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SELECCIONES <br />
No encontraron lo que buscaban,<br />
así que le pidieron a Ma que los llevara<br />
a Target, tienda ubicada a 45<br />
minutos. <strong>El</strong> chofer no tenía forma <strong>de</strong><br />
saber que buscaban, con <strong>de</strong>sesperación,<br />
teléfonos, ropa y algo parecido<br />
a un plan. Por fin salieron <strong>de</strong> Target.<br />
—La casa <strong>de</strong> mi madre está a la<br />
vuelta —mintió Duong—. Llévenos,<br />
por favor.<br />
Las calles estaban oscuras y solitarias.<br />
Minutos <strong>de</strong>spués, Duong señaló<br />
una <strong>de</strong>teriorada plaza comercial:<br />
—Deténgase aquí —dijo.<br />
Mientras Ma estacionaba <strong>su</strong> Honda<br />
Civic, Tieu le dio una pistola a Duong,<br />
MA ESTABA CONVENCIDO DE<br />
QUE IBA A MORIR, PERO NO<br />
SABÍA CÓMO NI CUÁNDO.<br />
con la que apuntó al taxista. La mente<br />
<strong>de</strong> Ma se aceleró; Nayeri gritaba:<br />
—¡Pum, pum, viejo!<br />
Pasaron a Ma al asiento trasero.<br />
Ahora Tieu le apuntaba al abdomen<br />
con el arma. Nayeri saltó al asiento<br />
<strong>de</strong>l chofer y condujo hasta un motel.<br />
Cuando llegaron, Ma estaba convencido<br />
<strong>de</strong> que iba a morir, pero no<br />
sabía cómo ni cuándo. En una habitación<br />
estrecha, vio cómo Nayeri, quien<br />
sospechaba era el lí<strong>de</strong>r, se acostó cuan<br />
largo era en una <strong>de</strong> las dos camas. Le<br />
or<strong>de</strong>naron a Ma que compartiera la<br />
otra con Duong; Tieu dormiría en el<br />
<strong>su</strong>elo junto a la puerta, con la pistola<br />
bajo la almohada. Para Ma, no había<br />
escapatoria y, con el pavor que sentía,<br />
le era difícil conciliar el <strong>su</strong>eño.<br />
En la mañana, Duong encendió el<br />
televisor, don<strong>de</strong> vieron la noticia <strong>de</strong><br />
una fuga <strong>de</strong> la prisión.<br />
—¡Miren, somos nosotros!— gritó.<br />
Una foto <strong>de</strong>l archivo policial con<br />
la cara <strong>de</strong> los tres fugitivos ocupaba<br />
toda la pantalla. En ese momento, Ma<br />
se enteró <strong>de</strong> que buscaban a <strong>su</strong>s compañeros<br />
<strong>de</strong> habitación.<br />
SE HABÍAN FUGADO un día antes, el<br />
22 <strong>de</strong> enero <strong>de</strong> 2016. La huida inició<br />
luego <strong>de</strong> que Duong, tumbado<br />
en un catre <strong>de</strong> la celda <strong>de</strong>l Módulo<br />
F <strong>de</strong> la Prisión <strong>de</strong>l Condado<br />
<strong>de</strong> Orange, observara al<br />
guarda finalizar <strong>su</strong> recuento a<br />
las 5 <strong>de</strong> la madrugada.<br />
Enseguida tomó las herramientas<br />
que había estado<br />
reuniendo y caminó, sigiloso, hasta la<br />
parte trasera <strong>de</strong>l área <strong>de</strong> alojamiento,<br />
don<strong>de</strong> lo esperaban Nayeri y Tieu. Allí,<br />
escondidos tras una litera, aflojaron<br />
una rejilla con los utensilios. Atravesaron<br />
el hueco arrastrándose y avanzaron<br />
lentamente por un pasadizo<br />
metálico lleno <strong>de</strong> tubos y cables hasta<br />
que se toparon con un muro. Usando<br />
la tubería, escalaron un conducto <strong>de</strong><br />
ventilación que daba a una portezuela.<br />
La abrieron <strong>de</strong> un empujón.<br />
Ya en la azotea, ataron una cuerda<br />
<strong>de</strong> sábanas hechiza y <strong>de</strong>scendieron<br />
cuatro pisos. No sonó la alarma;