amparo directo en revisión 36/2011. quejoso

AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 36/2011
concreto se acreditó el tipo penal de robro agravado –encontrándose
la víctima en un vehículo particular y con violencia moral –, previsto en
los artículos 220, párrafo inicial, 224, fracción III, y 225, fracción I, del
Código Penal para el Distrito Federal. Por lo tanto, consideró
infundados el segundo y tercer conceptos de violación hechos valer
por la parte quejosa.
Esto es así, argumentó, pues con el historial probatorio
existente, con apego a derecho y contrario a lo sostenido por la parte
quejosa en sus conceptos de violación, la Sala responsable tuvo por
acreditados los elementos objetivos, normativos y subjetivos que
integran la figura típica del delito de robo, prevista en el artículo 220
del ordenamiento referido con anterioridad. Asimismo, en cuanto a las
calificativas previstas en los artículos 224, fracción III, y 225, fracción I,
del Código Penal en cita, la Sala Responsable también las tuvo por
acreditadas, al quedar de manifiesto que al momento del
apoderamiento de los bienes, los sujetos pasivos se encontraban a
bordo de un vehículo automotriz y que éstos fueron amenazados con
una pistola, mientras el sujeto activo les decía “ya valió madres, es un
asalto” y “saquen todo el dinero que traigan”, actuar por medio del cual
logró que éstos no se opusieran al robo.
En virtud de lo anterior, el Tribunal Colegiado de Circuito estimó
que no era posible concluir que la Sala responsable hubiera
conculcado el principio de presunción de inocencia. Para apoyar sus
argumentos, citó la jurisprudencia P. XXXV/2002, emitida por el Pleno
de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, de rubro:
“PRESUNCIÓN DE INOCENCIA. EL PRINCIPIO RELATIVO SE
CONTIENE DE MANERA IMPLÍCITA EN LA CONSTITUCIÓN
FEDERAL.”
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