Diario de una Bandera-Comandante Franco - Zona Nacional
Diario de una Bandera-Comandante Franco - Zona Nacional
Diario de una Bandera-Comandante Franco - Zona Nacional
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
DIARIO DE UNA BANDERA. CTE. FRANCO. ED. 1922 20 Parte:El territorio <strong>de</strong> Melilla<br />
parapeto avanzado son muy difíciles <strong>de</strong> retirar. Nuestros agentes <strong>de</strong> enlace toman parte activa en este<br />
empeño; pero el terreno está tan enfilado y el fuego es tanto, que el momento contemplamos a<br />
nuestros pies moribundo al bravo Blanes, el aristócrata granadino, aban<strong>de</strong>rado <strong>de</strong> la primera Ban<strong>de</strong>ra.<br />
-(Viva España, viva la Legión! -dice cuando le llevan.<br />
Los muertos y heridos se van amontonando <strong>de</strong>trás <strong>de</strong>l pequeño parapeto; los balazos en la cabeza<br />
abundan, y el joven médico <strong>de</strong>l Río se multiplica para curarles:<br />
-A éstos ponedles el sombrero -dice.<br />
Son los que con el cráneo <strong>de</strong>strozado no necesitan auxilio; y a los gritos <strong>de</strong> ΑViva España≅ y<br />
ΑViva la Legión≅ muere a nuestros pies lo más florido <strong>de</strong> nuestras compañías.<br />
Una voz grita: Α(el teniente!, (el teniente!, le han herido≅.<br />
Rápidos saltan dos el parapeto y con la cara ensangrentada retiran al teniente Sanz Prieto; la<br />
sangre afluye <strong>de</strong> su boca <strong>de</strong>strozada, pero, animoso, grita: ΑViva la Legión, viva la Le...!≅. no pue<strong>de</strong><br />
<strong>de</strong>cir más.<br />
El médico le coge, y pronto <strong>una</strong>s niqueladas pinzas pen<strong>de</strong>n <strong>de</strong> la boca ensangrentada. Un rato<br />
antes había avanzado animoso con su pequeño acor<strong>de</strong>ón que le servía <strong>de</strong> mascota.<br />
El teniente Vila también ha sido herido en los brazos. Un sargento retroce<strong>de</strong> <strong>de</strong> los primeros<br />
puestos con la cara roja <strong>de</strong> sangre; al pie <strong>de</strong>l camión fue herido en la cabeza; alegre exclama: Α(me ha<br />
herido, pero le he matado!≅<br />
Se retiran las cajas <strong>de</strong>l parapeto avanzado, y, por último, llegan un cabo y un soldado cargados<br />
con los fusiles. Los otros soldados les abrazan. (Se había retirado todo!<br />
Se levantan los parapetos y el combate sigue empeñado durante todo el día; <strong>de</strong>l Gurugú bajan<br />
gran<strong>de</strong>s refuerzos para el enemigo, y éste intenta varias veces reaccionar sobre nuestras líneas, pero se<br />
les ve caer y los vivas y ovaciones se repiten.<br />
A la izquierda, los Regulares tienen muy empeñado el combate. El tabor <strong>de</strong>l comandante Ferrer<br />
ha sido castigadísimo; el enemigo ha <strong>de</strong>fendido el terreno palmo a palmo. González Tablas acaba <strong>de</strong><br />
ser herido. Nuestro Teniente Coronel, que no se ha separado <strong>de</strong> nosotros ni un momento, toma<br />
entonces el mando <strong>de</strong> toda la línea; no vemos a otro Jefe.<br />
El fuego sigue, y el teniente Penche, que por muerte <strong>de</strong> los apuntadores dirige el fuego <strong>de</strong> <strong>una</strong> <strong>de</strong><br />
sus máquinas, recibe un balazo en la cabeza. Se le recoge muerto; sólo un hilo <strong>de</strong> sangre brota <strong>de</strong> su<br />
frente: sus presentimientos se cumplían.<br />
El teniente Manso ha sido también herido.<br />
Para retirar las bajas nos auxilian con gran espíritu un practicante y varios soldados <strong>de</strong>l<br />
Regimiento <strong>de</strong> Sevilla, que varias veces acudieron a las guerrillas, ayudando a nuestros camilleros en<br />
la sufrida y difícil tarea.<br />
El convoy había llegado sin novedad a Casabona, y a retaguardia, hacia el Zoco <strong>de</strong>l Had, se activa<br />
la construcción <strong>de</strong> un blocao.<br />
Momentos antes <strong>de</strong> la retirada empiezan a caer en el cercado los proyectiles <strong>de</strong> los cañones<br />
enemigos.<br />
60