Andrew Munoz y 04•2018 Jason Storie. | 101
SELECCIONES ESTÁ LLOVIENDO SIN PARAR. Jason Storie lo nota, pero le tiene sin cuidado. Oye la lluvia mientras se alista para explorar cuevas con cinco amigos en un sitio lejano, 130 kilómetros al noroeste de su hogar, en Duncan, en la isla de Vancouver, Canadá. Entraremos, no es una caminata, se dice. No me preocupa un poco de lluvia. Se pone una camiseta, dos sudaderas, un par de overoles, calcetines de neopreno, botas y chaqueta impermeables. Bajo el brazo lleva, orgulloso, su nuevo casco con linterna, las primeras piezas de equipo que no le ha prestado su amigo Andrew Munoz. —Sigue durmiendo —susurra y se despide de Caroline, su esposa, con un beso. —Que te diviertas. Ten cuidado. —Siempre. Son las 6 a. m. del 5 de diciembre de 2015. Jason es un novato en el deporte, apenas ha explorado cuevas cuatro veces. Esta será la incursión más difícil hasta ahora: la cueva Cascade, en el monte cercano a la pequeña ciudad de Port Alberni, unos 190 kilómetros al noroeste de Victoria, en la isla de Vancouver. Su nivel de dificultad es tan alto que la entrada está bloqueada por una puerta metálica rectangular en el suelo, cuya llave solo se consigue si todos los que quieren entrar firman una exención de responsabilidad. Mide 1.1 kilómetros de largo y 103 metros de profundidad (podría albergar un edificio de 30 pisos); está llena de curvas y apreturas, entre ellas un angosto pasaje que lleva a una pendiente corta y estrecha llamada Bastard’s Crawl, que a su vez conduce a una cascada de apenas 1 metro de ancho, conocida como Double Trouble [Problema Doble] porque una saliente divide la corriente en dos. Va a estar increíble, piensa. ¡Un chorrito de agua nunca me ha asustado! Jason es el raro del grupo: tiene menos experiencia y, a sus 43 años, más de una década que el resto. Es robusto como un luchador, no delgado y fuerte como el resto. Lleva la cabeza rapada, tiene dos hijos pequeños, un título en dramaturgia y una empresa de limpieza de ventanas y alcantarillas en Duncan. Fue Andrew, de 33 años, quien lo introdujo al deporte; él es un Jason siente asombro. Bajo <strong>tierra</strong>, se transforma en explorador de un mundo antiguo y cambiante. FOTO DE LA PORTADILLA PREVIA Y LA PÁGINA ANTERIOR: ROB CAMPBELL