puede conocer a Dios y a su enviado y confiar en ellos más quelos miembros de su pueblo. Es bonito que eso no le escandaliza,ni le extraña, sino que le admira: se abre a ello positivamen<strong>te</strong>,con simpatía, le parece muy bien <strong>ha</strong>ber encontrado en él esa <strong>fe</strong>.Es<strong>te</strong> encuentro es a la distancia, no solo porque no se encuentranfísicamen<strong>te</strong>, sino por la distancia social, política, religiosa yeconómica, que <strong>ha</strong>bía entre ambos, una distancia que parecíaimposible de mediar. Parecería que dos personas así nunca seencontrarían. La mediación es el criado en<strong>fe</strong>rmo; aunque másprofundamen<strong>te</strong>, es la misericordia del centurión y la de Jesús.Pero también es su apertura mental, su simpatía <strong>ha</strong>cia ese puebloocupado, su a<strong>te</strong>nción <strong>ha</strong>cia lo que pasaba en él, que lo llevó a<strong>te</strong>ner ese conocimiento in<strong>te</strong>rno tan profundo de Jesús, esa <strong>fe</strong>verdadera en él.El encuentro se dio a través de sus palabras, tan concretas, enlas que, a partir de su propia experiencia como centurión, leda a conocer a Jesús el concepto que tiene de él, de su poderabsoluto. Jesús se admira de que esa persona, al parecer tanprofana, esté tan al tanto de su persona y de su misión. Es unencuentro en profundidad que llena a Jesús de alegría.En esta escena, queremos destacar dos <strong>te</strong>mas: el de la misericordiay el de la <strong>fe</strong>. El <strong>te</strong>ma de fondo sería la relación entre ambos, sumutua imbricación.An<strong>te</strong> todo, <strong>ha</strong>bría que reconocer que, el impulso primigenio quepone todo en movimiento no es la <strong>fe</strong> sino la misericordia. Sinmisericordia no <strong>ha</strong>y <strong>fe</strong>, porque no <strong>ha</strong>y salida de sí, ni acudir alque puede poner remedio. Si la <strong>fe</strong> no es creer en verdades que25
escapan a la razón sino creer en personas, en es<strong>te</strong> caso en lapersona de Jesucristo, como portador de la misericordia de Dios,no se puede creer en Jesús si no se necesita y busca afanosamen<strong>te</strong>la salud del criado en<strong>fe</strong>rmo, movido por la misericordia.Si vivo tranquilo en lo mío, en el caso del centurión, en miestatus, en mi poder, en mis relaciones, y, en otros casos, en misposesiones o en mi in<strong>te</strong>gridad moral; si vivo autocentrado porqueme basto para salir a flo<strong>te</strong> en mi vida, si estoy satis<strong>fe</strong>cho, o si,aun en el caso de que no lo esté, me a<strong>te</strong>ngo a mis posibilidades,no puedo <strong>te</strong>ner <strong>fe</strong>, porque no <strong>te</strong>ngo ninguna propensión a salirde mí y confiar en otra persona y menos aún, a ponerme en susmanos.Si estoy autocentrado y veo que la relación con otro puede serventajosa para mí, trato de establecer una relación de mutuaconveniencia. En esa relación cada quien busca su propioprovecho, aunque pueda ser una relación muy querida y buscada,en la que la complacencia mutua alcanza cotas muy altas, inclusopuede darse un deseo muy in<strong>te</strong>nso (es lo que dice la canciónvenezolana: “cuando las ganas se juntan”); pero en ese tipo derelación está excluida la <strong>fe</strong>, que requiere salir de sí y ponerse enmanos del otro.La <strong>fe</strong> requiere el amor, que es lo único capaz de descentrarradicalmen<strong>te</strong>, porque consis<strong>te</strong> en buscar el bien del otro por elotro mismo, no por mi propia per<strong>fe</strong>cción, ni por congruenciacon mi conciencia moral, ni por mi satisfacción, sino porqueafirmo incondicionalmen<strong>te</strong> al otro. Aunque no basta el amor, yaque cuando el amor, la entrega al otro, no contiene la confianzaen él, porque a través de muc<strong>ha</strong>s experiencias negativas se lo26
- Page 3 and 4: 234T828Trigo, PedroTu fe te ha salv
- Page 5 and 6: ÍNDICELECCIÓN INAUGURAL 2013TU FE
- Page 7: 14. El experto en tortura confiesa
- Page 10 and 11: sus personas, del mismo modo incond
- Page 12 and 13: proclives a algún tipo de arrianis
- Page 14 and 15: perdón, como hemos dicho, con todo
- Page 16 and 17: como sus vecinos, que de ellos no p
- Page 18 and 19: se habría hecho notar. Pero lo que
- Page 20 and 21: orilla. Le pusieron un cojín en la
- Page 22 and 23: estaba culminando su entrega incond
- Page 24 and 25: que les hizo concebir esperanza. Pe
- Page 26 and 27: 4. La fe como relación mutua: la m
- Page 28 and 29: cielo, de la curación? Así parece
- Page 30 and 31: muestra más palpable de que el cen
- Page 34 and 35: ha dejado por imposible, no humaniz
- Page 36 and 37: le hace caso. Los discípulos, para
- Page 38 and 39: Pero si partimos de una perspectiva
- Page 40 and 41: Jesús había sido invitado a comer
- Page 42 and 43: Eso es lo que está pasando. Por es
- Page 44 and 45: se busca esa relación, precisament
- Page 46 and 47: 8. De la fe en Jesús, a convertirs
- Page 48 and 49: Jesús no se da por enterado de ese
- Page 50 and 51: todo lo que ha hecho. La que no que
- Page 52 and 53: Sus paisanos se abren a la proclama
- Page 54 and 55: les da sus ojos para que vean a su
- Page 56 and 57: Jesús que el padre ha llegado hast
- Page 58 and 59: queda reducido a lo mínimo indispe
- Page 60 and 61: personalmente a ella. Así creyó e
- Page 62 and 63: camino para que lo curara. Por eso
- Page 64 and 65: acostumbraban a escenificar los rey
- Page 66 and 67: de su hijo para que mediante él, e
- Page 68 and 69: seis obispos, a cientos de curas y
- Page 70 and 71: Al lavarse los ojos, lleno de fe, c
- Page 72 and 73: También hay maestros de la ley que
- Page 74 and 75: 14. El experto en tortura confiesa
- Page 76 and 77: Pero es que, además, la comunidad
- Page 78 and 79: personal, y, por eso, tiene el cora
- Page 80 and 81: de acuerdo en torno al mesianismo,
- Page 82 and 83:
intachables, les previene a sus dis
- Page 84 and 85:
como hemos insistido, los apóstole
- Page 86 and 87:
era la última palabra de Dios sobr
- Page 88 and 89:
la tortura y no metiera el dedo por
- Page 90 and 91:
desataron el proceso, vamos a poner
- Page 92 and 93:
no se impone por su insistencia mac
- Page 94 and 95:
a la causa del reinado (que es la a
- Page 96 and 97:
Dr. Pedro Trigo, S. J.Biografía* 1
- Page 98 and 99:
observaciones críticas y proyectos
- Page 101:
Esta publicación fue impresa en lo