You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
diferentes. O estamos en esta materia del lado de Cristo o estamos
del lado del enemigo. Y si continuamente extraemos rayos de la
divina luz de gloria, los ángeles de Dios están a nuestro alrededor y
hay una atmósfera que rodea al alma humana. Nuestra actitud,
nuestras palabras, dan testimonio de una conversión genuina a todos
los que entran en la esfera de nuestra influencia. "Y el Espíritu y la
Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed,
venga".
Ahora que somos ramas de la Vid viviente seremos nutridos
por la savia que fluye de la Vid. Fluye a todas las ramas todo el
tiempo, y cada rama llevará fruto para la gloria de Dios. "A vuestro
Padre le ha placido" "que llevéis mucho fruto". Bien, entonces,
¿cuál es nuestra actitud? Debe ser una actitud de fe viva.
No puede ser demostrado por el razonamiento
"Yo quiero -dice alguien- razonar este asunto". Bien, razónalo
si puedes. "El viento sopla de donde quiere", y tú oyes su sonido,
pero no puedes explicarlo. Y tampoco puedes explicar cómo obra
Dios en el corazón humano. No puedes explicar esta fe que se aferra
firmemente a los méritos de la sangre de un Salvador crucificado y
resucitado para introducir la justicia de Cristo en tu vida. Cubierto
con la justicia de Cristo y no con tu propia justicia, no dependerás de
lo que puedes hacer o de lo que harás. ¿No sabes que nada puedes
hacer sin Cristo? "Separados de mí -dice El- nada podéis hacer".
Juan 15:5.
66