La amistad espiritual - Autores Catolicos
La amistad espiritual - Autores Catolicos
La amistad espiritual - Autores Catolicos
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
22<br />
quienes se complacen en amar hoy lo que odiarán mañana, ser de tal modo amigos de todos que a<br />
ninguno permanecen fieles. Hoy alaban, mañana vituperan. Hoy blandos, mañana mordaces. Hoy<br />
prontos para el beso, mañana para el oprobio. A un amor tasado tan bajo, cualquier levísima ofensa<br />
aleja.<br />
[48.] WALTER DANIEL. - ¡Y yo que creía que las palomas no tenían hiel! Dinos de qué modo<br />
puede ser refutada la opinión de estos que tanto desagradan a Graciano.<br />
[49.] ELREDO. - Ya lo dijo hermosamente Tulio: Me parece que quitan el sol del mundo los que<br />
quitan la <strong>amistad</strong> de su vida, porque nada tenemos de Dios que sea mejor ni que más nos alegre."o<br />
¿Qué clase de sabiduría es esa que detesta la <strong>amistad</strong> para ahorrarse preocupaciones, evitarse<br />
cuidados y librarse de temores? ¡Cómo si alguna virtud se pudiera adquirir o conservar sin trabajo!<br />
51 ¿Acaso, sin procurarte muchos esfuerzos, rivalizan en tu interior la prudencia y el error, la<br />
templanza y la concupiscencia, la justicia y la malicia y la fortaleza y la desidia? [50.] ¿Qué hombre,<br />
pregunto, máxime en la adolescencia, es capaz de mantenerse casto y refrenar sus apetitos lascivos<br />
sin gran dolor y angustia? ¿Fue un necio Pablo al no querer vivir sin el cuidado y solicitud por los<br />
demás y, por consideración a la caridad, a la que tenía por máxima virtud, hacerse enfermo con los<br />
enfermos y abrasarse con los escandalizados, 52 siendo grande su tristeza y continuo el dolor de su<br />
corazón por sus hermanos según la carne? 5. [51.] Para él, la caridad no debía ser abandonada ni por<br />
causa de tantas angustias y dolores como le causaba el reengendrar continuo de los que ya había<br />
dado a luz, el alimentarlos como nodriza, 54 corregirlos como maestro, 55 temblando porque no se<br />
les corrompiera el sentido de la fe,56 llamándolos con dolor y abundantes lágrimas 5. a conversión y<br />
gimiendo por los impenitentes.5.<br />
~ Veis como las virtudes se esfuerzan por sacar del mundo a los que no temen cargar con los<br />
trabajos que les son inherentes? [52.] ¿Fue necio Jusay, el arkita,'" que guardó tan fielmente su<br />
<strong>amistad</strong> con David, que prefirió la ansiedad a la seguridad, por condolerse con su amigo, antes que<br />
participar de los honores y gozos del parricida?<br />
Llamo bestias, y no hombres, a quienes dicen que de tal modo debemos vivir, que para nadie seamos<br />
ni consuelo ni carga o dolor, que no nos deleitemos en el bien ajeno y no amarguemos con nuestra<br />
perversidad a otros, que no nos preocupemos por amar a nadie ni por ser amados. [53.] Tampoco<br />
puedo admitir como <strong>amistad</strong> verdadera la de quienes la ven como lucro. Son amigos sólo de labios<br />
afuera, cuando los sostiene la esperanza de alguna ganancia temporal o intentan hacer al amigo<br />
cómplice de cualquier torpeza.60<br />
LA AMISTAD QUE DEBEMOS EVITAR Y LA AMISTAD APETECIBLE<br />
[54.] W ALTER DANIEL. - Ya que muchos se engañan con las apariencias de la <strong>amistad</strong>, te ruego<br />
que nos digas de qué <strong>amistad</strong> debemos prevenirnos y cuál apetecer, cultivar y guardar.<br />
[55.] ELREDO. - Como ya sabéis que no puede existir sino entre los buenos, fácilmente advertiréis<br />
que no se debe admitir la que desdice de los tales.<br />
[56.] GRACIANO. - Pero tal vez nos equivoquemos en el discernimiento.<br />
[57.] ELREDO. - :Bueno. Entonces señalaré brevemente cuáles debemos rechazar entre las que se<br />
nos presentan.<br />
Hay una <strong>amistad</strong> pueril que origina un afecto inconstante y alocado, orientado a todo el que pasa,<br />
superficial, sin discernimiento ni mesura, sin atender a lo que es o no conveniente. Esta <strong>amistad</strong><br />
causa una afición pasajera y vehemente, que estrecha con más fuerza y atrae más tiernamente. Pero<br />
el afecto que no está conducido por la razón es propio de las bestias, se inclina tanto a lo lícito<br />
cuanto a lo ilícito, sin poder discernir."1 Aun cuando lo más común es que el afecto preceda a la<br />
<strong>amistad</strong>, sin embargo, nunca se obrará según su impulso si la razón no lo comanda, la honestidad lo