6se refiere al impacto del consumo dela leña en los ecosistemas forestales.Según la Comisión Nacional de Energía,cerca de 15 millones de metros cúbicossólidos de leña son consumidoscada año en el país. Una proporciónsignificativa de esta leña (61%) provienede especies y/o bosques nativos.En la gran mayoría de los casos, la extracciónse realiza sin control, en untrabajo de hormigas que conduce auna masiva deforestación, desertificacióny degradación de los suelos, ellodebido a que la demanda de biomasaexcede la capacidad que tiene la vegetaciónde regenerarse.En el pasado, los requerimientos deleña provenientes de la minería, lasfundiciones, el ferrocarril y las plantasde destilación, entre otras actividades,contribuyeron fuertemente a ladestrucción del bosque nativo. Juntoa estos factores, hay que considerarla incidencia que ha tenido y tiene laexpansión de la frontera agrícola y depastoreo y, más recientemente, el establecimientode plantaciones comercialesde pino y eucalipto en superficiesde bosque nativo.Hay zonas con ecosistemas frágiles enlas cuales la presión constante sobrela vegetación nativa para obtener diariamenteleña para uso doméstico haconducido a un severo proceso de desertificación,como ocurre en el NorteChico. El problema, sin embargo, tiendea generalizarse. En efecto, la desertificaciónalcanza el 63% del territorionacional (una superficie aproximadade 47,3 millones de hectáreas) y afectadirectamente la vida de 1,5 millones depersonas (13% de la población).La pobreza es tanto una causa comouna consecuencia de la degradaciónde las tierras. La pobreza induce a lapoblación a sobreexplotar los recursosnaturales, lo que genera un círculo viciosode deterioro de las tierras y mayorpobreza. Los ecosistemas se venafectados y con ello tienden a perdersus múltiples funciones: las ambientales(protección del suelo, el agua y labiodiversidad), las sociales (generaciónde empleo para el sustento de la población)y las económicas (producción demadera, bienes y servicios), entre otras.Hay todavía un impacto medioambientalque mencionar, referido a laliberación de dióxido de carbono (CO2)como resultado de la combustión de laleña. El exceso de dióxido de carbonoen la atmósfera contribuye al efectoinvernadero y al problema del cambioclimático causado por un mayor calentamientoglobal del planeta. De ahí lanecesidad de reducir las emisiones deCO2, lo que ha sido materia del acuerdointernacional conocido como el Protocolode Kyoto, ratificado por Chile.La leña seguirá siendo, sin embargo,un combustible muy importante en laspróximas décadas. Una estrategia viableen el corto y mediano plazo para reducirla presión sobre los ecosistemas forestaleses disminuir significativamenteel consumo de masa vegetal leñable,mediante la utilización de artefactos dereemplazo más eficientes, y la transformaciónde la matriz de consumo energéticofamiliar, en la medida de lo posible,a través de la sustitución de la leñapor otras fuentes de energías renovablesno convencionales, como la energía solar,la eólica y el biogás.Lo anterior se condice con una recomendaciónsobre políticas en áreasrurales contenida en el documento dela CEPAL “Contribución de los serviciosenergéticos a los Objetivos de Desarrollodel Milenio y a la mitigación de lapobreza”, según la cual “hay que propenderal reemplazo de la leña comofuente energética donde sea posible; y,cuando su uso sea inevitable, hay quebuscar la sostenibilidad mediante elempleo de equipamientos eficientes”.Otro aspecto que forma parte de lassoluciones es la necesidad de realizarun manejo sostenible del bosque y matorralnativos como fuente de leña, demodo de permitir su recuperación, y,junto con ello, introducir plantacionescon fines energéticos (árboles o arbustosleñables, de rápido crecimiento) enzonas con suelos ya degradados próximasa los centros de consumo de leña.Estos puntos de una estrategia posibleya fueron aplicados con éxito porel “Programa de recuperación ambientalcomunitario para combatir ladesertificación”, ejecutado en Chilepor el PNUD, con apoyo financiero dela Unión Europea y el Fondo para elMedio Ambiente Mundial, a través delPrograma de Pequeños Subsidios, entrelos años 2007 y 2011. Sesenta y dosproyectos fueron implementados encomunidades rurales, de los cuales el65% se enfocó a mejorar la eficienciaenergética de la leña, incorporar el usode energías renovables no convencionales(ERNC) y desarrollar iniciativasde reforestación.Los resultados fueron alentadores, yaque las soluciones energéticas solaresy los artefactos mejorados a leña utilizadospor las familias participantes enlos proyectos permitieron una reducciónpromedio de leña de un 60%, ademásde una disminución de un 42% enel consumo de gas licuado y un 78%en electricidad. El ahorro promedio deleña mensual por familia fue de 345kg, con lo cual disminuyó la presiónsobre la vegetación nativa. En dinero,el ahorro mensual fue de alrededorde 30 mil pesos, equivalente al 26%del ingreso de las familias del primerdecil. Mejoró, igualmente, el ambienteintradomiciliario, al evitarse la contaminaciónproducida por el humo.De esta manera, los resultados alcanzadosvalidaron el rumbo seguido y quedóplanteado el desafío de dar continuidada las acciones. Fue así que se definióLa leña seguirá siendoun combustible muyimportante en laspróximas décadas. Unaestrategia viable en elcorto y mediano plazopara reducir la presiónsobre los ecosistemasforestales es disminuirsignificativamente elconsumo de masa vegetalleñable, mediante lautilización de artefactos dereemplazo más eficientes,y la transformación dela matriz de consumoenergético familiar.7
Un aspecto importantepara el éxito delas iniciativas demejoramiento energéticoes la capacitación,mediante talleres prácticosen el terreno mismo.Otro aspecto clave esla participación: ningúncambio de situaciónsignificativo podrá lograrsesin la participación activay organizada de lasfamilias involucradas.una segunda fase de trabajo, a cargo delactual “Programa de lucha y apoyo a políticaspúblicas contra la desertificación,aplicado en comunidades y municipiosrurales de zonas ecológicas áridas a subhúmedassecas en América del Sur”, 2011- 2015, ejecutado por el PNUD, con apoyofinanciero de la Unión Europea.A través de este catálogo, el Programa,en su nueva fase, busca difundirlas características y ventajas de losartefactos mejorados a leña y las solucionesenergéticas solares y, juntocon ello, procura promover su uso, conmiras a lograr un alcance más amplio.Las tecnologías presentadas se definencomo “socialmente apropiadas” (TSA),concepto que engloba una serie de características.Una TSA tiene como objetivoresolver un problema local utilizando losrecursos disponibles en el mismo territorio;toma en cuenta el conocimiento y lacultura de la comunidad; es respetuosadel medioambiente en el que se inserta;es accesible, de bajo costo, fácil comprensión,manejo y mantenimiento; y,por su sencillez, en muchas aplicacionespuede ser autoconstruida por el usuario oproducida a pequeña escala por talleresartesanales a nivel local. Por todo esto esuna tecnología no solamente apropiada,sino, también, “apropiable”. En otras palabras,una tecnología por y para la gente.Estas tecnologías implican no solamentebeneficios ambientales, sino también ysobre todo un mejoramiento en la calidadde vida de las familias y comunidadesrurales y un alivio en las labores cotidianasde las personas. En este sentido,tienen un fuerte componente social.Un aspecto importante para el éxito delas iniciativas de mejoramiento energéticoes la capacitación, mediantetalleres prácticos en el terreno mismo.En estos talleres, las comunidades adquierennuevos conocimientos y habilidadesy conocen otras experiencias.Otro aspecto clave es la participación:ningún cambio de situación significativopodrá lograrse sin la participaciónactiva y organizada de las familiasinvolucradas. En este sentido, el Programa,en su primera fase, trabajó deacuerdo a una metodología de intervenciónbasada en proyectos concursablesejecutados por las mismas organizacionessociales de base.La transferencia directa de recursos a lasorganizaciones para la ejecución de susproyectos y el carácter autogestionariode éstos permitió generar capacidadestanto a nivel de la propia organizacióncomo de los destinatarios finales. Lasorganizaciones se dinamizaron y fortalecierony quedó en ellas una capacidadinstalada para impulsar a futuro otrosemprendimientos con mayor autonomía.En cuanto a la perspectiva de género, elcarácter autogestionario de los proyectosfavoreció la participación en igualdadde mujeres y hombres.Estos enfoques que contemplan aspectosde capacitación, participación,autogestión, perspectiva de género yfortalecimiento del capital social sonclaves para que los cambios sean efectivosy para asegurar la sostenibilidadde los procesos de desarrollo.La información contenida en esta publicaciónse encuentra organizada encuatro capítulos. El capítulo uno presentauna gama de tecnologías quecomprende los artefactos mejorados aleña y la cocina bruja (una suerte determo que permite un considerableahorro de combustible).El capítulo dos presenta una serie desoluciones solares de distinto tipo, paracocinar y hornear alimentos; deshidratarfrutas, verduras, hongos, hierbasmedicinales y condimentos; disponerde ducha con agua caliente; bombearagua de un pozo y obtener electricidadpara la vivienda, entre otras opciones,todo ello a partir de la energía del sol.El capítulo tres reúne una serie de recetasde cocina que pueden ser preparadasutilizando las tecnologíasdescritas. El propósito es demostrar,a partir de experiencias realizadas condistintas comunidades, que es factiblecocinar, por ejemplo, con el sol y lograrcomo resultado una comida óptima.El capítulo cuatro incluye una serie derecomendaciones acerca de cómo canalizarel interés de las personas, organizacionessociales de base, municipios,entidades privadas de desarrollo, etc.,en las soluciones energéticas presentadas,con miras al diseño e implementaciónde iniciativas concretas que permitanllevarlas a la práctica.Finalmente, en los anexos, se da a conocerel contenido del DVD adjunto,consistente en información ampliadasobre el tema. El Programa se complaceen poner a disposición de las personas,organizaciones sociales e institucionesesta publicación y espera que puedaaportar al doble objetivo de hacer máseficiente el uso de la leña (reduciendo,así, su consumo y los impactos sobrelos ecosistemas forestales) e impulsar,a la vez, la utilización de la energíasolar, todo ello con el fin de contribuiral mejoramiento de la calidad de vidade las familias, especialmente rurales,y, en un marco más amplio, a la luchacontra la desertificación.8 9