EL ARTE DE SER FELIZ Ignacio Larrañaga - OpenDrive
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<strong>Ignacio</strong> <strong>Larrañaga</strong> <strong>EL</strong> <strong>ARTE</strong> <strong>DE</strong> <strong>SER</strong> F<strong>EL</strong>IZ<br />
drama, algo así como un desdoblamiento de personalidad, una especie de<br />
contradicción latente entre el querer y el sentir.<br />
Aquel día, estando Jesús en la sinagoga, se hizo presente un<br />
hombre que tenía un brazo inmóvil. Los saduceos y herodianos estaban al<br />
acecho viendo si lo curaba en sábado para poder acusarlo.<br />
Jesús le dijo al paralítico: "Levántate". Y luego lanzó una pregunta<br />
a sus adversarios: "¿Es lícito curar en sábado?" Ellos callaron.<br />
Entonces, dice el texto evangélico, mirándolos con ira y dolorido<br />
en su corazón por la dureza, dijo al paralítico: "Extiende el brazo". Lo<br />
extendió y quedó curado. En cuanto salieron, los fariseos se confabularon<br />
con los herodianos para tramar cómo eliminarlo.<br />
Hay otra escena en la que vemos a Jesús alejándose desengañado<br />
de su tierra. Se presentó en la sinagoga de Nazaret y habló a sus paisanos.<br />
Éstos se escandalizaron por su causa, y Jesús entristecido replicó: "Un<br />
profeta solo en su casa y en su tierra carece de prestigio". Su decepción fue<br />
tal que no pudo hacer allí ningún milagro.<br />
Y su desconcierto fue total ya que el Evangelio dice que se<br />
asombró de la falta de fe de su pueblo. Percibimos en ese asombro un<br />
contenido tenso y denso de desengaño, y hasta ciertos detalles de<br />
desesperanza. Pero no todo acabó aquí. Lucas nos dice que, en un<br />
momento dado, Jesús golpeó replicando y recordando que, en tiempo de<br />
Elías, fueron dejados de lado los hijos de Siria y Sidón. Oyendo esto, los<br />
nazarenos se llenaron de ira y levantándose lo arrojaron fuera de la ciudad y<br />
lo llevaron a una altura del monte escarpada para despeñarlo. Sobran<br />
comentarios.<br />
Es un texto muy duro. Parece el preludio de la pasión. El dolor<br />
más agudo es sentirse portador de un mensaje de amor y, al entregarlo y por<br />
entregarlo, recibir la incomprensión, el rechazo, la condena y la ejecución.<br />
En otra ocasión Jesús tuvo una reacción inesperadamente enérgica.<br />
Dio un profundo suspiro y exclamó: "¿Cómo es que esta clase de gente<br />
busca una señal? Os aseguro que a esta clase de gente no se le dará ninguna<br />
señal". Los dejó, se embarcó de nuevo y se fue a ala orilla de enfrente.<br />
¿Esperanzas destrozadas?, ¿Ilusiones desgarradas?, son reacciones que nos<br />
permiten entrever una desconocida y secreta familiaridad de Jesús con el<br />
sufrimiento.<br />
Los Evangelios nos dejan constancia de que Jesús, en sus últimas<br />
semanas, estuvo rodeado de indiferencia cobardía, odio y traición. Lo<br />
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