Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
pues me quedé bizco. Y bizco estuve por tres o cuatro días. (Ahora, ¡desgracia mía!, ya<br />
no me quedo bizco ante los músicos.) De niño [...] pasaba los días imitando con la voz<br />
diversos instrumentos, improvisando orquestas y canciones y acompañándome con la<br />
tina de baño. Esas redondas tinas de baño que siempre me gustaron más para<br />
tamboras que para baño. [...] Recuerdo dolorosamente el solfeo. A veces las<br />
desafinaciones me costaron coscorrones poco musicales. Mis lágrimas cayeron sobre<br />
el Eslava. Leí libros de viajes con lágrimas y do-mi-do-mi-sol. Tenía seis años. Quería<br />
ser misionero en remotos lugares, predicador y músico. [...] Después toqué el violín. [...]<br />
Seguí estudiando música y fui poco aplicado. [...] He tenido muchos maestros. Los<br />
mejores no tenían títulos y sabían más que los otros. De ahí que siempre he tenido<br />
muy poca veneración por los títulos. Ahora, después de muchos años, sigo estudiando,<br />
sigo teniendo maestros, escribo música, sueño con remotos países y a veces doy<br />
tamborazos en tinas de baño” 7 .<br />
Los conjuntos así llamados de tamboras de Sinaloa (sobre la costa oeste),<br />
Durango o Zacatecas (al sur de Durango), que <strong>Revueltas</strong> pudo haber escuchado en la<br />
plaza del pueblo, contaban habitualmente con dos clarinetes, dos trompetas, dos<br />
trombones y tuba que - a diferencia de otras bandas mexicanas de soplos - tenía un<br />
papel solista. A los soplos se unían un tambor grande (tambora), platillos sincopados y<br />
a veces un tambor militar. A menudo, esta música de tamboras se acompañaba con<br />
danzas zapateadas o con canciones, cuyos textos se asimilaban al de los corridos,<br />
sones o himnos. Los conjuntos de tamboras no incluían instrumentos de arco, pero a<br />
éstos seguramente <strong>Revueltas</strong> los escuchó en los conjuntos mariachis de Jalisco, que<br />
incorporaban pocos soplos, como trompeta y flauta 8 .<br />
Con referencia a los corridos, el ya aludido Mayer Serra, exiliado en México y<br />
autor en 1941 de ese primer texto hermenéutico sobre <strong>Revueltas</strong> que considero<br />
insoslayable, explica que “el corrido es una derivación, aunque muy romantizada, del<br />
clásico romance español y una de las manifestaciones más genuinamente populares<br />
que se encuentran en diversas regiones de la república mexicana. La melodía se<br />
interpreta casi siempre en terceras o sextas. La línea melódica subraya muchas veces<br />
7<br />
Rosaura <strong>Revueltas</strong> (comp): Silvestre <strong>Revueltas</strong> por él mismo: Apuntes autobiográficos. Ediciones Era,<br />
México, DF, 1989, pp. 27-29<br />
8 Extraído de una comunicación personal de Rubén Ortiz Fernández, 4-VII-2000.<br />
4