EDICION 113

Saber+ Moda
Los looks
de las reinas más famosas
AUNQUE LAS MONARQUÍAS ACTUALMENTE
CUMPLEN UN PAPEL CASI SIMBÓLICO, SIGUEN
SIENDO RELEVANTES EN LA SOCIEDAD, POR
EJEMPLO, IMPONIENDO TENDENCIAS EN LA
MODA. CONOCE LAS PREFERENCIAS DE ESTAS
7 MUJERES DE LA REALEZA.
Reina Isabel II
de Inglaterra
Nacida como Elizabeth Alexandra
Mary, el 21 de abril de 1926 en Londres,
lleva 62 años siendo reina de
Gran Bretaña y sus estados asociados.
Tanto tiempo en el ojo público
ha hecho que sus atuendos marquen
tendencia por generaciones. Los vestidos
que usó en los años 50 eran de
cintura ajustada y ceñida, de acuerdo
con el estilo impuesto por Christian
Dior. Fiel a los tonos monocromáticos,
cuando le gusta un color lo usa
de pies a cabeza, y tiene preferencia
por los que son vivos, como azules,
amarillos, verdes intensos y morados.
Su afición por los sombreros se
convirtió en su marca personal; los
adorna con flores o plumas que nunca
dejan de llamar la atención.
María Antonieta de Austria
La vida de María Antonieta se divide
en abundancia y tragedia. Ícono del
despilfarro para algunos y referente de
la moda para otros, lo cierto es que dio
mucho de qué hablar. María Antonieta
fue la primera en tener una “ministra
de moda” –algo así como una asesora de
imagen–, quien acudía al palacio de Versalles
por lo menos dos veces por semana y le
aconsejaba qué vestidos usar. Introdujo telas más
ostentosas, como la seda o el terciopelo en lugar del paño;
también utilizó muchos encajes de hilos dorados y plateados.
Sus vestidos tenían escotes más pronunciados y ajustados en
la cintura para resaltar la silueta, e incluso impuso una tendencia
en el maquillaje: labiales de un rojo muy intenso.
Diana de Gales
El look de Lady Di tiene un antes y un después marcado por
el divorcio del príncipe Carlos de Gales. Si dentro
del matrimonio prefería llevar faldas
debajo de las rodillas y blusas con lazos
grandes, una vez divorciada optó por
faldas más cortas y grandes escotes.
Sin embargo, nadie podrá olvidar
el vestido que usó la noche de su
boda: confeccionado en seda de
color marfil con 10.000 perlas incrustadas
y una cola de 25 metros
de largo. En su nueva etapa de soltera,
el negro fue su color favorito,
así como los tonos pastel. Solía llevar
rojo o azul eléctrico en fiestas más sofisticadas.
Prefería las lentejuelas y los
brillos, que destacaban sobre su piel.
E 16 Revista Mariela www.marielatv.com