escenas laborales - AELE

ANÁLISIS LEGAL
FACULTADES DEL
EMPLEADOR
Cuarta parte
Examinaremos en esta oportunidad la facultad que
tiene el empleador para establecer variantes en la
jornada de trabajo compensando las horas dejadas
de laborar en uno o varios días reprogramándolas
en otros de la misma semana, sin exceder el
promedio de las cuarenta y ocho horas semanales.
4. FACULTAD PARA ESTABLECER JORNADAS
COMPENSATORIAS DE TRABAJO
contemplada en el literal c) del artículo 2º de la norma bajo
comentario, de la cual nos ocuparemos en otra oportunidad.
De conformidad con lo regulado en el literal b) del artículo 2º
del TUO del Decreto Legislativo Nº 854 aprobado por D.S. Nº
007-2002-TR el empleador podrá disponer variaciones en la
duración de la jornada diaria de tal manera que en unos días de
la semana se trabaje un número mayor de horas –incluso superior
a las 8 horas– y esta situación se compense con jornadas en
las que se realice labor por menos de 8 horas, de modo tal que el
promedio semanal de horas trabajadas no supere las 48 horas.
Esquematizando esta situación podría darse, por ejemplo, la siguiente
variación:
Horas
Trabajadas
d = Descanso semanal.
JORNADAS COMPENSATORIAS
L M M J V S D
04 04 06 10 12 12 d.
TOTAL
48 horas
En el caso propuesto observamos que al inicio de la semana
(lunes y martes) la labor es menos exigente de acuerdo al ritmo
variable de la producción que puede darse en determinadas
empresas. La actividad se torna más asidua conforme avanza la
semana, hasta necesitar un mayor número de horas de trabajo
(12) los últimos días (viernes y sábado).
Evidentemente esta modalidad de jornada tiene que responder
a una realidad imperativa propia de la actividad empresarial que
la asume como una necesidad y no sólo como un juego de posibilidades
para romper la monotonía de una jornada estándar.
Sin embargo, conviene hacer notar que la facultad que estamos
analizando supone sólo variación en el número de horas que se
realizan cada día, por lo que no cabría acumular las horas de
trabajo en un número menor de días de los que habitualmente
resultan laborables en el centro de trabajo, pues esta última
figura es, a su vez, objeto de otra posible variación de la jornada
4.1 Tratamiento de los días de descanso
La norma reglamentaria (D.S. Nº 008-2002-TR, art. 5º) que se relaciona
con la facultad de establecer jornadas compensatorias de
trabajo a que nos estamos refiriendo, precisa que al ejercitar esta
modalidad, el empleador no puede desconocer ni afectar el derecho
del trabajador al descanso semanal obligatorio así como tampoco
omitir el descanso de los días feriados no laborables.
Entendemos que de requerirse necesariamente la labor del trabajador
en dichos días, podrá programarse el trabajo extraordinario
sea otorgando el descanso correspondiente en otro día de
la semana (descanso sustitutorio), en cuyo caso el trabajo realizado
en domingo o en el día feriado no tendrá sobretasa alguna;
o bien, si se prescinde del descanso sustitutorio, el empleador
queda obligado al pago doble por el día de descanso laborado,
tal como lo precisa el artículo 3º del Decreto Legislativo Nº
713, sin que este pago –que corresponde a la labor realizada–
descarte el derecho a la remuneración correspondiente al día
de descanso semanal obligatorio regulado por el artículo 4º
del mismo dispositivo, así como al pago aplicable en su caso al
día feriado no laborable según lo establecido en el artículo 8º
de la misma norma.
4.2 Tratamiento del pago del día trabajado
Otro aspecto de interés es determinar cómo debe efectuarse el
pago de los días trabajados bajo esta modalidad ya que el número
de horas laboradas cada día puede variar según el régimen
establecido o en razón de las urgencias o necesidades de producción
que se presenten en el centro de trabajo.
De acuerdo a esta realidad, al resultar variable la duración de la
jornada se obliga a que su abono sea concordante con el número
de horas laboradas en cada oportunidad.
De la misma manera los descuentos por los días de ausencia
INFORME LABORAL / OCTUBRE 2008 17