El quebrantamiento del hombre exterior y la liberacion del espiritu - Watchman Nee
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ministerio de la palabra. Sin el ministerio de la palabra, los problemas
espirituales de los hermanos no podrían resolverse. Esta es la seria
responsabilidad que pesa sobre nosotros. La provisión de la iglesia depende de
que seamos personas útiles a Dios.
Supongamos que cierta enfermedad siempre provoca temperaturas de 39
grados. El doctor no puede, con el solo contacto de su mano, decir que el
paciente tiene una temperatura de aproximadamente 39 grados. Tenemos que
ser muy exactos para estar seguros de determinar con certeza la temperatura
exacta antes de afirmar que el paciente padece la enfermedad asociada con esa
temperatura. Ya que Dios nos usa para diagnosticar la enfermedad de un
creyente, necesitamos la debida capacitación por parte del Señor. Aun así, es
muy arriesgado diagnosticar con base en nuestra percepción, nuestras ideas,
nuestra opinión o nuestro entendimiento espiritual; ya que éstos pueden estar
equivocados. Pero si somos exactos y confiables, el Espíritu de Dios fluirá de
nosotros.
El comienzo de toda obra espiritual se basa en un proceso de ajuste y calibración
ante el Señor. Todo termómetro debe ser fabricado de acuerdo con ciertas
normas. Debe ser probado cuidadosamente, y satisfacer el nivel de calidad para
que pueda ser confiable y exacto al tomar la temperatura. Ya que nosotros
funcionamos como termómetros de Dios, debemos ser confiables y valiosos y,
para ello, tenemos que ser calibrados por el proceso más estricto de
quebrantamiento. Ya que nosotros somos los médicos y los instrumentos de
Dios, debemos aprender estas lecciones cabalmente.
COMO CONOCER AL HOMBRE:
EN CUANTO AL PACIENTE
Para determinar la condición de un paciente, debemos tomar en cuenta dos
puntos de vista: el paciente y nosotros mismos.
En cuanto al paciente, ¿cómo podemos determinar su enfermedad? Si queremos
detectar su enfermedad primero debemos descubrir su característica más
notoria, la más obvia. Esta saltará a la vista aunque trate a toda costa de
ocultarla. Una persona orgullosa será delatada por su propio orgullo; aunque
trate de actuar humildemente, no podrá disfrazar su orgullo. Una persona triste
expresará su tristeza aun en su sonrisa. Un hecho invariable es que lo que una
persona sea determinará tanto la expresión de su rostro como la impresión que
deje en todo el que tenga contacto con ella.
La Biblia describe en muchas formas la condición espiritual del hombre.
Algunos son iracundos, otros obstinados y otros retraídos. De hecho, hay una
larga lista de términos para describir la condición del hombre: frívolo, oprimido,