Preparación para Movilización - Paul-Timothy

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Preparación y Movilización --Libro 3
© 2000 Patterson y O´Connor
Es necesario nombrar una junta directiva provisional de los varones
adultos más formales. Así hizo y ordenó Pablo con cada nueva
congregación: Hechos 14:23; Tito 1:5. Compare Hechos 11:30; 15:2; I
Timoteo 5:19; Santiago 5:14; I Pedro 5:1-4. Los ancianos velan por la
manada para prevenir las críticas de los lobos (Hechos 20:17, 28-30). Es un
gran pecado conquistar gente de otra iglesia: Tito 3:10-11; Romanos 15:20;
II Cor. 10:14-19; Mateo 7:15.
SEPTIMO PASO: DESARROLLEN RELACIONES
DE AMOR ENTRE LOS HERMANOS.
La iglesia es el cuerpo de Cristo. En un cuerpo trabajan todos unidos
en amor. Los miembros cumplen distintos ministerios según sus respectivos
dones, cooperando en armonía, ayudándose mutuamente (Efesios 4:11-16).
Este ambiente de amor y sacrificio se cultiva con la buena organización.
“Organizar” significa que los distintos órganos del cuerpo funcionan juntos.
Cada miembro de la iglesia es un órgano del cuerpo; ojo, oreja, pie, mano,
hígado, etc. En una iglesia bien organizada, ¿De que manera trabajan?
( ) Todos cumplen el mismo ministerio o
(x) Cada uno tiene su propio, ministerio distinto.
En el cuerpo cada miembro tiene su propio don para el provecho del
cuerpo. No todos tenemos el mismo don ni el mismo ministerio.
I Cor. capítulo 12 explica esto.
Jesucristo ordena: “Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis
unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros.”
Juan 13:34.
El amor se ve en nuestras relaciones con otras personas. Relaciones
nacidas del amor edifican, ayudan, perdonan, permanecen y glorifican a
Cristo. Relaciones sin amor consisten en palabras sin hechos, críticas,
celos y envidia.
Les toca a los “ancianos” organizar la iglesia y cultivar buenas
relaciones entre todos. Los ancianos son los varones adultos que dirigen la
obra. Ellos tienen que servir de ejemplo primero. Se aman y se organizan,
cada uno cumpliendo su respectivo ministerio en la iglesia. Los apóstoles
siempre establecieron ancianos en cada iglesia nueva. Lea Hechos 14:23;
Tito 1:5.
Pedro cultivó relaciones de amor entre la iglesia hija y la madre.