>nunciar categóricamente que “[v]agan por nuestras calles, por<br />
nuestra campaña, multitud <strong>de</strong> niños sin hogar y sin familia”, seres constantemente acechados por<br />
influencias perniciosas que “no podrán formar sino ciudadanos viciosos y corrompidos,<br />
elementos <strong>de</strong> <strong>de</strong>strucción para la sociedad”. 12 En virtud <strong>de</strong> este preocupante estado <strong>de</strong> cosas,<br />
para Pellegrini se hacía necesario “contener, ahogar este germen <strong>de</strong> anarquía, fundando escuelas<br />
<strong>de</strong> artes y oficios, don<strong>de</strong> regenerados por la atmósfera saludable <strong>de</strong>l trabajo, se conviertan en<br />
ciudadanos honrados y laboriosos, útiles a la patria y a sí mismos”. 13<br />
La calle como patria<br />
Alejandro Eujanián señala con acierto que en 1871 también Juan María Gutiérrez alertaba<br />
sobre la seriedad <strong>de</strong>l problema que los niños en las calles representaban para el <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong>l<br />
país. El fenómeno <strong>de</strong>l que Gutiérrez daba cuenta incidía a través <strong>de</strong> la infancia y la inmigración;<br />
dos manifestaciones que tenían como <strong>de</strong>nominador común al analfabetismo. Eujanián indica<br />
que, <strong>de</strong> acuerdo con la perspectiva <strong>de</strong> Gutiérrez, los niños que circulaban por la calle serían “los<br />
hombres que en el mañana la ignorancia <strong>de</strong>sviaría hacia el mundo <strong>de</strong> las pasiones y los<br />
prejuicios. Y añadía que el fenómeno se tornaba aun más alarmante a la luz <strong>de</strong> la presencia <strong>de</strong><br />
40.000 inmigrantes que cada año se incorporaban a la población nativa, <strong>de</strong> los cuales las dos<br />
terceras partes eran analfabetos”. 14 Compañeros <strong>de</strong> generación <strong>de</strong>l crítico literario parecían<br />
11<br />
Pellegrini, Carlos: “Sobre instrucción pública”, Obras, Imprenta y Casa Editora “Coni”, Buenos Aires, 1941, t. 3,<br />
p. 6. En un artículo periodístico titulado “Las cartas <strong>de</strong> Catriel”, Sarmiento <strong>de</strong>saconsejaba mantener a los niños<br />
indígenas mayores <strong>de</strong> diez años con sus madres, una vez que su tribu fuera sometida y sus integrantes distribuidos<br />
en casas <strong>de</strong> familia urbanas. “Pocas han <strong>de</strong> ser las madres que traigan consigo pequeñuelos, que <strong>de</strong>ben<br />
acompañarlas siempre; pero <strong>de</strong>jarles los niños <strong>de</strong> diez años para arriba, por temor <strong>de</strong> que sufran con la separación, es<br />
perpetuar la barbarie, ignorancia e ineptitud <strong>de</strong>l niño, con<strong>de</strong>nándolo a recibir las lecciones morales y religiosas <strong>de</strong> la<br />
mujer salvaje. Hay caridad en alejarlos cuanto antes <strong>de</strong> esa infección”. Sarmiento, Domingo Faustino: Obras<br />
completas <strong>de</strong> Sarmiento, Editorial Luz <strong>de</strong>l Día, Buenos Aires, 1954, t. 41, p. 289.<br />
12<br />
I<strong>de</strong>m, p. 11.<br />
13<br />
I<strong>de</strong>m, p. 11.<br />
14<br />
Eujanián, Alejandro: “La cultura: público, autores y editores”, en Nueva historia argentina, Editorial<br />
Sudamericana, Buenos Aires, 1999, t. 4, p. 554.