13.07.2015 Views

Una minga para el postdesarrollo - The University of North Carolina ...

Una minga para el postdesarrollo - The University of North Carolina ...

Una minga para el postdesarrollo - The University of North Carolina ...

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

<strong>Una</strong> <strong>minga</strong> <strong>para</strong> <strong>el</strong> <strong>postdesarrollo</strong>registrar una observación. Creo que lo que también debería ser explicadoes <strong>el</strong> éxito que alcanzó esa construcción d<strong>el</strong> desarrollo como<strong>para</strong>digma referencial <strong>para</strong> <strong>el</strong> conjunto de los latinoamericanos.Durante generaciones, nacimos, crecimos, nos formamos, comenzamosa representarnos al mundo en sociedades que proclamabancomo objetivo central de sus políticas al desarrollo. Me parece que<strong>el</strong> análisis crítico propuesto por Escobar no se completa sin reflexionaren que <strong>para</strong> que esa propuesta hegemónica, esa geografía imaginariaque aterrizó sobre los latinoamericanos a partir de mediadosd<strong>el</strong> siglo XX, tuviera tanto éxito, <strong>para</strong> que llegase a ser adoptadacomo gramática interpretativa de nuestros problemas y de nuestrasnecesidades por una amplia generalidad de actores políticos y sociales,fue porque de alguna forma se vinculó con ansiedades, con angustiaspresentes en nuestro imaginario político y social, que quizáshasta ese momento no habían recibido un nombre, un s<strong>el</strong>lo identificador.El desarrollo pudo «colonizar la realidad» porque se instalóen un lugar de deseo en r<strong>el</strong>ación con las esperanzas y las frustracionesde los latinoamericanos. El pr<strong>of</strong>undo y bien documentado librode Escobar deja a veces la impresión de que <strong>el</strong> desarrollo aparecióen nuestras latitudes apenas como una construcción unilateral, impuestade arriba hacia abajo, y que gobiernos, políticos, int<strong>el</strong>ectualesy pueblos latinoamericanos lo hubieran aceptado casi como porexceso de pasividad (con lo que volveríamos a la naturalización d<strong>el</strong>as carencias d<strong>el</strong> subdesarrollado infantil).Corresponde recordar, también, que la problemática d<strong>el</strong> desarrolloen <strong>el</strong> pensamiento latinoamericano admite otras genealogías, loque Escobar no desconoce. Desde la primera guerra mundial y, específicamente,a partir de 1930, algunos países de la región (justamenteaqu<strong>el</strong>los que en la clasificación clásica de Fernando Henrique Cardosoy Enzo Faletto tuvieron <strong>el</strong> mayor grado de control nacional d<strong>el</strong> sectorexportador), comenzaron a aplicar espontáneamente una serie deinstrumentos de política económica anti-cíclica, intentando mantener<strong>el</strong> niv<strong>el</strong> de actividad frente a la caída d<strong>el</strong> volumen y d<strong>el</strong> valor de susexportaciones, pero que también implicaron prácticas e institucionesde regulación. Como efectos de estas políticas, inicialmente empíricasy defensivas, pero que gradualmente se consolidaron como orienta-12

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!