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6 Domingo, 4 DE Marzo DE 2012<br />
Thatcher: entre el olvido<br />
y los galardones <strong>de</strong>l cine<br />
el MuNDO<br />
Casi nadie recuerda<br />
a la hija <strong>de</strong>l ten<strong>de</strong>ro<br />
que se hizo famosa.<br />
POR JOHN F. BURNS<br />
GRANTHAM, Inglaterra —<br />
Aquí en el pueblo natal <strong>de</strong> Margaret<br />
Thatcher, un lugar imperturbable<br />
y muy trabajador a 190<br />
kilómetros al norte <strong>de</strong> Londres,<br />
no se hace mucho alboroto, ni se<br />
expresa mucho sentimiento, respecto<br />
<strong>de</strong> la mujer quien ocuparía<br />
la oficina <strong>de</strong>l Primer Ministro <strong>de</strong><br />
Gran Bretaña durante más tiempo<br />
en el siglo XX.<br />
Solo en las tar<strong>de</strong>s en que el cine<br />
ofrece a los jubilados entradas a<br />
mitad <strong>de</strong> precio ha acudido mucho<br />
público a ver La Dama <strong>de</strong><br />
Hierro, la controvertida película<br />
sobre Thatcher, quien ahora tiene<br />
86 años. De ambos lados <strong>de</strong>l<br />
Atlántico ha ganado críticas muy<br />
favorables para Meryl Streep,<br />
quien obtuvo un Óscar el 26 <strong>de</strong> febrero<br />
por su actuación en el papel<br />
protagónico. Esto ha sido contrarrestado<br />
por la crítica <strong>de</strong>l enfoque<br />
<strong>de</strong> la cinta sobre la batalla <strong>de</strong><br />
Thatcher contra la <strong>de</strong>mencia en<br />
años recientes.<br />
Más allá <strong>de</strong> esa controversia, la<br />
cinta ha <strong>de</strong>satado una nueva temporada<br />
<strong>de</strong> apasionado <strong>de</strong>bate, en<br />
Gran Bretaña, sobre el legado político<br />
<strong>de</strong> la época <strong>de</strong> Thatcher, medida<br />
por una oleada <strong>de</strong> comentarios<br />
que ha mostrado lo poco que<br />
han amainado los polos opuestos<br />
<strong>de</strong> opinión —la admiración y la<br />
vituperación— <strong>de</strong>s<strong>de</strong> 1990.<br />
Ese fue el año cuando una revuelta<br />
entre sus propios ministros<br />
<strong>de</strong>l gabinete y el famoso grito<br />
en la Cámara <strong>de</strong> los Comunes <strong>de</strong><br />
Thatcher <strong>de</strong>: “¡No! ¡No! ¡No!”,<br />
sobre cualquier mayor integración<br />
con Europa puso fin a su cargo<br />
<strong>de</strong> Primera Ministra <strong>de</strong>spués<br />
<strong>de</strong> 11 años.<br />
En Grantham, por cada resi<strong>de</strong>nte<br />
que habló admirablemente<br />
<strong>de</strong> la manera que la “Sra. T”<br />
manejó los asuntos importantes<br />
(las batallas con los sindicatos,<br />
la reducción <strong>de</strong>l estado <strong>de</strong> bienestar<br />
<strong>de</strong> la posguerra, la guerra<br />
<strong>de</strong> las Malvinas, la confrontación<br />
<strong>de</strong> guerra fría con la Unión Soviética)<br />
hubo dos o tres más que la<br />
<strong>de</strong>sestimaron por ser <strong>de</strong>masiado<br />
mandona, y también poco compasiva<br />
con los <strong>de</strong>sposeídos <strong>de</strong> la<br />
sociedad.<br />
Incluso en la tienda <strong>de</strong> la esquina<br />
<strong>de</strong> ladrillo rojo don<strong>de</strong> creció<br />
como hija <strong>de</strong>l ten<strong>de</strong>ro, el estado <strong>de</strong><br />
ánimo era <strong>de</strong> molestia. Solo una<br />
mo<strong>de</strong>sta placa marca el edificio<br />
como “el lugar <strong>de</strong> nacimiento <strong>de</strong><br />
Margaret Thatcher, la primera<br />
mujer en ocupar el puesto <strong>de</strong> Primera<br />
Ministra <strong>de</strong> Gran Bretaña e<br />
Irlanda <strong>de</strong>l Norte”.<br />
Lauren Hall, terapeuta <strong>de</strong> 24<br />
años <strong>de</strong> edad, tenía su propia<br />
perspectiva. “La gente que viene<br />
a Grantham está más interesada<br />
en Isaac Newton”, quien asistió a<br />
la escuela <strong>de</strong> la ciudad <strong>de</strong> 1655 a<br />
1661.<br />
En la Escuela Kesteven y Grantham<br />
Exclusiva para Niñas, en el<br />
cuadro <strong>de</strong> honor con letras doradas<br />
dice que Margaret Roberts<br />
fue representante estudiantil<br />
en 1943, el año en que obtuvo un<br />
lugar para estudiar química en<br />
Oxford.<br />
“Sé que mucha gente tiene malos<br />
sentimientos hacia ella, porque<br />
hizo lo suyo y a mucha gente<br />
no le gustó eso”, dijo Emily Cheesman,<br />
<strong>de</strong> 17 años. “Y creo que pudo<br />
haber lastimado las posibilida<strong>de</strong>s<br />
<strong>de</strong> otras mujeres <strong>de</strong> llegar a ser<br />
Primeras Ministras”.<br />
“Ella me caía muy bien”, dijo<br />
Michael Calladine, <strong>de</strong> 42 años, diseñador<br />
<strong>de</strong> jardines. “Sacó al país<br />
<strong>de</strong> una recesión, y cuando miras a<br />
los idiotas que han acabado con el<br />
país <strong>de</strong>s<strong>de</strong> que se marchó, bueno,<br />
¿qué se pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>cir?”<br />
andrew testa para The New York Times<br />
Foto <strong>de</strong> Margaret Thatcher, en Grantham, su pueblo natal.<br />
Rina Castelnuovo para The New York Times<br />
Yad Vashem produce materiales en más <strong>de</strong> 20 idiomas, está activo en 55 países y ofrece 70<br />
seminarios anuales a grupos <strong>de</strong> educadores. Es una institución peculiar y con mucha información.<br />
Para saber más <strong>de</strong>l Holocausto<br />
POR ETHAN BRONNER<br />
JERUSALÉN — A los estudiantes<br />
no se les libró <strong>de</strong> nada. Hubo<br />
sesiones sobre las discusiones nazis<br />
respecto <strong>de</strong> cómo matar a los<br />
judíos; sobre el arte <strong>de</strong> propaganda<br />
en el Tercer Reich; encuentros con<br />
sobrevivientes; una historia <strong>de</strong>l antisemitismo;<br />
y los dilemas que enfrentaron<br />
los lí<strong>de</strong>res <strong>de</strong> los consejos<br />
<strong>de</strong> guetos judíos.<br />
Era exactamente lo que podría<br />
esperarse <strong>de</strong> un seminario <strong>de</strong> 10<br />
días en Yad Vashem, el memorial<br />
y museo israelí <strong>de</strong>l Holocausto. La<br />
sorpresa era los estudiantes: 35<br />
profesores <strong>de</strong> Taiwán, ninguno <strong>de</strong><br />
ellos especialista en el tema, que en<br />
su mayoría nunca habían conocido<br />
a un judío. Sin embargo, las lecciones<br />
que algunos se llevaron consigo<br />
resultaron más asombrosas aún.<br />
“Antes <strong>de</strong> llegar, me sentía peor<br />
respecto al Holocausto”, dijo Jen<br />
Hsiu-mei, psicóloga y educadora <strong>de</strong><br />
preescolar. “Esta semana, aprendí<br />
que la gente se ayudaba entre sí<br />
en los campos <strong>de</strong> la muerte. Le da<br />
un nuevo sentido a los valores humanos.<br />
No era algo que esperara<br />
apren<strong>de</strong>r aquí: esperanza”.<br />
Siete décadas tras el Holocausto,<br />
el exterminio más sistemático<br />
en la historia humana ocupa un<br />
papel creciente y a menudo inesperado<br />
en la educación global. Yad<br />
Vashem, que abrió su rama <strong>de</strong> enseñanza<br />
internacional en los años<br />
1990, produce material en más <strong>de</strong> 20<br />
idiomas, está activo en 55 países y<br />
organiza 70 seminarios al año para<br />
grupos <strong>de</strong> educadores visitantes.<br />
Y si bien muchos consi<strong>de</strong>ran que,<br />
para tener relevancia universal, es<br />
importante impartir el Holocausto<br />
en el contexto <strong>de</strong> otros genocidios<br />
—en Ruanda, Armenia y Camboya—<br />
en Yad Vashem priva la ten<strong>de</strong>ncia<br />
opuesta: enfocarse más en<br />
los <strong>de</strong>talles humanos <strong>de</strong> la matanza<br />
<strong>de</strong> 6 millones <strong>de</strong> judíos.<br />
En los últimos años, Yad Vashem<br />
se ha convertido en un bullicioso<br />
campus <strong>de</strong> investigación, documentación,<br />
docencia y recuerdo<br />
dotado <strong>de</strong> un presupuesto anual<br />
<strong>de</strong> US$45 millones. En su centro<br />
educativo internacional, enlaces<br />
<strong>de</strong> alta tecnología le permiten ofrecer<br />
conferencias a públicos en el<br />
extranjero.<br />
Pero tal vez lo más sorpren<strong>de</strong>nte<br />
<strong>de</strong> todo sea la forma en que el Holocausto<br />
es enseñado y cómo las personas<br />
<strong>de</strong>l mundo lo interpretan.<br />
“El régimen nazi quería borrar<br />
toda huella <strong>de</strong>l pueblo judío”, explicó<br />
Dorit Novak, directora <strong>de</strong> la<br />
Escuela Internacional <strong>de</strong> Estudios<br />
<strong>de</strong>l Holocausto <strong>de</strong> Yad Vashem. “Si<br />
no compren<strong>de</strong>s eso, no pue<strong>de</strong>s enten<strong>de</strong>r<br />
el suceso. Sin embargo, paradójicamente,<br />
entre más ahondas<br />
en los hechos y <strong>de</strong>talles, menos específicamente<br />
judío y más universal<br />
se vuelve”.<br />
I<strong>de</strong>ntificar las etapas <strong>de</strong>l Holocausto<br />
—inició con el boicot <strong>de</strong> los<br />
negocios judíos, seguido por leyes<br />
contra la “sobrepoblación” en las<br />
escuelas alemanas— pue<strong>de</strong> ayudar<br />
a contener futuras ten<strong>de</strong>ncias<br />
a la discriminación y el genocidio.<br />
“El Holocausto nos enseña no<br />
solo qué tan bajo pue<strong>de</strong> caer la humanidad,<br />
sino también la gran<strong>de</strong>za<br />
que pue<strong>de</strong> alcanzar”, agregó. “Alguien<br />
en un campo que comparte<br />
su último mendrugo <strong>de</strong> pan con un<br />
amigo ilustra <strong>de</strong> una nueva manera<br />
la palabra amistad”.<br />
Novak recordó haberle preguntado<br />
a un grupo <strong>de</strong> bereberes marroquíes<br />
por qué motivo asistían a<br />
uno <strong>de</strong> los seminarios.<br />
“Indicaron que, en su país, reconstruían<br />
la historia bereber que<br />
había sido ignorada o perdida, y<br />
habían acudido a Yad Vashem para<br />
apren<strong>de</strong>r a recordar”, relató. Nicolás<br />
Paz Alcal<strong>de</strong>, español radicado<br />
en la al<strong>de</strong>a <strong>de</strong> Jerte, dijo que entendía<br />
el sentir. Dirige con su esposa<br />
un centro <strong>de</strong> enseñanza <strong>de</strong>l español<br />
para extranjeros y <strong>de</strong>scubrieron<br />
que la vieja casa <strong>de</strong> piedra que alberga<br />
su escuela había sido una sinagoga<br />
hasta que España expulsó<br />
a los judíos en el siglo XV.<br />
“Esto creó un vínculo muy directo<br />
y emotivo con la historia judía local”,<br />
expresó. “La gente se ha vuelto<br />
insensible a la historia y sentíamos<br />
una obligación moral <strong>de</strong> darle<br />
vida al Holocausto para ella”.