Numero 103 - Escuela de Psicología Social de Montevideo

La hospitalidad
en las instituciones
Diana Markwald
Arte Terapia como
dispositivo grupal
Adriana Farias
Voces y silencios
de la memoria
Denise Najmanovich,
Silvia Labayru
Dispositivo
analizador
de las prácticas
de formación
Virginia Schejter y equipo
El aporte de
Milton Erickson
Roberto Kertész
El misterio de lo
humano en el
desgarro social
Ricardo Arias
El grupo como
significante
María Guidobono
103
Año 11 • Nº 103 • Agosto de 2008 • $ 6.-
El mejor lugar
del mundo
es aquí
y ahora.
Gilberto Gil

Director
Director
Román Mazzilli
Secretario de redacción
Walter Vargas
Redacción
Luis Gruss, Patricia Mercado,
Denise Najmanovich,
Daniel Seghezzo
Administración y Publicidad
María Eugenia Conde,
Pablo Scarfo
Colaboran en esta edición
Diana Markwald, Verónica
Scardamaglia, Ricardo Arias
María Guidobono, Adriana Farias,
Silvia Labayru, Viviana Rosenzwit,
Virginia Schejter, Alicia Zappino,
Marta Koltan, Florencia Ferrari,
Trinidad Cocha, Juan Disante,
Máximo Lameiro, Roberto Kertész
Darío Miranda, Enrique Guinzberg,
Marcelo Miceli.
Redacción
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El trazo singular
La hospitalidad
en las instituciones
Diana Markwald
Acerca de la hospitalidad
dianamarkwald@fibertel.com.ar
Seamos hospitalarios dice nuestro primer mandato social. La
aparición de la palabra articulada en uno de los primeros relatos
de Occidente hace honor a ese mandato. Hago referencia
aquí a La Odisea de Homero.
Saliendo de la oscuridad, de una época de guerra y destrucción,
Homero pone en el centro argumental de la Odisea la ley de hospitalidad.
Consumir pan es civilizado, quién consume carne humana no ara
los campos.
Así, dicha ley en sí misma habla de una época en que los hombres
no araban los campos y vivían como bestias.
Que dicha ley figure en primer plano en el relato nos habla de la
necesidad de imponerla y diferenciar ese campo bestial que arrasó
con la civilización anterior y todas sus instituciones.
Quizás, el retorno de esta ley como tema de mi trabajo obedezca
a la múltiple necesidad de señalar su valor en el momento presente.
Los ciclos de barbarie y de civilización que se alternan en la historia
de la humanidad nos han llevado a pensar también que civilización
y barbarie son las dos caras que la cultura tiene. Es decir cultura,
malestar en la cultura, recuperación de lo que la cultura reprime
por vía de la guerra y la destrucción.
Encontramos así, razones para pensar que en el tema que nos concierne,
dicha cuestión se reproduce y por las mismas razones.
Que cada institución esté obligada a respetar la ley de hospitalidad
supone la posibilidad de que esa institución perdure, que nuevos
miembros sean albergados y hallen cierta satisfacción en ella.
Si algo hay que obligar es porque también puede no darse.
Pero dónde ocurre la barbarie? Es necesaria la barbarie institucional
para una nueva vuelta de tuerca civilizatoria?
¿Dónde ocurre la barbarie?
Si pensamos que barbarie es no respetar la ley de hospitalidad,
deberíamos concluir que ella está situada, como en La Odisea, en
lo que llamaremos “la cueva del cíclope” y que toda institución
tiene una.
En dicha cueva, están cautivos los viajeros y la criatura de un
solo ojo, que les dirige su mirada cíclopea para ver a cuál se come
primero.
Luego de perder algunos compañeros, Ulises encuentra la forma
de escapar de la encerrona trágica en la que se encuentra, apelando a
lo que en él sí es un producto de la cultura: dice palabras astutas
que engañan a la bestia y logra para él y sus compañeros la vía de
salida. Al preguntársele cómo se llama él dice “Nadie” y con esto
logra desconcertarlo.
Mas allá del valor analógico que pueda tener evocar este episodio,
parece pertinente para situar realmente a la institución
como el lugar que alberga tanto la cueva del cíclope
como el giro de astucia de algunos de sus integrantes.
Dos fases, dos posiciones que, quiera o no la institución, forman
parte del legado de la cultura.
La figura del cíclope no es otra que la del abuso, la de alguien
aprovechándose de otro, gozándolo sin que ese otro lo consienta.
Es decir, no se trata de una satisfacción compartida.
La figura de los viajeros cautivos no es otra que la de aquellos
integrantes que se proponen compartir una satisfacción haciendo
algo entre todos
Diremos que es la voluntad individual de aprovechamiento versus
el Bien Común, pero la historia no cierra tan perfectamente
puesto que nada garantiza que el bien común per se, sea hospitalario
para la mayoría.
Cómo se podría pensar que la ley de hospitalidad se juega en una
institución para cada uno de los sujetos?
Creo que no podría ubicarse solamente en la realización de una
tarea que al final representara el Bien Común.
Deberíamos pensar si no es en el uso de la Institución,
mientras se realiza la obra institucional, que podemos encontrar
una forma de satisfacción compartida que incluya la particularidad
de cada uno. Esto es, un uso que incluya el rasgo propio de cada
cual y no un modo de satisfacción única igual para todos. Esto va
en sintonía con la propuesta de D.Winicott en Realidad y Juego
cuando habla de objetos y de fenómenos transicionales y pone el
acento no tanto en el objeto usado (que puede ser el mismo para
todos) sino en el uso del objeto (que da cuenta del rasgo singular).
Pero, de qué se trata esta ley de hospitalidad que como bien decía
J.Derrida es cualquier cosa menos fácil y serena?
En su libro La Hospitalidad trabaja la relación paradojal entre
hospitalidad y extranjero. De la relación con el extranjero nace la
hospitalidad.
Lo extranjero como lo ajeno, lo otro que nos cuestiona, nos pregunta.
Nos cuestiona en nuestros supuestos saberes, en nuestras
certezas, en nuestras legalidades.
La pregunta es lo esencial de lo extranjero. La pregunta puede o
no ser acogida, hospedada.
Pero ¿qué sentido tiene preguntar, cuestionar cuando el destinatario
de la pregunta no se dispone a aceptarla, cuando el dueño de casa
no admite ser interrogado?
Pero a su vez ¿qué sentido tiene ser objeto de pregunta cuando el
que interroga no se apresta a su vez a ser interrogado, a firmar con
su nombre la pregunta que plantea?.
Ya hay aquí una idea de tensión propia del concepto
entre hospitalidad y hostilidad. En todo caso, en las
instituciones de lo que se trataría es de reestablecer algo
de esta tensión, allí donde la hostilidad ha quedado
como única variante de acción y de pensamiento.
Derrida muestra que la relación del sí mismo (ipse) con el huésped
es en realidad una relación de hospedaje y de desalojo constante.
Es esta variación la que muchas veces está ausente o inhibida
en el juego institucional
Hoy por hoy tenemos muchos ejemplos de instituciones que han
hecho un pasaje sutil, sin declamarlo, del alojamiento al desamparo:
Lo familiar, lo propio, se nos vuelve ajeno
También podemos encontrar en este mundo complejo de las instituciones
la misma paradoja instalada entre el adentro y el afuera
institucional. Esto puede verse en un Centro Abierto a la
Campo Grupal / 2 El amor entra en nuestra vida por los huecos que abre la risa. Berna Wang

Comunidad pero que tiene todas sus puertas internas cerradas con
candados “Si se necesita algo, aunque esté, no está, porque todo está
bajo llave”
Algo sobre el origen de la palabra hospitalidad
y palabras asociadas
Ser alojado bajo las leyes de la hospitalidad crea un lazo especial,
un enlace, a tal punto que hay una palabra en griego que lo nombra:
ta xenia que quiere decir “contraer relaciones de Hospitalidad”
La experiencia de hospitalidad produce una transformación de los
implicados en ella
Tanto el huésped como el anfitrión son afectados por la presencia
del otro.
La hospitalidad permite entender como aquel que se cree dueño de
su propia casa está siempre habitado por los otros.
“Frente a una “lógica de la invitación” (yo invito al otro, y le preparo
mi casa) la “lógica de visitación” supone que el huésped aparece
sin que uno lo invite, como el fantasma” (Extraído de la nota
de Monica Cragnolini en memoria de Derrida )
Haciéndome eco de la propuesta de Derrida de buscar la relación
entre hospes y hostis, encontré que en latín:
Hospes es huésped (el que hospeda y el hospedado),
extranjero, ignorante, viajero
Hostis es enemigo, extranjero
Hospitus es extranjero, extraño, hospitalario
Y algo similar sucede en francés ya que la misma palabra, hote,
designa al huésped y al anfitrión.
Por lo tanto no hay posibilidades de ser hospedado sin hospedar.
Para ser huésped hay que ser también anfitrión.
La hospitalidad hoy
En este recorrido partí de la mitología que aún nos da mucho para
pensar, pero ¿qué pasa con el hoy? ¿Qué pasa en esta compleja relación
entre anfitriones y huéspedes?.
Creo que la ley de hospitalidad no se decreta, se va instaurando
sin un criterio único y por lo tanto es del orden del acontecimiento
que se inventa cada vez y en cada institución.
De lo que se trata es de que cada institución vaya encontrando la
“mejor hospitalidad posible” para la satisfacción personal de cada
uno de los actores institucionales sabiendo que, tal como lo fuéramos
desplegando, alberga en sí misma el alojamiento y el desalojamiento.
Es poder ir construyendo otros bordes para la permeabilidad
institucional.
La hospitalidad en la intervención institucional
¿De qué se trata el hacer jugar la ley de hospitalidad en una intervención
institucional?
Es algo muy diferente a ubicarse en el lugar del juez. Es ir trabajando
juntos, intervinientes e intervenidos, para lograr armar la
trama institucional y simultáneamente dar lugar al trazo singular.
Es acompañar promoviendo el encuentro y despliegue de la tensión
en términos de alojamiento-desalojamiento / hospitalidad-hostilidad
para que cada uno pueda encontrar su trazo propio al tomar la palabra.
Algo del orden de la invención se pone en juego.
En una consulta surge que uno de los actores institucionales tiene
serias dificultades para trabajar en equipo pero por otro lado cumple
una función importantísima de sostén del proyecto institucional.
Dar lugar a la hospitalidad y no al mandato autoritario fue
poder instalar allí una pregunta: ¿Hubo alguna transmisión de los
beneficios de trabajar en equipo? De esta manera se reconoce que
nadie renuncia a un lugar de poder si no percibe los beneficios.
En otra institución el director presenta dificultades en asumir este
rol. ¿Qué se hace con esto? ¿Cómo problematizar esta situación sin
necesidad de decretar que el organigrama establece que el que porta
el título de director tiene que ejercerlo y si no renunciar?
No se hace lo que se quiere pero se es responsable de lo que se es. Jean-Paul Sartre
Obediencia
de vida
Verónica Scardamaglia
sc_vero@yahoo.com.ar
La vida vale la pena
¿La vida vale la pena?
¡La vida vale la pena!
¡Qué vida! ¡Qué pena!
¿Qué vida? ¿Qué pena?
¡No te arruines la vida!
No te arruines la vida
¿No te arruines la vida?
No te arruines
¡No te arruines!
¿No te arruines?
¡Tenés toda la vida por delante!
Tenés toda la vida por delante
¿Tenés toda la vida por delante?
¡Toda la vida!
Por delante
¿Tenés?
Campo Grupal / 3

El grupo como
significante
María de las Mercedes
Guidobono
Nosotros, como operadores en psicología
social estamos acostumbrados a
trabajar en grupo y con grupos. Este
acostumbramiento puede ser un obstáculo
a la hora de evaluar las instancias
dentro de lo grupal. Porque un grupo
que tiene entidad como tal, está también
compuesto por sujetos que en lo
individual están atravesados en su discurso
por lo social. A veces cometemos
el error de no observar esto.
El lenguaje es una estructura que nos
preexiste, y a la vez que nos trasciende,
lo que quiere decir que cuando venimos
a un grupo, en nuestra verticalidad
traemos todo esto: como seres particulares
hemos preexistido en el lenguaje
antes de nacer, nuestros padres ya nos
asignaron un lugar, nos dieron un nombre,
y al morir trascendemos porque se
nos puede traer al presente a través del
lenguaje., vamos a desplegar en el
plano horizontal del grupo todo esto
que se juega de manera inconsciente
en nuestra verticalidad: pues conocer la
estructura del lenguaje, dirá Lacán, nos
sirve para comprender la estructura del
inconsciente, ya que ambos tienen
leyes semejantes.
El grupo también tiene una instancia,
como la letra (soporte material del lenguaje)
insiste, quiere salir a la luz,
necesita satisfacerse en el devenir grupal,
porque un grupo es el conjunto de
todas las mutuas representaciones
internalizadas en cada miembro del
grupo del otro, de ese otro que está en
el grupo y con el cual entablo una relación
simétrica, creyendo en principio
que me relaciono con un integrante y
dándome cuenta después que me relaciono
con la representación que tengo
de mi compañero, pero nunca con mi
compañero. Por ese motivo se dará
una especie de fantasmática grupal,
que me hará tener diferentes representaciones
de mis compañeros, son resonancias,
ecos de otras representaciones
semejantes que ya están mi: procesos
transferenciales que se jugarán en
todo momento, imágenes desajustadas
que, con el tiempo se desajustarán y
ajustarán más. Porque el grupo se destroza
y se une, todo es transitorio en
un grupo.
El grupo es como un significante: no
significa nada, por lo tanto puede significar
cualquier cosa, lo que signifique
se dará en el devenir grupal , cada
cosas que suceda en un grupo será un
significante que unido a otro irá dejando
en suspenso su significación, sus
puntos de capitón que, articulan y dan
significaciones.
El grupo dice y se dice: su discurso
está penetrado por la trama social y
está compuesto de muchas imagénes
acústicas que no querrán decir nada, y
la vez querrán decir mucho. Tarea del
operador psicosocial será desantrañar
estas metonimias grupales, estos desplazamientos
de significantes, esos
estados temporarios de significación,
sin querer darle un punto final, sin querer
adjudicarle una significación acabada.
Un grupo también se dice a través de
metáforas, de sustituciones de significantes,
de muchas representaciones
que se condensan en una sola representación,
como en un sueño.
Tarea del operador será también estimular
la creatividad del grupo, eso es
lo mágico de ser sujetos del lenguaje:
poder crear en el plano simbólico aquello
que no existe, ser libres y capaces
de imaginar otras realidades dentro del
grupo.
Es nuestra responsabilidad como profesionales
dentro del campo de lo grupal,
tener en cuenta todos estos procesos
en que un grupo se verá inmerso,
porque somos sujetos gracias al lenguaje,
entonces toda estructura grupal
tendrá anclaje en la estructura del lenguaje.
“Nunca matarse”
El misterio de lo humano
en el desgarro social
Ricardo Arias
ricarias@fibertel.com.ar
Nos empeñamos en dirigir sus vidas
sin saber el oficio y sin vocación.
Le vamos transmitiendo nuestras frustraciones...
J.M.Serrat
Un joven se suicida, un joven de la ciudad, un ciudadano adolescente.
Me estremezco. Resonancias de otros suicidios, de otros
interrogantes y misterios, me toman. Hay acontecimientos que
se retuercen en preguntas. Se aparece un territorio de sujetos sujetados
en el suicidio por una sustancia mortificada:¡un muchacho se arroja
desde la ambulancia que concurrió a su auxilio!
Cuerpos sustanciales, esencialmente semejantes al mio. ¿Que experiencias
hizo que se desligara de sus compañeros? ¿De su familia? ¿De
sus sustancias subjetivantes?
¿Un cuerpo roto arrojado por fuera del mundo de la conversación?
Puede ser: ya no esta para explicarse, justificarse. ¿Nos dejó esa tarea?
Quizás. Aunque creo que nos quedamos sin que nos dejara nada. Solos,
sin él y sin ninguna respuesta.
Me llaman, por mi profesión, a concurrir a “contener” a los compañeros
de división en el colegio donde concurría Claudio. A manera de
titular, las autoridades del colegio, me reciben con un angustioso “Se
suicidio un alumno”.
Empiezo con la tarea “ad-honorem” de ubicar el territorio de los cuerpos
mortificados que delimita aproximadamente el sitio de la tragedia
para los sobrevivientes. Se mueven en los pasillos, biblioteca, aulas,
veredas.
Espacios inciertos, pues la potencia de la huida extrema, excede al
saber yoico personal y cualquier territorio de saber profesional.
Velocidades, intensidades, latitudes, longitudes, son arrasadas por el
efecto de ese instante suicida. ¿Suicida? Ya esta: ahora es un relato
anclado en la verosimilitud del diagnostico del diccionario y las estadísticas.
Hubo testigos. Aparentemente los médicos de la ambulancia que lo
habían tomado para trasladarlo dicen algo. La ambulancia, la camilla,
el destino hospitalario, la guardia psiquiátrica, es un conjunto de puro
vació. Desde ahora es dolor y vanos intentos de construcción de abrazos
demorados y besos prometiéndose curar las heridas. Y Claudio
insistirá en no volver.
Ya Claudio no tiene el potencial y la virtud transgresora, psicótica,
linda (como generoso, loco, drogón, simpático, raro) de volver. Lo voy
sabiendo en la escucha entre sitios. Él ahora no puede hacer caminos
sobre la mar… ¿pero nosotros si?
Junto a los amigos y conocidos doy lugar en plano y pliegues a la
consistencia de los dichos. Flexible, la circulación de la palabra surfea
superficies heterogéneas. Sólo estos hechos de palabras y gestos dan
efecto de fuga simbólica, de creatividad, que estremece la sustancia de
la desolación que es violentada en cada intento de desenclavar el relato
de lo previsto, de “un alumno se suicidó”. Cada tanto el estado de sustancia
se modifica: salta de baldosa, de terraza, de intensidad, de borde.
Hay llantos, tristezas y lagrimas jóvenes. Se desterritorializa la certeza
de que no hay imposibles. Hay otras distancias, nuevos afectos tristes.
Efectivamente, Claudio no vuelve. Sólo se atisba en un horizonte que,
aún, en algún lugar estará. ¡Y! ¡Podría ser! Quizás entre los cuerpos de
los amigos y amigas que en un devenir, obligatoriamente deseante y
desviado, se desprenden de Claudio. Reencuentro intimo casi por última
vez, en el mismo momento que intentan decir amigo, vida, alegría,
loco, sintiéndose un poco él. Re-corren con él: aulas, calles, música,
medianeras, techos, estrellas, sótanos, códigos inconclusos.
Toman y dan la palabra atravesada por el dolor del misterio y la bronca
de: ¿Dónde están los adultos? Esos adultos preocupados por su deberser
y deber-comprar que se ausentan del lazo social intimo. Adultos que
están angustiados en sus cuerpos duros, doloridos de miedo entre las ficciones
de los medios de comunicación que anuncian nada, sólo nada de
porvenir burocrático y ocio postergado.
Padres y madres seducidos por la maquina infernal de los medios que,
a fuerza de repetición de lo mismo construyen una realidad y una sensación
como para dar verosimilitud a sus ficciones autistas y crueles. Y
mientras, se van convirtiendo en el espejo especular - punta a punto del
mensaje- en modelos de fetiche, de mercancías de ocultamiento de la
vida y de la muerte. Y aquellos seguros de si mismos son perforados
por la misma mismidad con la radical ausencia de Claudio y sus escenarios.
Ahora están tentados a Objetar, en si mismos, donde no hay sustancia,
ni sujeto ni subjetividad el interrogante: ¿cómo pasó? Es posible
que recurran, otra vez, al guión chato de la repetición policíacamedica
masificadora de la vida. Efectivamente, Claudio corría entre esas
mallas. ¿Huía?
Claudio logra en las palabras un devenir político, circunscrito y discreto,
acorde a la ideología de la clase media instruida a la que pertenecen
sus padres, maestros, médicos, sacerdotes, pastores. ¿Es sólo alum-
Campo Grupal / 4 Todas nuestras opiniones son de otros. Fernando Pessoa
no de escuela? O es ese adolescente que salta por las cornisas de los
edificios urbanos entre azoteas llenas de apariciones, máscaras y fantasmas.
Claudio, ¿Quiso salir de una cronología banal? ¿Lanzarse en el riesgo
subjetivante de ser tomado por el Otro? No lo se. Pero estamos
puestos a conversar. De esto se trata lo nuestro “profesional” en el
marco de la conmoción que tienta a enmudecernos.
Puesto a caminar entre – que otra cosa podría yo- los alumnos, ellos,
se fueron relatando los datos con que se contaba acerca de la situación
de Claudio, de lo que provocó o no el hecho de este suicidio entre sus
compañeros de curso y en la escuela en general.
No quieren que sea un hecho policial ni del orden médico. Es un
hecho jurídico, la ley de la palabra esta tocada. La legalidad de los vínculos,
la confianza, la libertad, la solidaridad subjetivante. Lo humano
radical esta destratado. Entre ellos es una oportunidad para gritar: ¡Aun
tengo la vida!, como Claudio.
No todo pasa…en el aula
Aproximadamente 25 alumnos de la división de Claudio más otros 7
amigos de otros cursos, que ellos invitaron, están en el aula. Se van
poniendo en ronda. Luego de un rato, sigo caminando en circulo como
buscando un gesto ausente en la sala, tratando de encontrar un detalle,
un punto de apoyo para navegar un mar de desconfianza que me permita
la palabra y la escucha entre la expresión de todos. Me doy cuenta
que “presentarme” es dejarme atravesar por la ausencia de Claudio.
¿Claudio ya no está más?, digo, afirmo. Me presento y se lanza una
presentación de cada cual con lo puesto. La hacen en ronda, tocándose
con la mano para darse la palabra. En la trama, con huellas que preexistían
a mi llegada, empiezan a relatar entre varios como sucedió lo de
Claudio. No hay coincidencia, no importa. Igual se hace camino, todos
tienen interés por lo dicho, sorpresa por la intensidad que hace superficie
en cada uno, por la necesidad de participar, por mirarse desde la simpatía
del compañero por el dolor propio. Antes, me habían anticipado,
“es un grupo fragmentado”. Desde este “diagnóstico”, por lo menos
apresurado de algún adulto, ellos van dando distintas perspectivas para
ceñir lo imposible: la ausencia trágica de uno más. De este Claudio que
ya no está. Y ellos siguen con-versando con pesar de la muerte. No es
la primera vez. Muchos dicen que la muerte ya es parte de su experiencia.
Me dejo llevar sin certeza a dar pie a la producción de algunas escenas
y situaciones donde Claudio esta presente y se habilitan a representarlo,
a decir lo no dicho aún, y con dulzura y cuidado decir lo “difícil”
del amigo y compañero. Eso que ellos, y solos, y cada cual, sabe
que quizás él mismo o el otro, dicen en su decir. La palabra circula creando
luces y nuevas sombras.
-¿Que le contamos a Claudio que ya no está?
Se escucha reiteradamente la palabra “especial”, era un ser especial,
Claudio es especial. Un tipo divertido, es un tipo que se interesaba por
los demás pero no podía comunicar lo que le pasaba a él. Medio pesado.
Se traía sus sopitas Light. Lo voy a extrañar. Era muy loco. Quizá
no encontró la ayuda que necesitaba. Lo voy a extrañar. Lo quería
mucho. Nunca contaba cosas de él, pero siempre estaba para ayudar a
otros.
Se escucha algo así como Claudio no, no entro en… eso, en algo,
en… y no pudo salir.
Era divertido. Nos hacia reír.
¿Siempre hay algo que no encontramos como decir?
Hay palabras que son difíciles…
Ella dice que se siente culpable, responsable -aclara- porque quizá
podría haber hecho algo más. Hay lugar, no mucho, a conversar de eso
de “sentirse con culpa” por lo que sucedió.
Gedela
-Que le dicen a Claudio: “Que se quiera más a él mismo” “ Permitite
hacer lo que quieras” “Gracias por hacernos reír” “Que estés tranquilo”
“Que encuentre lo que no encontró acá” “Gedela en el cielo” “Que
encuentre la paz” “Te voy a extrañar”.
Nos movemos y la escena se centraliza sobre el lateral obsceno: se
ubica a la escuela, a mí, a los adultos, a las autoridades. ¿Que me dicen?
“Que te preocupes más” “Que cuides más, que contengan más” “ Que
se dejen de joder, sabían, que no se hagan los pelotudos” “ Que se fijen
más en la persona” “ que se ocupen más de la gente” “Que alguien se
haga cargo de lo que pasa”.
“Que se tomen cinco minutos para ver lo que pasa”. “En este caso
no hay nada que decirle” “Los grandes son los que primero tenían que
hacer algo”.
“Que no cierren puertas” “Que aprendan. Que hagan algo”
“Que se haga cargo cuando un alumno necesita ayuda” “Que no hizo
lo suficiente”.
“Nosotras, hace un tiempo, le dijimos a el psicólogo que Claudio no
estaba bien”.

“Ahora, tampoco me gusta cuando viene alguien y dice ¿qué sienten?
me molesta”.
¿Se equivoco la paloma…?
Al final, van escribiendo en el pizarrón una frase que Claudio tenía
escrito en su brazo y que repetía a veces con acento español:
“No a las armas, el único arma es el amor”
Se abrió un silencio significativo. Nadie se mueve del lugar… ¿es
una gramática singular? Siguen:
Las autoridades largan lágrimas de cocodrilo. ¿Y nos dicen que es
nuestra segunda casa? ¿Ahora? No puedo confiar” “Algo se aprende”” Se
puede intentar cambiar” “Tratar de hacer algo” “Se toma conciencia
tarde” “¿Si esta es nuestra segunda familia, que confianza puedo tener?”
“No se puede hacer nada” “Me molesta todo, se lavan las manos” “el
colegio no está preparado´” “Falta de atención, ya es tarde” “Nos dicen
que es el segundo hogar ¿y?” “Está mal no hablar primero con los chicos.
Dicen una cosa y hacen otra” “Tuvieron que pedir una charla” “Me
molesta que hayan dicho que es un curso cerrado. Tienen que hacer las
charlas antes” “Como grupo mejoramos, nos unimos aun más”.
En el grupo estamos participando con interés, hay producción inteligente
y trabajo sensible. Ya hace un rato que estamos en silencio, dolidos
y tristes.¿Me voy? En la despedida hay mucha insistencia en la relación
con los docentes, en que se pueda crear otro tipo de relación, más
flexible y de mayor confianza. “Igual, nosotros no te vamos a llamar”,
“no los vamos a llamar”.
¿Se suicidó y los grandes se ausentaron en consenso para evitar la
sanción jurídica? ¿Para evitar ser tomados por la Ley? Puede ser. ¿El
El arte de la pintura consiste en aclarar y oscurecer los tonos sin decorarlos. Pierre Bonnard
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Campo Grupal / 5

BABILONIA
La cultura del consumo
Máximo Lameiro
maxlameiro@fibertel.com.ar
En las dos últimas entregas de esta
columna de Campo Grupal veníamos
comentando el papel que las marcas
comerciales juegan en la producción y
promoción de la cultura de consumo, a
través de los casos Camel y Benetton.
Hoy vamos a ver un ejemplo ligeramente
distinto, pues no utiliza un
estereotipo personal (el ‘ganador’ de
Camel) ni una tendencia social (la ‘integración’
de Benetton) sino lo que
podríamos llamar una metáfora de
identidad.
Se trata de una publicidad gráfica de la
marca de zapatillas Converse, en la cual
se muestra a un joven que en lugar de
rostro tiene una zapatilla.
Antes de reaccionar visceralmente y concluir
que eso no es más que un golpe
bajo, quisiéramos pensar un poco en lo
que dicho recurso publicitario pone en
juego. Es decir, pensar en cómo el zapato
está cargado culturalmente de sentido.
Y una manera de abordar el significado
cultural del calzado es detenerse un
momento en su complementario semántico:
los pies.
Por ejemplo, pies descalzos y pies desnudos
no connotan lo mismo. El pie desnudo
está desnudo porque se presenta
tal cual es (ya sea como expresión de
erotismo o de inocencia). El pie descalzo
es un pie despojado de su recubrimiento
social, desvestido, carente.
Entre nosotros, en Argentina, el lenguaje
popular expresa esa connotación de
carencia que tiene el pie descalzo: pues
‘andar en patas’ equivale a ser pobre o
estar empobrecido.
Pero también hay pies descalzos por una
pobreza simbólica y meritoria. Una
pobreza que equivale a pureza. Como en
el caso de las carmelitas ‘descalzas’ que
tienen zapatos pero están descalzas en
su interior porque han renunciado al
mundo.
Por otra parte, la oposición descalzo vs.
calzado habla del poder. Una expresión
en jerga muy común en nuestro pueblo
dice de un hombre armado que está ‘calzado’.
Por ejemplo, los custodios, los
policías y los militares ‘andan calzados’.
Los criminales también...
Y obviamente estar ‘bien calzado’ remite
a la posición social: es estar bien vestido
y también es pisar con seguridad. Así, el
‘pisar’ remite nuevamente al poder como
cuando se dice ‘fulano pisa fuerte’.
De modo que el binomio ‘pie y calzado’
abre todo un abanico de sentidos asociados
al poder y la posición social. Así,
una marca de calzado parece ser un
símbolo muy apto para connotar identidad
social. De modo que lo de Converse,
más allá de lo que pudiera tener de mal
gusto o de abusivo, no es nada ilógico.
Dicho de otro modo, que Converse haya
utilizado el calzado como metáfora del
rostro es muy coherente porque el rostro
es la manifestación de identidad por
excelencia ¿no?
En fin, una anécdota para terminar: una
vez un muchacho de clase muy baja participante
de un focus group dentro de
una investigación sobre ‘Juventud y
Cultura’ que tuvimos el gusto de liderar,
nos explicó que las zapatillas eran muy
importantes para un habitante de los
barrios más pobres. Y lo eran especialmente
en el local de baile a donde iban a
divertirse los fines de semana. Es decir,
el lugar donde buscaban chicas; y por lo
tanto un lugar donde era necesario mostrarse
atractivo y macho.
Por eso los jóvenes de su medio social
solían comprar zapatillas Nike robadas
(ya que no podían comprar las legales
pues eran muy caras para ellos) y siempre
los modelos más caros y llamativos.
Es decir, zapatillas robadas sí pero comunes
o insignificantes no.
De modo que las zapatillas, para quien
siente que no tiene identidad social o se
siente avergonzado y disminuido por la
que tiene, deben ser importantes e imponentes.
Pues la zapatilla es el rostro. Y es
eso, precisamente, lo que explotó, con
una lucidez perversa, la marca Converse
en su publicidad.
de la Ley? ¿Cambiamos Ley por normas de comportamiento banales?
Quizás, estas encrucijadas en el camino, nos transforman en Infantes
monstruosos para exculparnos de un decir balbuceante responsable. Así,
encerrados en cuerpos aterrados evitamos descubrir nuestra cuota de fraude
mortal.
Me queda que no hay comunicación desde el “organigrama” de la
buena imagen. Esta es una política donde se secuestra al lenguaje institucional
¿otro suicidado? de los acontecimientos. Los jóvenes dicen
que en el espacio donde se comunica y transmite Educación y Política
siempre hay acontecimientos que provocan la conversación. Y falta el
andamiaje que sostenga ese conversar. Insisten que los “hechos” solicitan
una interpretación desde la cultura de los ciudadanos que acompañan
la experiencia educativa. Están diciendo:
“Hacer talleres antes” “Tener otra relación docentes-alumnos” “Las
relaciones con los docentes son frías, se limitan a su materia y nada
más” “Tenemos que hacer estas reuniones por lo menos dos o tres veces
al año” “Cuando hay algún problema, antes de llamar a los padres tienen
que hablar con el alumno”.
Siempre llegamos tarde donde nunca pasa nada…
¿Esos dichos son efecto del “tiempo perdido”? ¿Descubren actitudes
de los “expertos” que a los interrogantes y sus portadores, se los “contiene”
en gabinetes? La palabra, impuesta dentro de armarios, se clausura
en su insistencia, no circula. Se evita su producción abierta.
Mientras, el Cristo –el del madero-y las estampitas de santos amanerados
insisten en seguir presidiendo las salas por donde pasa el decir de
los dichos del cuerpo muerto de Claudio. Otros, como algunos de los
compañeros, insistirán en buscar su cuerpo en la escuela, sanatorios,
Arte Terapia como
dispositivo grupal
Adriana Farias
adrianafarias40@hotmail.com
Definimos arte terapia como una disciplina que va a tomar las
herramientas de las artes (en particular) visuales y audiovisuales
y en todas sus formas (dibujo, pintura, fotografía, video,
cerámica, etc.) para plantear talleres con objetivos terapéuticos. A partir
de esta definición es que desarrollaré la importancia en un taller con
estas características de la construcción del Grupo.
Como una red conceptual, uno de los objetivos terapéuticos generales,
aplicable a cualquier población, puede pensarse como la construcción
de un grupo, pero es aquí donde se ensambla con otro concepto,
arte-terapia es producción de subjetividad en tanto también va produciendo
un espacio intersubjetivo.
Tomaré como punto de reflexión la dinámica: Consigna –
Producción – Cierre.
Es desde el primer momento Consigna, donde se invita a este conjunto
de personas a escuchar la propuesta, presentación del material,
algo que en principio tendrá una resonancia individual que generará
imágenes propias, la propuesta es que todos estarán generando una
imagen visual del mismo origen.
El segundo momento, es el de la producción en si misma .El crear
es un acto absolutamente íntimo, en arte terapia este acto intimo es
un acto en un contexto grupal donde el sentido individual se enriquece
y suma el significado grupal: es crear con otros .Compartir:
Coordinador, tiempo, espacio, materiales, consigna.
Este momento habilita a que el grupo comience diferentes relatos
que se van entrelazando, porque una historia (esto es maravillosamente
inevitable), permite que surjan otras, las mismas pueden o no
estar cargadas con afectos positivos ó negativos,
Los comentarios que surgen espontáneamente guardan recuerdos, que
también pueden generar imágenes, es así como la plasticidad de los
materiales artísticos (soporte hoja ú otro soporte más los materiales
expresivos) se convierten en una herramienta de comunicación.
El tercer momento que es el de cierre, es cuando cada uno de los participantes
relata que es lo que hizo. El taller cuenta con los autores así
que es en esta instancia que la producción se “completa” con un relato
oral y de autoría.
Quisiera hacer hincapié en el rol del arte-terapeuta ya que la cualidad
de sus intervenciones permite diferenciar el campo epistemológico de
otros marcos disciplinares .Cuando en los seminarios de formación del
posgrado planteamos que arte-terapia posee un campo propio de conocimiento,
decimos que si bien es una disciplina transdiciplinaria que
se nutre de otras disciplinas posee objetivos terapéuticos propios.
Campo Grupal / 6 En el amor hay dos males: la guerra y la paz. Horacio
calles, terrazas y en su dilatado velatorio, cuando vivía.
¡Es posible que se impida el decir! ¿Por pudor? ¿Por respeto a la familia?
¿Por respeto al respeto? ¿Por silenciar el silencio? Así, se asesina
el movimiento del lenguaje y la energía. Política que podría desplegarse
con solo juntar a los compañeros y compañeras de cada hecho para
transformarlo en vital. Cuestiones quizás para la física quántica o el psicoanálisis,
en un esfuerzo de ir más allá del principio de identidad.
¿Miedo a que los jóvenes desvalijen al organigrama de las certezas banales?
¿Que el dinero- por exceso o falta-no alcance en su verdad?
Mientras, los pasillos transparentes, dan lugar a los cuerpos bien y mal
apalabrados de los jóvenes y viejos en duelo sostenido, pero abriéndose
generosamente al Otro. Se dejan interesar cordialmente por el misterio
de lo humano en el desgarro institucional.
Nunca matarse
Los discursos “contenedores”, en búsqueda de su autoimpunidad y
para des-armar los dichos y los cuerpos tristes y enojados de los adolescentes,
intentan poner expertos en corrección de comportamientos, y
fracasan. Pues, en definitiva, de lo que se trata es de lo político. De la
existencia de vínculos de acuerdo y desacuerdo, y sus modos de desplegarse
de lo Inconciente que nos pretexta en el tiempo.
Los compañeros de Claudio encuentran en la conversación grupal una
línea de fuga, un “armarse”. Y encuentran el arma: hablar de Claudio. Y
como el dijo: “Nunca matarse”.
Eso sí, impedir ser capturado por ambulancias incendiarias, gabinetes
de pánico y tutorías de impunidad..
Claudio ¡¡Gedela en el cielo!!
En términos terapéuticos (palabra derivada del griego que tiene en su
idioma original un significado doble : acción de servir y acción de cuidar)
,para que exista un taller de arte-terapia el objetivo básico es crear
un buen vínculo .Pensamos vínculo en el sentido de una relación cargada
de emociones que se deberá establecer entre quien coordina ,cada
individuo que conforma el grupo y con el grupo, complejizándose
dichas redes vinculares porque también deberá establecerse vínculos
con los materiales artísticos y las diferentes consignas.
Lo Bueno que debe ser este vínculo, tiene que ver con crear el clima
de trabajo necesario y lo suficientemente sólido para brindar la seguridad
necesaria para que el grupo pueda expresarse creativamente y cada
uno de sus miembros conectarse con sus aspectos creativos.
Es necesario plantear también que lo relacionado con lo creativo
forma parte de la estructura psíquica y adscribimos al planteo fundamentado
por el Dr.Fiorini en su texto “El psiquismo creador”, quien
marca la existencia de un proceso terciario de pensamiento, propio de
los procesos creadores abriendo el espacio de lo posible.
La creación de imágenes permite el atravesamiento de lo posible,
definiendo nuestro espacio de intervención.
Nos cabe como arte terapeutas repensar en todas las implicancias que
al coordinar un taller se movilizan, intentar hacer interpretaciones de
contenidos inconscientes excede el marco, plantear talleres de reflexión,
excede el marco.
Valorar el espacio de creación que podemos generar nos vuelve a
nuestro lugar, estar atentos y observando los acontecimientos que se
producen en este espacio, nos vuelve a nuestro lugar, disfrutar con los
grupos nos vuelve y define nuestro lugar, permitiéndonos el intercambio
fluido con otros profesionales.
Para finalizar, deseo compartir un hermoso relato de Eduardo
Galeano, llamado Vargas
“Por las orillas de Maracaibo pasó el petróleo y se llevó los colores.
En este basurero, de sórdidas calles, aire sucio, aguas aceitosas,
vive y pinta Rafael Vargas.
No crece la hierva en Cabimas, ciudad muerta, tierra vaciada, ni quedan
peces en sus aguas, ni pájaros en su aire, ni gallos que alegren sus
madrugadas, pero en los cuadros de Vargas el mundo está de fiesta, respira
la tierra a pleno pulmón, estallan de grutas y flores los verdísimos
árboles, y prodigiosos peces y pájaros y gallos se codean de igual
a igual con la gente.
Vargas casi no sabe leer ni escribir. Bien sabe, sí, ganarse la vida,
como carpintero, y como pintor ganarse la limpia luz de sus días: venganza
y profecía de quien no pinta la realidad que conoce sino la realidad
que necesita.”
Creo que este relato también define nuestro lugar……..

SUBJETIVIDAD, ETICA Y POLITICA
Voces y silencios
de la memoria
Silvia Labayru, Denise Najmanovich
najmanov@mail.retina.ar
A Vera Lennie y Mariana Kurlat
El libro “La casa de los conejos” de Laura Alcoba resulta imprescindible
para todos aquellos que estén dispuestos a pensar nuestra
historia reciente. A diferencia de muchos textos sobre la militancia
setentista éste no cae en el lugar común de idealizar aquellos
tiempos destacando únicamente la solidaridad y el compromiso con un
futuro luminoso. En una turbadora narración autobiográfica, apenas
tamizada por la ficción, Laura Alcoba, desde la mirada perpleja y herida
de una niña, presenta con nitidez inusual las zonas oscuras de la militancia:
la crueldad, la obediencia ciega y el desamparo.
Junto con el testimonio de otros hijos de militantes, esta desgarradora
historia abre una perspectiva muy diferente a la que impera habitualmente
en la izquierda y el progresismo, esa visión beatífica peculiarmente
atiborrada de palabras rimbombantes, consignas genéricas y
memorias desmemoriadas. A contramano de esta tendencia, Laura
Alcoba hace hablar a la niña que fue y así nos pone en contacto con la
historia viva, presentada sin maquillajes ni anestesias. Sus palabras,
plenas de emoción y sentido, dan cabal cuenta del abandono, el descuido,
el miedo y las absurdas exigencias de las que fue víctima cuando
tenía apenas 8 años. La narración se desliza suavemente por esos territorios
que su memoria evoca hasta que, en las cinco últimas páginas,
en un giro abrupto del relato y del contenido del libro, termina precipitada
y desesperadamente buscando traidores y refugiándose en las
típicas consignas de castigo a los culpables. Consignas justas, pero que
parecen estar presentes como pantallas protectoras ante lo más doloroso:
la irresponsabilidad de sus padres.
En el libro se expresan dos voces que parecen no poder escucharse
mutuamente, como si entre ellas mediara un abismo: la niña que nos
Asociación Argentina de Picología
Psicoterapia de Grupo
APERTURA DE
CURSOS AVANZADOS
2do. Cuatrimestre
André Green: Una brújula
conceptual para la práctica
clínica contemporánea
A cargo del Lic. Fernando Urribarri
Psicoanalista, ex director de la revista Zona Erógena, Profesor del
doctorado de la Université de Paris X, Francia, trabaja con André
Green desde 1998.
Ha dirigido –con la participación de A. Green- seminarios en la UBA
y en la APA, así como un Coloquio Internacional de Cerisy (Francia)
–publicado con el título “Pour une psychanalyse contemporaine:
autour de l´ouvre d´André Green” 8PUF, 2006).
Miembro del Grupo Internacional de Investigación de la IPA,
sobre casos límite, coordinado por A. Green (2000-2003) cuyos
resultados recoge el reciente libro “Resonance on suffering”.
Colaboró con A. Green en la preparación de su libro “Ideas directrices
para un psicoanálisis contemporáneo” (Amorrortu, 2005).
Presentación y Coordinación: Lic. Patricia Erbin
En la Secretaría de la AAPPG, se encuentra
disponible el programa y objetivos del curso
Frecuencia: Quincenal
Horario: 1ros. y 3ros. jueves, de 13.15 a 14.45 hs.
Duración: de agosto a noviembre
Comienza: 21 de agosto de 2008
Aranceles: Socios: Cuatrimestre $ 180.-
Mensual $ 50.-
No socios: Cuatrimestre $ 250.-
Mensual $ 70.-
Estudiantes Universitarios avanzados y Egresados
hasta 3 años: Cuatrimestre $ 70.- Mensual: $ 20.-
Informes e inscripción previa en Secretaría
de lunes a viernes de 9.00 a 17.00 hs.
AREVALO 1840 - Ciudad Autónoma de Buenos Aires
Teléfono: 4774-6465 / 4771-0247
E mail: docencia@aappg.org.ar
habla del sufrimiento, de la total ausencia de protección y de las penurias
afectivas que vivió como hija de militantes; y la adulta que razona
en términos ideológicos que aluden exclusivamente a la culpabilidad
de los militares.
¿Por qué están estas dos voces escindidas y no pueden convivir en
una sola? ¿Qué impide que aquello que la autora vivió y pudo contarnos
se incorpore al discurso político o al jurídico?
Dicho esto, nos urge aclarar que no estamos pensando en una incapacidad
de Laura Alcoba. Nada más lejos de nuestra intención. Al contrario,
lo que quisiéramos poner de relieve es la deuda del conjunto
social y particularmente de la izquierda para pensar su propia responsabilidad
en lo que nos sucedió.
En la gran mayoría de los casos, la avalancha de publicaciones ocurrida
en las últimas décadas presenta una memoria mutilada en la que
brilla por su ausencia todo aquello que Laura Alcoba dolorosamente nos
hace recordar. Todos los que intentamos construir una memoria histórica
capaz de presentar la complejidad de nuestras experiencias y pensamientos
de aquellos tiempos, nos encontramos ante el denso silencio
respecto al modo de vida real de los militantes y en especial respecto a
nuestra propia contribución a la derrota. El juicio a los culpables del
terrorismo de estado, además de nuestra incapacidad o falta de valentía
para enfrentar las múltiples facetas de ese pasado aún presente, ha
logrado opacar, y muchas veces hasta “desaparecer” cualquier pensamiento
crítico respecto a nuestra participación y a nuestra responsabilidad.
Reconocemos plenamente el valor de los juicios y no sólo de la
boca para afuera: Silvia fue una de las primeras testigos en haber declarado
y su testimonio está incluido en varias causas importantes. Sin
embargo, consideramos que la cuestión clave para que el ¡Nunca Más!
pueda ser algo más que una exclamación, o una expresión de deseos
ingenua e ineficaz, es que podamos ser capaces de pensar en nuestra responsabilidad
en primera persona, sin subterfugios ni eufemismos.
La responsabilidad y las múltiples formas de la memoria
¿Por qué es tan difícil para Laura Alcoba -y para nosotros mismos-
Centro
PsicoSocial
Argentino
Asociación Civil
Personería Jurídica: 1772728/57422
Resolución Ministerial: 01198/06
-Institución de Salud Mental que forma parte del Plan estratégico de Salud del
Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
ROAD: 4589/06
Director: Prof. Daniel Gonzalez (Psicólogo Social)
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Por un futuro lleno de piedras...
El distraído tropezó con ella.
El violento la usó como proyectil.
El emprendedor construyó con ella.
El caminante cansado, la usó como
asiento.
Para los niños fue un juguete.
Drummond hizo poesía con ella.
David mató a Goliat.
Michelángelo extrajo de ella, la más
bella escultura.
En todos los casos la diferencia
no estaba en la piedra, sino en el
hombre.
No existe piedra en tu camino que
no puedas aprovechar para tu
propio crecimiento.
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Lic. Guillermo Augusto Vilaseca
Terapeuta EMDR Psicodramatista
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MOVIMIENTO, ARTE
Y PSICODRAMA
La ciencia dice: el cuerpo
es una máquina;
la iglesia dice: el cuerpo
es una culpa;
la publicidad dice: el cuerpo
es un negocio;
el cuerpo dice: yo soy
una fiesta.
Eduardo Galeano
Encuentros semanales /
Intensivos mensuales
Con la edad he aprendido a escuchar en vez de acusar. P. Bronson Campo Grupal / 7

DESDE MEXICO
Enrique Guinsberg
gbje1567@correo.xoc.uam.mx
En una rteciente columna se mencionó
el fuerte apego del partido mexicano en
el poder hacia la iglesia, y se dijo que al
proyecto en debate spbre privatización
del petroleo seguriá el intento de instaurar
privilegios a ella, y se daba el
indicio de fuertes donaciones económicas
para la construcción o reparación
de templos. Pero, así como respecto al
petroleo no resulta fácil tal privatización,
algo similar ocurre con esas
donaciones. Esto se demuestra cuando,
hace días, los patrocinadores de la
construcción de una iglesia, devolvieron
los 30 millones de pesos dados por
el gobernador del Estado de Jalisco
–parte inicial de un monto de 90-, por
las críticas recibidas, así como por solicitud
del cardenal de esa ciudad –uno
de los más derechistas del país- con el
argumento de que la paz y la concordia
en la asociedad deben estar por encima
de cualquier cosa. Es que, lal regalo,
que viola abiertamente la laicidad del
Estado y podrían destinarse a obras
importantes de la población, promovieron
más de siete mil quejas ante la
comisión de derechos humanos de ese
Estado, y una incorfomidad aún mayor
en todo el país.
Ya el anterior presidente Fox mostró su
vocación católica en amplia medida,
pero nunca, como hasta ahora, dando
tan asmplios privilegios a una postura
religiosa, que se ha desatado con el
segundo gobierno del Partido Acción
Nacional, pero provocando reacciones
similares y desatado una polémica de
fuerte peso. El donativo señalado no es
más que la máxima expresión de algo
generalizado, sobre todo en Estados
gobernados por el PAN, lo que fomenta
la intolerancia religiosa en el considerado
segundo país del mundo de
cantidad de adherentes al catolicismo,
aunque sabiéndose que está perdiendo
seguidores ante el creciente avance de
grupos protestantes y pequeñas congregaciones
de diferente signo, algo
que fomenta tal intolerancia. En esta
perspectiva, es importante recordar
que en lavecina Guatemala estos grupos
ya son mayoría.
Recuérdese además, que históricamente,
México tuvo la llamada Guerra
Cristera en décadas anteriores y en
estados del centro del país, lo que
fomentó tal laicidad estatal y múltiples
pérdidas de beneficios de la iglesia
católica, algo que comenzó a cambiar
hace muy poco, donde se restablecen
relaciones y, como ahora, se busca
recuperar lo perdido, planteánse incluso
llegar al restablecimiento de la enseñanza
religiosa en escuelas, y la posesión
de emisoras de radio y televisión
po las instituciones confesionales.
Aunque esto, por ahora, se niega en las
palabras. Y más ahora cuando los
donativos económicos son frenados
por quienes de manera alguna aceptan
la pérdida del carácter laico de la sociedad.
En este sentido un importante diario
opositor resaltó la importancia de lo
ocurrido en Jalisco como paso adelante
en la fiscalización que la sociedad
hace del gobierno, y que este se ve forzado
a aceptar o tolerar. Algo similar al
caso del petróleo, que hizo que surgiera
una fuerte oposición ciudadana, que
todo indica se mostrará abiertamente
en el referendum que se realizará dentro
de muy poco, y que también se realizará
con la oposición del gobierno
central y procesado por la oposición de
izquierda y nacionalista.
Así, con polémicas cada vez más fuertes
y directas, está funcionando este
país que, pese a su conocida pobreza
general, tiene el segundo nivel de
obseidad en el mundo, luego del vecino
Estados Unidos. Pero este será el tema
de la próxima columna, salvo que algo
de fundamental importancia lo relegue
para otro momento.
Universidad Autónoma
Metropolitana-Xochimilco
Voces y silencios de la memoria
pensar nuestra historia partiendo del reconocimiento de nuestra inevitable
participación, ya sea por acción u omisión? ¿ Por qué nos resulta
tan penoso admitir nuestra cuota de responsabilidad? Una primera dificultad
se manifiesta cuando nos damos cuenta de que asumir una responsabilidad
nunca es una cuestión teórica. Es un asunto tan vital como
difícil. Porque para hacerlo es preciso dejarse afectar por una historia que
desasosiega: duele pensar en la crueldad de la dirigencia y el abandono
de los compañeros; duele pensarnos como asesinos (potenciales o efectivos);
duele reconocer las formas perversas en que utilizamos y pusimos
en peligro a los amigos y familiares; duele recordar cómo, en la
cotidianidad de la militancia, muchos valores que hoy apreciamos eran
radicalmente vituperados y combatidos; duele evocar el sometimiento
disciplinario ante órdenes suicidas o aberrantes, y puede resultar patético
rememorar las ínfulas heroicas que teníamos...todo eso que Laura
Alcoba niña cuenta en su libro, pero que sin embargo aún hoy no puede
pensar.
En ese contexto en el que el dolor nos hace cobardes, la autora debió
hacer frente a otro obstáculo diferente, tal vez mayor aún, pues ella no
fue una militante sino una niña pequeña que, de adulta, se encuentra
ante la delicada situación de contar su experiencia, una experiencia en la
que la que la crueldad no era algo privativo de “los otros”, sino que
correspondió a sus propios padres y al “nosotros” al que pertenecían.
Tal vez éste sea el lugar en que la voz se bifurca: ella puede narrar su
experiencia de niña, hacerla presente, pero no puede ligarla a un pensamiento
que reconozca esa crueldad. En el umbral de ese reconocimiento,
las palabras se vuelven torpes, para ella y para todos; de ser instrumentos
se vuelven estorbos; la gramática se enreda. La memoria parece
exigir otra lengua, una lengua que no tenemos porque nuestro lenguaje
adulto sigue encadenado a la ideología, a consignas, a un hipotético
mundo feliz y a una mejor juventud. Nuestro pensamiento y la
lengua que lo expresa sólo puede admitir la crueldad en “los otros”.
A diferencia de muchos que sostienen el carácter inefable de ciertas
experiencias “límites” consideramos que el problema no está en las
palabras, que no es que todo esto sea indecible: lo que impide decir, lo
que bloquea la comunicación es, más bien o ante todo, la ideología que
ha petrificado al pensamiento y al lenguaje en una gramática rígida que
no admite las vivencias que no encajan en ella. Esto nos obliga a un
trabajo simultáneo de cuestionamiento ideológico, formulación conceptual
y producción lingüísticas que, además, no puede hacerse individualmente.
Insistimos, no se trata de que no encontremos las palabras
adecuadas, es que la cultura se resiste a los afectos y pensamientos que
pueden ponerla en jaque, obstaculizando su expresión.
Hasta el día de hoy, y han pasado más de 30 años, ninguna organización
ha realizado ni siquiera una “autocrítica” amplia y rigurosa. Y no
es que reclamemos una autocrítica, pues -no importa su extensión ni
intención- ésta sería completamente insuficiente respecto, por ejemplo,
al asesinato, aceptado y practicado por las organizaciones armadas.
Tampoco alcanzaría ni serviría para entender ni perdonar la crueldad, la
arbitrariedad o el abandono ampliamente practicados principalmente -
aunque no sólo- en las organizaciones de la izquierda armada, ya que
estos procederes no fueron meros “errores”, “equivocaciones tácticas” o
“desvíos ideológicos”. Los años pasan y el volumen de lo publicado
crece asombrosamente. Sin embargo las producciones colectivas y personales
acerca de la experiencia militante, en toda su complejidad siguen
siendo excepcionales. Poco se ha publicado sobre los modos de organización
y la disciplina, los sistemas de promoción y de castigo, las exigencias
aberrantes travestidas de imperativos ideológicos que abarcaban
prácticamente todas las actividades cotidianas (desde los gustos musicales
hasta las conductas sexuales), que imponían determinadas formas de
relación y limitaban o incluso prohibían otras bajo pena de sanción o
expulsión, “juicio revolucionario” mediante.
Laura Alcoba no puede llenar este vacío pues no le compete a su
generación sino a la nuestra. Se trata de una responsabilidad indelegable
que aún hoy la gran mayoría elude por lo que la reflexión acerca de las
prácticas de la militancia de izquierda sigue siendo la gran ausente en
muchos de los discursos políticos de todo signo. Los progresistas y la
izquierda apuntan únicamente a culpabilizar y demonizar a los represores,
la derecha a separarse de éstos y a señalar a las organizaciones guerrilleras,
el “centro”...no se da por aludido. Por suerte, en los últimos
tiempos, esta importante cuestión ha empezado a emerger, sobre todo -
aunque no exclusivamente-, en la voz de algunos hijos de los militantes
setentistas. También ocurrió una reciente y llamativa excepción al
discurso angelical sobre la militancia de los setenta que fue la carta “No
matarás”, de Oscar del Barco i [i]. Fueron muchos los intelectuales que
se apresuraron a responderle. Sin embargo, la gran mayoría evitó precisa
y cuidadosamente el centro de interés que el artículo proponía: el
de la responsabilidad personal. Entre las poquísimas y honrosas excepciones
queremos destacar las respuestas de Diego Tatián ii , Cristian
Ferrer iii y Thomás Abraham iv –estos dos últimos misteriosamente
excluidos de la compilación editada por la Universidad de Córdoba. No
nos extraña esta “desaparición”, pues cada vez que hemos intentado
introducir la cuestión de la responsabilidad personal y colectiva en los
sucesos de nuestro pasado reciente, la atmósfera de la conversación se
Campo Grupal / 8 El odio es la venganza del cobarde. George Bernard Shaw
torna tensa, espesa, cargada de furia soterrada. ¿Qué están insinuando?
parecían preguntar, perplejos, los ojos de nuestros indignados interlocutores.
¿No es obvio que la culpa la tienen sólo los militares y algunos
ideólogos de la dictadura?
De un modo u otro, los demonios toman siempre la escena: ya sea
porque se acepta la teoría o porque se la rechaza. En el primer caso, se
promueve una lectura de la historia que pone el foco en los militares y
en las organizaciones guerrilleras demonizando a ambos bandos, al
mismo tiempo que deja en la penumbra a toda la sociedad. En el segundo
se elige una interpretación que considera demoníaco solamente al
bando contrario, rechazando también toda asunción de responsabilidad.
La responsabilidad personal y colectiva es tal vez uno de
los “desaparecidos” más importantes del discurso de la
memoria. Una ausencia que el clamor de Oscar del Barco intentó, con
mucha fuerza pero menos éxito, dar a conocer y que nosotras deseamos
seguir pensando. Queremos comprender el porqué de ese abismo que
separa las dos voces de Laura Alcoba, y sabemos que no podremos
lograrlo si reducimos nuestro pensamiento a las categorías de ‘ángeles’
y ‘demonios’ de la cultura en uso porque lo que se evita siempre que
aparecen las divinidades -sean buenas o malas- es la responsabilidad
humana.
Indagando sobre esta cuestión nos encontramos con una reseña escrita
por Hugo Bleichmar v respecto de una investigación que realizó
Robert Kraft vi sobre los testimonios de 200 sobrevivientes de los campos
de concentración nazis. Viendo los videos correspondientes llamó la
atención de Kraft que, en determinados momentos del relato, los entrevistados
perdían el hilo y comenzaban a hablar de un modo completamente
diferente a cómo lo venían haciendo. Esta circunstancia le llevó
a proponer la hipótesis de que existen dos formas de memoria muy diferentes:
una memoria que se manifiesta como fogonazos, a través de la
rememoración de experiencias muy vívidas de olores y sensaciones corporales,
que tienen una gran fuerza evocativa de lo que se experimentó
en los campos; otra, que se expresa como narración verbal discursiva.
A la primera la denomina “memoria nuclear” y a la segunda “memoria
narrativa”.
El modo de expresión de la memoria nuclear no sigue la linealidad del
discurso, se pierde, tiene otro tiempo, intensidad y modo de organización.
El sobreviviente, cuando recuerda de este modo, parece habitar
otro territorio, el del pasado, y apenas reconoce su presente. Las evocaciones
surgen bruscamente con gran intensidad emocional; nada las
anuncia ni las explica. Su naturaleza es muy diferente a la de las emociones
provocadas por los recuerdos que se originan en el curso habitual
de la narración.
Tanto Kraft como Bleichmar interpretan estas diferencias en clave
neurofisiológica y psicológica, ambas obviamente pertinentes y significativas.
Pero consideramos que el “abismo” entre las dos memorias (y
entre las dos voces de Laura Alcoba) tiene una dimensión social que no
ha sido valorada y que nos resulta crucial. La cuestión que nos lleva a
incluir lo social como particularmente relevante es que creemos que, de
no hacerlo, la barrera entre las dos memorias- así como entre el individuo
y la comunidad, entre la emoción y el pensamiento- seguirá siendo
fatalmente insuperable. Así, al convertir esa distancia en un abismo
insuperable, al hacerla indecible, al convencernos de que después de
Auschwitz no puede haber poesía..., al creer y hacerle creer a las víctimas
que su experiencia es inhumana, haciendo de ellas seres que no pue-
ARTETERAPIA
Es el término que designa la utilización de recursos
artísticos en contextos terapéuticos
Jornadas de
SELMA CIORNAI en Buenos Aires
21 AL 24 DE AGOSTO
Psicóloga Gestáltica, Maestra en Arteterapia y Pionera de este enfoque en Brasil
Jueves 21 de agosto 20 a 22 hs.
TALLER “MITOLOGÍA PERSONAL”
Viernes 22 de agosto 10.30 a 13.30 hs.
SEMINARIO
“Del paradigma individualista al paradigma comunitario”
Sábado 24 y Domingo 25 10 a 18 hs.
SEMINARIO FIN DE SEMANA TEÓRICO - VIVENCIAL
ARTETERAPIA
INTRODUCCIÓN A UN ENFOQUE CREATIVO Y CON APLICACIONES
MUY CONCRETAS EN EL CAMPO DE LA SALUD Y LA EDUCACIÓN
Dirigido a docentes, coordinadores grupales y terapeutas
que incluyan la exploración artística en su trabajo
educativo o terapéutico.
Informes e inscripción: OLAZÁBAL 3014 – Belgrano - Capital
4781-3752 info@cgsi.com.ar www.cgsi.com.ar

den - ni deben- expresar lo que saben, una vez más las condenamos a
una soledad mayor aún, si cabe, que la que tenían en el campo. Mientras
este nivel de la experiencia quede anulado por el filtro ideológico, el
entorno intelectual y académico podrá dedicarse a aplacar las conciencias
teorizando sobre el mal radical y haciéndonos sentir seguros de que vivimos
en el lado bueno del reino de este mundo y que el infierno son
siempre los otros. Al mismo tiempo, mientras nos limitemos a pensar
la experiencia humana exclusivamente desde una mirada neurofisiológica
y/o psicológica, el sobreviviente seguirá condenado al trauma o al
paliativo de la terapia y la sociedad seguirá en el limbo de la irresponsabilidad.
Nosotras consideramos, en cambio, que la memoria nuclear no puede
ser pensada, ni los recuerdos expresarse en palabras y contarse, porque
cuando nuestra cultura pretende pensar al ser humano no se permite
incorporar el absurdo. Por eso siempre le ve de un modo incompleto y
se pierde el aspecto de la vida humana que tal vez más sutilmente nos
constituye. Es precisamente por esta negación que hace nuestra cultura
que esas experiencias inevitablemente dolorosas resultan también
traumáticas, y no a la inversa. No es que el sobreviviente no quiera o
no pueda narrar lo que le ha sucedido. Es que la sociedad, a pesar de sus
mejores intenciones, raramente soporta compartir la intensidad y el
ruido que esta memoria provoca. Por eso no sabe escuchar, ni acompaña
a quien quiere realizar el esfuerzo de pensar. Ni nuestros lenguajes
teóricos, ideológicos y políticos, ni nuestra gramática cotidiana están
preparados para incorporar el absurdo, la paradoja, lo complejo o lo
siniestro. No es que la vivencia de los campos de concentración sea
“inefable”, lo que ocurre es que el marco conceptual de nuestra cultura
separa a cal y canto aquello que puede o no puede convertirse en experiencia
y por lo tanto ser recordado, narrado y compartido.
Por eso creemos que asumir la responsabilidad personal y colectiva tal
vez sea una clave que nos habilite para recordar, pensar y comprender
nuestro pasado sin censuras. De este modo, podremos comenzar a derribar
las barreras afectivas y conceptuales que hacen que la memoria “nuclear”
y la “narrativa” funcionen desconectadas y los sentidos continúen
mutilados. Si no lo hacemos, nuestra experiencia del mundo resultará
empobrecida y nuestra potencia de acción menguada. Mientras no busquemos
implicarnos en nuestra propia historia con una aproximación
más compleja seguiremos abandonando a Laura Alcoba con sus recuerdos
de niña frente a una crueldad que le resulta tan obvia como inconcebible
al pensarlos como adulta. Le seguiremos quitando, privándonos
también nosotros, la posibilidad de pedir como adulta que todos nos hagamos
partícipes de aquello que produjimos colectivamente.
Una de las formas más comunes, y reiteradas hasta el hastío, de soslayar
las responsabilidades consiste en refugiarse en discursos genéricos,
ya sea académicos o ideológicos, convirtiendo los temas más acuciantes
y personales en lejanos y teóricos, de tal modo que, al mismo tiempo
que hablamos permanentemente de ellos, podemos no decir absolutamente
nada que nos afecte como personas aquí y ahora. El resultado
es que así nos conformamos con diseñar una memoria complaciente, a
medida, que es incapaz de recordar alguna experiencia que nos ponga en
cuestión.
No queremos protegernos usando eufemismos o un lenguaje académico
distanciado. Preferimos, al igual que Oscar del Barco, sentirnos
responsables de haber apoyado el asesinato. Sin embargo, nos gustaría
ir más allá –o tal vez deberíamos decir más acá, más cerca de la vida de
todos los días- y reconocer también nuestra responsabilidad por la falta
de cuidado que padecieron nuestros seres queridos, y por las innumerables
veces que los pusimos en peligro. Cuando “guardábamos” a una
persona buscada ocultándole a nuestras familias su pertenencia a una
organización clandestina, o cuando disponíamos de coches legales de
familiares para ser utilizados por las organizaciones, engañando a quien
nos lo había prestado amorosamente, o pidiéndoles que nos guardaran
bolsos repletos de armas o materiales comprometedores sin decir lo que
contenían, cuando les exigíamos que nos escondieran en sus casas
porque éramos buscados, mientras seguíamos arriesgándonos y arriesgándolos,
sin su consentimiento. Muchas veces incluso incurrimos en
esta loca desconsideración por motivos nimios como preservar una
colección de libros o de periódicos del partido a sabiendas del riesgo que
implicaba tener esos materiales.
Queremos también admitir nuestra responsabilidad por el trato que
tuvimos con nuestros amigos, a los que les dimos la espalda por diferencias
ideológicas –a veces apenas una coma en el programa de la organización
o el grupo- y a los que no prestamos ayuda en momentos difíciles
porque contradecían la línea dictada por la dirección. Y también
respecto a esos amigos que simplemente nos querían hacer ver que si
seguíamos así nos iban a matar, a secuestrar…y que nosotros despreciábamos
por débiles, por cobardes, por su falta de compromiso.
Queremos recordar y reconocer la total falta de consideración, por no
decir de escrúpulos, con que actuamos muchas veces y la prepotencia
con la que tratamos no sólo a los que considerábamos enemigos, sino
a los adversarios, e incluso a los aliados que pensábamos no nos prestaban
suficiente atención.
Consideramos que es imprescindible aceptar que fuimos nosotros
los que tratamos a las personas como “recursos” para una hipotética
revolución y que admitimos y promovimos la idea de que la bondad
de los supuestos fines justificaba la crueldad de los medios que usamos
para imponerlos. Incluso tuvimos hijos a los que llegamos a pensar
como hijos de la revolución y nos olvidamos de pensarlos como seres
a los que traíamos al mundo “responsablemente” para proporcionarles
algo más que la vida: el amor, la seguridad, el cuidado que cualquier
niño – y en general cualquier persona - necesita.
De todas las responsabilidades que están ausentes del discurso de la
memoria a las que procuramos darle voz en esta nota, la que más conmueve
y nos interpela es la relacionada con los hijos de aquella militancia
de los setenta. Hijos que no fueron protegidos porque sus padres
siguieron adelante aún cuando ya se palpaba a todas luces la derrota;
hijos que nacieron en los centros clandestinos, la mayoría de los cuales
aún hoy siguen sin el derecho a saber de quiénes son hijos. Hijos
que, como Laura Alcoba, padecieron una clandestinidad precoz y angustiosa.
Hijos a los que sus padres dejaron en Cuba porque su compromiso
con la revolución era más importante que la responsabilidad que
sentían hacia ellos… y tantos otros hijos de militantes que crecieron sin
identidad o sin infancia.
Creemos que si no somos capaces de asumir nuestra participación en
la historia tal como la vivimos y no como se la decora en los rerpochables
cuentos de hadas o en las sesudas conferencias, o bienintencionados
discursos académicos, tampoco podremos nunca empezar a olvidar
en paz, como querría Laura Alcoba y como, de un modo u otro, también
necesitamos todos.
Notas
i Se puede leer en: http://www.elinterpretador.com.ar/15CartadeOscarDelBarco.htm
ii Se puede leer en: http://www.elinterpretador.com.ar/15CartadeDiegoTatian.htm
iii Se puede leer en http://www.elinterpretador.com.ar/15CartadeChristianFerrer.htm
iv Se puede leer en:
http://www.elinterpretador.net/20TomasAbraham-
LaCartaAbiertaDeOscarDelBarco.html
v Se puede leer en http://www.aperturas.org/articulos.php?id=0000071&a=Kraft-
Memoria-emocional-en-sobrevivientes-del-Holocausto-Un-estudio-cualitativo-de-testimonios-orales
vi Se puede leer parcialmente en:
http://books.google.com/books?id=TemvZpgA6uoC&printsec=frontcover&hl=es&sig=
ACfU3U2F1erczy6SM2QdmGqA6uyvL3WzYw
El pasado es la única cosa muerta cuyo aroma es dulce. Edward Thomas
Filosofía,
Arte y
Espiritualidad
Laprida 1963, PB “B” CABA
Tel/Fax: 4803-9764
Directora:
Lic. Cristina García Oliver
Campo Grupal / 9

LIBROS
Psicoanálisis e Hipermodernidad
Varios autores. Editorial
Pomaire. Venezuela 2008
Hoy vivimos en la hipermodernidad.
Pensamos junto a Gilles
Lipovetsky que “lo que nos tiene
que preocupar cada vez más es
la fragilización de los individuos…
En muchos puntos hoy
en día tenemos más posibilidades
de optar, pero al mismo
tiempo nunca los individuos han
demostrado tantas dificultades,
tantos malestares, tantas penas,
tanta dificultad para vivir. El individuo
hipermoderno es libre,
pero frágil y vulnerable, librado a
su suerte.”
“La hipermodernidad liberó en
su máxima potencia los tres factores
que hacen a la modernidad:
el individualismo, que se
convirtió en el individualismo
hedonista; el mercado, que se
convirtió en la globalización
extrema, y la tecnología, que
llegó a límites impensados,
como la clonación”.
Todo se vuelve hiper, es la
“edad de la exacerbación de la
modernidad, de una modernidad
elevada a una potencia superlativa.
Estamos en una edad
hiper: hipercapitalismo, hiperpotencia,
hiperterrorismo, hiperindivualismo,
hipermercado, hipertexto…”.
Surgen nuevos paradigmas y
con ellos, volvemos a preguntarnos:
¿Qué se espera de un psicoanalista
en el momento que
nos toca vivir?
En este libro reunimos el trabajo
de catorce psicoanalistas que se
aventuran a escribir sobre los
síntomas hipermodernos. Un
recorrido que atraviesa temas
cruciales, tanto en el quehacer
del psicoanalista en la clínica
como el psicoanalista en la ciudad.
A través de sus páginas
recorremos algunos indicios
contemporáneos como el imperio
del número, el psicoanálisis y
las prácticas socio-educativas, la
anorexia, la familia, el dolor de
ser, posiciones diferentes que
cada sujeto afronta frente a su
malestar.
Un trabajo que invitamos a compartir
y que no se agota con la
última página del libro. Un libro
que no cesa de seguirse escribiendo…
Viviana Rosenzwit
Los libros de la Editorial
Pomaire se consiguen exclusivamente
a través de ViviLibros:
www.vivilibros.com
info@vivilibros.com
Dispositivo analizador
Las prácticas de formación
y ejercicio profesional
Virginia Schejter, Alicia Zappino, Marta Koltan, Florencia
Ferrari, Trinidad Cocha
virginiaschejter@ciudad.com.ar
La práctica docente en la Cátedra I de Psicología Institucional
de la Universidad de Buenos Aires nos ha ido confrontando a
una serie de preguntas que sistematizamos en la investigación-intervención
que relatamos a continuación.
Actualmente trabajamos en la construcción de un proyecto de
investigación conjunto con Cátedras de Psicología Institucional de
otras facultades y universidades nacionales.
Entendemos que la metodología utilizada para producir conocimiento,
intervenir y aprender centrada en el concepto de
“analizador” resulta una herramienta privilegiada para la formación
y desarrollo profesional en cualquier disciplina.
Sobre las características de la investigación
y su contexto de producción
La materia pertenece al ciclo de Formación Profesional y los
estudiantes acceden a cursarla promediando la carrera, avanzados ya
en ésta, o finalizándola. Relacionamos con esta circunstancia, el
hecho que sus expectativas respecto a la propuesta de trabajo en la
materia sea reencontrar los modos instituidos de aprendizaje, naturalizados
a lo largo del recorrido por los diferentes niveles del sistema
educativo, caracterizados fundamentalmente, por la transmisión
de contenidos, la repetición de textos y la escasa formación en
la práctica profesional.
Entendemos lo institucional como un fenómeno psicológico
trascendente a los individuos, a la vez constitutivo de la subjetividad.
Este enfoque de la Psicología Institucional, además de ser una
especialidad del campo profesional, es una perspectiva de conocimiento
que excede el trabajo en las organizaciones y que permite
abordar y conceptualizar lo psicológico en cualquier ámbito de trabajo.
La materia tiene el propósito de estimular la apertura hacia una
redefinición del territorio laboral de los psicólogos y a la investigación
y desarrollo tanto del análisis de las organizaciones y sus
atravesamientos institucionales, como del análisis de las prácticas
instituidas en la consecución de proyectos colectivos. Esto último
abre una veta rica en significaciones en su intersección con las
organizaciones en las que transcurre la cotidianeidad humana.
Los objetivos de la materia apuntan a incluir la perspectiva institucional
al análisis de los campos de trabajo del psicólogo, reflexionando
de manera crítica sobre los instituidos en la formación y
teorías de referencia; a poner en acto la concepción de la unidad de
investigación, teoría y práctica, como basamento del desarrollo
profesional; a propiciar el trabajo interdisciplinario y multiparadigmático;
y a instrumentar teórica y metodológicamente para encarar
los trabajos psicológicos desde una perspectiva institucional.
Entendemos que el aprendizaje de nuevas prácticas o el cambio de
prácticas anteriores – a partir de revisar lo que se cree saber e incluir
Seminario de Psicoanálisis
Obstáculos para el analista en la clínica actual
• Respuestas del analista a las demandas de tratamiento en la actualidad
• Herramientas para establecer un diagnóstico
• Modos de localizar y tratar los síntomas de los sujetos
contemporáneos
• Condiciones necesarias para el alojamiento del consultante en un
tratamiento analítico
• Decisiones del analista
• Deseo del analista, dificultades para su puesta en ejercicio y operación
Lic. Gustavo Cappelli Lic. Carlos Vilaseca
4786-4144 4783-9218
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NUEVO ESPACIO GRUPOS PSICODRAMA CREATIVIDAD
Directores: Dr. Eduardo Tato Pavlovsky
Lic. María C. Pavlovsky
• TERAPIA GRUPAL PSICODRAMATICA
PARA ADOLESCENTES
Coord. Lic Maria C. Pavlovsky
• CURSOS INTENSIVO PSICODRAMA I NIVEL
Julio a diciembre
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el no saber para abrir preguntas - implica un cambio en las lógicas
de pensamiento y en los modos instituidos de imaginarizar el objeto
de estudio.
Además, entendemos al análisis de las prácticas como objetivo
privilegiado de la institucional, lo que nos lleva a considerar que no
es posible el proceso de enseñanza-aprendizaje de Psicología
Institucional sin un análisis de las prácticas que se ponen en juego.
Desde esta concepción, la intervención institucional es una metodología
de producción de conocimiento que permite una indagación,
al mismo tiempo que posibilita la reconstrucción del sentido de las
prácticas que se desarrollan en los espacios micro y macro sociales.
Por todo esto, diseñamos en las clases de Trabajos Prácticos un
dispositivo de análisis de las prácticas instituidas en el aula y en el
campo de ejercicio profesional del psicólogo. El objetivo de éste es
que, el encuentro de alumnos, docentes y marco teórico en ese espacio,
de lugar a una revisión crítica compartida de los imaginarios
acerca de las propias posiciones, de los modelos de enseñanza y
aprendizaje y de las lógicas de pensamiento previas.
El dispositivo construido incluye a la vez, la reproducción de
saberes y la posibilidad de crear y compartir en un espacio intermediario.
En el contexto descripto surge esta investigación acerca de los
modos en que aprendemos estudiantes y docentes y sobre la manera
que desde nuestro rol, acompañamos el proceso de formación.
Para esto se caracterizarán los recursos técnicos utilizados en el análisis
de esas prácticas, entre los que se incluye en primer plano el
análisis de la implicación de los docentes y se describirán los
modos de aprender instituidos en la formación del psicólogo y de
posicionarse en el campo de intervención profesional.
Descripción de la metodología
Se elige un enfoque etnográfico por tratarse de un análisis realizado
en el campo, a partir de las acciones desplegadas en la cotidianeidad
y la reflexión sobre las mismas, desde un modelo que
integra a los distintos actores en una participación conjunta.
El análisis de la implicación de todos los actores que formamos
parte de la experiencia resulta una herramienta privilegiada para
poner en palabras los instituidos que tiñen nuestra visión y que,
permiten vivenciar la imposibilidad de neutralidad a la vez que se
constituyen en el punto central de nuestra investigación.
Para poder arribar a los objetivos que nos proponemos elegimos
utilizar tanto analizadores naturales (aquellos acontecimientos
espontáneos que permitan desencadenar la reflexión y por lo tanto
el análisis de lo oculto institucional), como analizadores construidos
para tal fin. Entre estos últimos resaltaremos aquellos que utilizaremos
de manera sistemática:
Trabajo de campo
Cada comisión de trabajos prácticos se centra en la investigación
de problemáticas de un ámbito institucional específico y los
alumnos constituyen grupos que eligen indagar una organización
en particular.
Este trabajo de alumnos y docentes, de exploración, diálogo y
lectura crítica, apunta a que los instituidos del sistema educativo
(concepciones de alumno, docente, aprendizaje) salgan a la luz para
ser analizados y desnaturalizados. El primer propósito es que los
integrantes del grupo se encuentren con los supuestos e interrogantes
que irán guiando el mismo, evaluando las condiciones necesarias
y los medios para llevarlo a cabo.
Cada etapa del proceso de trabajo es fin y medio, es llegada y partida.
Por eso consideramos, que no finaliza con la entrega escrita de
lo trabajado, sino que es repensado en la instancia de coloquio,
etapa que con la inclusión de otros docentes, se arriba a otro posible
fin, que posibilita una nueva apertura.
Diario de Campo de docentes y estudiantes
Tanto los grupos de estudiantes, como los docentes escriben diarios
de campo. Estos funcionan como memorias que se redactan en
el momento en que acontece lo que se escribe o pocas horas des-
ADICCIONES
Centro de Atención AUCAN
Tratamiento: Adicción a drogas,
Anorexia-Bulimia, Juego compulsivo
TALLER PARA PADRES
“Drogas de Diseño y Música Tecno” 23/8
ACTIVIDAD ABIERTA
“Taller sobre alimentación. Aprender a comer” 30/8
Informes e inscripción únicamente a: 4702-1128 y 15-4185-8462
aucan@aucan.com.ar www.aucan.com.ar
Campo Grupal / 10 El amor y la locura son los motores que hacen andar la vida. Marguerite Yourcenar

pués. Se utilizan para la recopilación y conservación de los datos
evitando la selectividad de la memoria incluyendo expresiones
vivenciales, ideas periféricas y pensamientos curiosos del investigador,
quien posteriormente reexamina las notas relacionándolas
con los recuerdos. Es un diálogo consigo mismo de naturaleza teórica
e íntima a la vez.
Observación participante
Incluimos la observación participante de los alumnos (y docentes)
entendiéndola como emparentada a la asociación libre ya que
con ella se intenta posibilitar el registro en el aquí y ahora de lo
que ocurre: diálogos, intercambios, situaciones, discusiones, entendidos
como acontecimientos significantes.
Al ser participante, el observador mismo se observa en este
modo de significar lo que acontece en los diferentes espacios
(grupo, plenario, aula, organizaciones sociales, teorías, autores).
La observación es pensada como método de construcción permanente
de conocimiento porque permite registrar y hacer visible la
simultaneidad de situaciones que se creen sucesivas o separadas
entre sí, entendiendo que siempre existe un resto derivado de la
inabarcabilidad de lo real de los sucesos.
La utilidad y riqueza de la observación participante se potencia
con la reflexión conjunta que se realiza al final de la clase incluyendo
otras perspectivas y disparando nuevas situaciones y contenidos
propicios para el análisis.
Grupos, plenarios y reuniones docentes
Los trabajos de campos, los materiales teóricos y otros materiales
que resultan pertinentes para el objetivo de la materia, son trabajados
en pequeños grupos alternando con plenarios. A su vez, los
docentes compartimos un espacio de reflexión conjunta del que participan
todos los miembros de la cátedra. Esto se apoya en la
importancia de la colectivización del aprendizaje mostrando las contradicciones
y paradojas entre las acciones, teorías implícitas y
explícitas.
La acción y el análisis posibilitan visualizar la transversalidad al
hacer concientes las diferentes pertenencias institucionales y los
efectos que provocan en la subjetividad.
Autoevaluación colectiva
La autoevaluación de los estudiantes de su propio recorrido en la
materia y en su carrera, llevada a cabo tanto en las instancias formales
de evaluación (individuales y colectivas), como en las informales
– pequeños grupos de estudiantes –, a la que se suman las
evaluaciones compartidas con los docentes – plenarios y clases teóricas
–, y las docentes exclusivas – supervisiones y reuniones de
cátedra –.
Conclusiones
En el presente proyecto se articulan y entrelazan tres modelos de
trabajo instituidos, que suelen organizarse de manera aislada:
- El docente, desde el que se propicia una formación profesional
que incluya una perspectiva institucional.
- El de la intervención institucional, sobre los imaginarios sociales
y las categorías de pensamiento que sustentan esas prácticas, a
fin de abrir espacios para la creación de formas autogestivas y autónomas
de conocer.
- El de la investigación conjunta – de docentes y estudiantes – de
las prácticas de formación y ejercicio profesional de los psicólogos.
En este proceso, estudiantes y docentes reconocemos que el
aprendizaje es una actividad social donde se pone en juego la alteridad,
dando lugar a que otros alteren el orden con que uno entiende
el mundo. Se trata de una revisión crítica de las creencias instituidas
a partir de descubrir que otros piensan con otra lógica.
Los docentes, en nuestra tarea de acompañar a los estudiantes descubrimos
que enseñando se aprende sobre el tema que se trata, sobre
la forma de pensar y de elaborar de los estudiantes y también las
nuestras.
En síntesis, en ese acto de “enseñar y aprender” que se repite, se
cambia, cuando se conjugan el intervenir, el investigar y el aprender
a reaprender.
Licenciaturas en:
Psicología
Psicopedagogía
Psicomotricidad
Psicología social
• Psicología
• Psicopedagogía
• Psicomotricidad
• Psicología Social
Por articulación:
• Psicopedagogía
• Gestión Educativa
• Educación
El amor no se manifiesta en el deseo de acostarse con alguien, sino en el deseo de dormir junto a alguien. Milan Kundera
Carreras de posgrado:
Maestría en Gestión de
• Maestría en Gestión de
Proyectos Educativos
Proyectos Educativos
Especializaciones en
Abordaje Psicoanalítico
• Especialización en
Fe de
erratas
Estimado Roman:
Desde ya quiero agradecerte la
publicacion del articulo: "Lo
colectivo como maquinaria de
produccion de salud, Para que
moverse y salir a la cancha".
Además. pedirte si se pudiese
publicar una fe de erratas ya que
parece haberse deslizado un
error en el mismo en el cual
recién reparo -tal ves entre el
material "medio crudo" que te
envié y la posterior edicion- en el
comienzo del mismo (Campo
Grupal Nª 101) donde dice:
"...Junto al Lic. Martin Kesselman
con quien co fundamos el
Capitulo Salud Mental y Deportes
en la Asociación Argentina de
Psiquiatras (APSA)..." es muy
importante que quede aclarado
que el Fundador del Capitulo en
cuestión es el Dr. Hugo
Dramisino.
En todo caso nosotros pertenecemos
al grupo inicial de co fundacion
y tuvimos la fortuna de
acompañar la tarea de ir
delineando el Capitulo junto al
querido Hugo quien llevo a cabo
-con la trasparencia, la cordialidad
y la destacable ética que lo
caracterizan- la tarea de coordinar,
"empujar" y fogonear con la
afabilidad que lo caracteriza un
colectivo que hoy nos enorgullece
por su producción, por la calidad
y calidez de la gente que lo
compone y el crecimiento sostenido
como referencia en la materia
en tanto promocion de Salud
Mental y Accion Deportiva.
Muy atte.
Claudio Goscilo
Abordaje Psicoanalítico
en Familia y Pareja
en Familia y Pareja
en Patologías Psicosomáticas
INFORMES e INSCRIPCIÓN: Sede Avenida de Mayo de 9.00 a 20.00 en Av. de Mayo 866. Capital . Tel. 5217-7878 int: 286-287. informes@caece.edu.ar
Campo Grupal / 11

Cara de cuarzo
Juan Disante
Con los tradicionales relojes analógicos
uno percibía que el tiempo se
deslizaba con suavidad, sin darnos
cuenta. Las manecillas rotaban calmosas
y no se lograba distinguir
entre lo pasado y el presente. Con
las personas ocurría lo mismo,
porque de algún modo, la gente era
como los relojes. Se las veía cambiar
desapercibidamente y siempre en
una dirección circular. Uno encontraba
a un amigo después de un tiempo
y le decía: “Ché, ¡vos siempre estás
igual!”. Entonces el otro se animaba:
“Y… ¿qué querés? Sigo haciendo la
vida de siempre, sigo casado con
María, voy al mismo club y sigo
siendo radical”. Todo transcurría así.
¡Hasta que llegaron los relojes digitales!
A partir de allí, el tiempo
comenzó a marcarse minuto por
minuto y con números. La pantallita
nos muestra 18.59, y allá como al
rato 19.00. Entonces —dado que el
concreto pasaje del tiempo lo simboliza
el reloj— la pregunta es: ¿Qué
ocurre durante la suma de todo ese
tiempo en blanco en donde parecería
que todo está congelado? ¿Qué, con
esos minutos fatales en los que
quedamos desatendidos por el dios
Hermes? Antes el tiempo era pausado
y pachorriento, ahora tanto los
relojes de cuarzo como la gente,
parecen manifestarse de a saltos y
con apremio. ¿Ha cambiado el Clan
humano o el Transcurso con sus lapsos
abandonó el sosiego? Hoy, si
nos cruzamos en la calle con algún
vecino que no veíamos en meses,
notamos que es otro tipo: se marcaron
sus arrugas, vemos que se
tiñó los cabellos de amarillo, se dejó
la “colita”, usa lentes de contacto, se
hizo la cirugía estética, cambió de
partido político y de psicoanalista
varias veces; además agrega que,
sus viejas convicciones de ultraderecha
las abandonó por las de
“centro”. En fin, la canción que dice:
“El tiempo pasa…nos vamos poniendo
viejos”, está excluida por
bajoneante.
Por eso, se usan definitivamente los
relojes digitales, porque entre los
intervalos del tiempo vacío que marcan,
tenemos la posibilidad de estirarnos
la cara, iniciar una vida nueva,
y hasta de cambiar de religión. En
este caso la metamorfosis se parece
a una cirugía social, más que a una
corporal. En la era del cuarzo, es
muy difícil que las máscaras terminen
cayendo. Es más posible sí, que
esta versatilidad de los rostros
espléndidos llegue a hacerse una
costumbre cotidiana. Es posible que
en el futuro, el flotante semblante ya
no luzca nunca más los trazos de
sus ancestros o la huella de su
propia biografía, que resulte iluso
intentar averiguar en los rasgos de
alguien como piensa o si recuerda su
niñez. El cuadrante circular del cu-cu
de los abuelos, dejaban la impronta
de volver a empezar siempre. La
prisa lineal del digital no deja pensar
qué cosas tenemos que alcanzar y
para qué.
Perdamos la esperanza de intentar
hacernos alguna idea singular de la
clase de individuos que tenemos
ante nosotros, a fin de aproximarnos
o huir. Tendremos que figurarnos
que los rostros, como los relojes, se
han agarrotado como el cuarzo. Ya
no se escucha el cachaciento tictac,
porque ahora te dan la hora
cuando quieren y de a saltitos.
El aporte de Milton Erickson
Integrando el hemisferio
derecho con el izquierdo
Roberto Kertész
1
rkertesz@uflo.edu.ar
Funciones diferenciadas de los dos hemisferios
cerebrales (cuadro 1)
Funciones de los hemisferios cerebrales
A partir de la década del 70 se conoció el rol del hemisferio derecho
en los procesos mentales (Sperry, MacLean, Gazzaniga)
Compilación de funciones de los dos hemisferios (mod. de Bogen,
1975)
Autor Izquierdo Derecho
Assagioli Intelecto Intuición
Austin Convergente Divergente
Bateson & Jackson Digital Analógico
Blackburn Intelectual Sensual
Bronowski Deductivo Imaginativo
Bruner Racional Metafórico
Cohen Analítico Relacional
de Bono Vertical Lateral
Deikman Activo Receptivo
de Beauport De las partes al todo Del todo a las partes
Temporal Atemporal
Dieudonné Discreto Continuo
Freud Proceso secundario Proceso primario
Goldstein Abstracto Concreto
Hilgard Realista Impulsivo
Hobbes Dirigido Libre
Kagan & Moss Analítico Relacional
Kertész Analítico Sistémico
Levy & Sperry Analítico Gestáltico
Lomax & Berkowitz Diferenciación Integración
Maslow Racional Intuitivo
McFie & Piercy Relaciones Correlatos
Oppenheimer Histórico Atemporal
Ornstein Analítico Holístico
Pavlov Segundo sist. Señales Primer sist. Señales
Pierce Explicativo Ampliativo
Polanyi Explícito Tácito
Schopenhauer Objetivo Subjetivo
Sechenov Sucesivo Simultáneo
Teniendo en cuenta estas diferenciaciones, es dable formularse las
siguientes preguntas:
Pregunta 1: En cuáles situaciones corresponde activar cuál hemisferio?
Respuesta: Izquierdo: para todo tipo de operaciones racionales, matemáticas,
lógicas y lingüísticas, descomponer en partes, analizar, captar
los árboles uno a uno
Derecho: para intuir, empatizar, crear metáforas, generar modelos
visuales, percibir totalidades, sintetizar, percibir el bosque como un
todo.
Grupo de formación en Psicodrama,
orientación Deleuze - Guattari - Foucault
Abierta la inscripción. Sábado de 10 a 12 hs.
Cel: 15-3141-4818 4308-2206
www.pasajezen.com.ar rcela@fullzero.com.ar
Lic. Silvia Schverdfinger
Supervisión:
Dr. Eduardo -Tato- Pavlovsky
Informes: 4962-4583
info@eipaso.com.ar
www.eipaso.com.ar
• Cursos de Psicodrama
y Coordinación grupal
• Grupos Terapéuticos
con Psicodrama
• Supervisión Individual,
Grupal e Instituciones
• Talleres teóricos y
vivenciales
Campo Grupal / 12 El sueño es un arte poético involuntario. Immanuel Kant
Pregunta 2. Cómo combinar las funciones de ambos?
Respuesta: Pueden alternarse para resolver problemas ( fases divergentes,
creativas y convergentes, racionales).
Hemos generado también un ejercicio, la Reverberación interhemisférica
( Kertész y Kerman, 1987, Kertész, 2003a). Consiste en escoger
una palabra, por ejemplo, “ catástrofe” o “ éxito” y permitir que surja
una imagen escena que corresponda. Luego, al ver y oir internamente
dicha escena, pensar una palabra o frase que la describa. Luego, volver
a producir una nueva escena a partir de dicha palabra o frase.
Esta técnica produce un “ traslape” de información de un hemisferio
a otro, a través de las fibras del cuerpo calloso que los conectan y su
práctica puede favorecer dicho proceso en forma inconsciente.
Otro método es asignar algún fondo musical a un texto, o bien , letra
a la música, O bien, describir un edificio, cuadro o escultura verbalmente.
Es muy adecuado evaluar con el hemisferio derecho paro para ser
comprendidos necesitamos expresarnos desde el izquierdo, en forma
clara , precisa y secuencial ( paso a paso).
Pregunta 3: Cómo se integran dichas funciones con las estructuras
subcorticales, como el sistema límbico, vinculado con las emociones?
Respuesta: Proponemos el paradigma “ Pienso y Veo, luego Siento
y Hago” ( Kertész , en Kertész y Kerman, 1987). El mismo postula que
en la inmensa mayoría de los casos en nuestra vida actual, las emociones
surgen luego de procesar la información en la corteza cerebral del
hemisferio izquierdo ( Pienso) o la del derecho ( Veo, pero también
Oigo, Huelo, Gusto o Toco)..
Recién después el cerebro transmite los resultados de sus pensamientos,
diálogos internos o imágenes hacia el sistema límbico, principal
sustento de las emociones.
Por ende, si cambio lo que Pienso y Veo, cambiaré lo que Siento y
Hago. Existen técnicas cognitivas especificas para la corrección de pensamientos
y creencias disfuncionales , así como de las imágenes internas
inadecuadas. Las cuales producirán cambios favorables en lo que
sentimos
(emociones y sensaciones físicas), así como en las conductas que
emitamos, pero las mismas exceden al ámbito de este trabajo.
Evidentemente, nuestra cultura occidental a partir del surgimiento del
método científico y de la tecnología, centró la valoración del desempeño
personal, profesional y a la educación en torno a las funciones del
hemisferio izquierdo, salvo para lo referente a las artes.
En la comunicación humana en general y la psicoterapia en particular,
es indispensable integrar ambos tipos de capacidades.
A continuación relacionaremos los datos previos con las “ escuelas”
psicoterapéuticas, en especial la creada por Milton J. Erickson.
2. Vinculación de algunas “ escuelas” de psicoterapia con
los hemisferios cerebrales (cuadro 2)
Basadas principalmente Basadas principalmente
en el hem. izquierdo en el hem. derecho
Cognitivo / conductual ( Beck, Ellis, Imaginería ( Desoille, Schorr)
Mahoney)
Análisis Transaccional ( Berne) Focalización ( Gendlin)
Logoterapia ( Frankl) Gestalt ( Perls)
Psicoanálisis ( Freud) Ericksoniana
3. El aporte de Milton H. Erickson
Algunos autores consideran a este extraordinario psicoterapeuta como
Mat. INACYM CF 692
* asistencia psicológica grupal
* entrevistas de orientación
* talleres expresivos: trabajo corporal, yoga, teatro, salsa,
letras de canciones * taller sobre HIV * taller de la memoria
• área docencia: cursos - seminarios
Cursos: Coordinación grupal
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el mejor comunicador que se haya conocido. Hasta podríamos clasificar
a las “ escuelas” de psicoterapia en dos grandes categorías: la
Ericksoniana, por una parte y todas las demás, por la otra.
Sólo trazaremos un resumen de las principales características de su
enfoque.
Si empleamos un modelo cibernético, podemos resumir sus habilidades
comunicacionales como sigue:
Un modelo cibernético del proceso de comunicación de
Erickson (cuadro 3)
Input
(observación exquisita de las conductas del cliente: palabras y frases,
tonos de voz, expresiones faciales, pupilas, color de la piel, tensión
muscular, ritmo respiratorio, movimientos de los miembros, postura
del tronco, etc.)
En caso de atender a varias personas simultáneamente, como en las
sesiones de pareja, familiares o grupales, se apela a la visión periférica
Throughput
(percepción racional, intuitiva y empática de las comunicaciones del
cliente, y de su marco de referencia individual. Formulaciòn de un plan
estratégico para lograr los cambios
deseados, generalmente en forma indirecta y permisiva, pero directiva al
mismo tiempo)
Esta fase implica habilidades de Inteligencia Intra- e Interpersonal del
terapeuta / comunicador. Así como operar desde la Posición Existencial
Yo estoy bien- Tú estás bien y con aceptación incondicional del otro.
Output
(Emisiòn de respuestas verbales y no verbales en varios niveles simultáneos,
dirigidos especialmente a distraer la mente conciente e influenciar
a la inconsciente, activando sus recursos creativos y eliminando las
interferencias conscientes)
Implica también reflejar / acompasar
los contenidos
( qués) y el proceso
( cómo)de la comunicación de la otra persona. Su objeto es establecer
rapport.
Feedback
( Observación de los resultados de sus comunicaciones en el cliente, en
especial en cuanto a la utilización de las resistencias ue surjan. Ajuste
de los siguientes mensajes a emitir, a los resultados logrados, para mantener
el rapport y la confianza recíproca)
Todas estas etapas requieren capacitación y supervisión de un profesional
que las domine y ofrezca un modelo para su incorporación y la
ASOCIACION GESTALTICA DE BUENOS AIRES
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Gestáltico en la Teoría y
Práctica clínica”
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Femenina”
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Un acercamiento al mundo íntimo
de la sexualidad de las mujeres.
Sus fantasías, deseos y diversidades.
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de 10.30 a 12.30 horas
“Problemática y Abordaje de las
adicciones”
Lic. Mirta Domato
Adicciones: Diferencias entre con-
sumidores y adictos, entre adicciones
y drogodependencias.
Factores que predisponen a la
personalidad adictiva. Proceso
terapéutico: del Apego al
Desapego.
6 encuentros, los lunes cada 15
días.
Inicio: 8 de septiembre
de 13.30 a 15.30 horas.
“Curso teórico-práctico para la
coordinación de grupos
terapéuticos en co terapia”
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Situaciones temidas que deben
ser previstas e intervenciones
adecuadas que deben ser reflexionadas
(violencia, manipulación,
impasse en terapia grupal,
violaciones del encuadre, etc.)
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Inicio: 9 de septiembre
de 13 a 15 horas.
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posterior supervisión.
Las intervenciones de Erickson eran a su vez científicas ( aplicando
conocimientos previos información obtenida inductivamente) y artísticos
( diseñados creativamente para casos individuales encarados como
únicos e irrepetibles).
A continuación enumeraremos otras características que distinguen a
Erickson de otros terapeutas.
1.Falta de apego a una teoría o diagnóstico y adaptación flexible a
cada personalidad y problemática individual
2.La mente inconciente no es considerada como un depósito de represiones
sexuales y agresivas de ideas inaceptables para el individuo, propias
del psicoanálisis freudiano, sino una vasta base de datos experienciales
y aprendizajes, que implican un gran potencial creativo y de cambio.
3. La actitud es habitualmente permisiva en lugar de autoritaria, aunque
si la situación lo indica, puede actuarse de este modo, “ acompasando”
el programa interno del cliente ( lo llamamos así en lugar de “
paciente” porque esto ùltimo equivale a padecer, sufrir y al modelo
médico, mientras la denominación de “ cliente” o “ client ” , en inglés,
describe un servicio profesional brindado a una persona que nos contrata.
4. Gran importancia asignada al ciclo de vida del individuo y su grado
de madurez respecto de su edad cronológica, así como al rol a ocupar en
su grupo familiar, apropiado a dicha edad y su sexo.
5. La utilización de lo que “ trae” el cliente en el plan terapéutico ,
incluyendo su resistencia. Ësta
no es calificada como tal, sino como una forma de comunicarse con
el profesional.En la misma forma de consideran los síntomas: un modo
de establecer contacto.
6. En general no ataca directamente al síntoma ( el “ qué” ) sino alguna
característica acompañante del mismo ( el cuándo, dónde, comó,
cuanto, con quién,etc.)Por ejemplo, a un adolescente que se chupaba el
pulgar derecho, le expresó que era injusto con los otros dedos, que también
merecían ser chupados cada media hora, con lo cual trasformó un
hábito en una obligación tediosa, extinguiéndolo ( aplicó cuántos dedos
y cuanto tiempo). A niño de 6 años con enuresis le dijo que algunos
pequeños de hasta 6 se mojan, pero los grandes, como de 7 o más ya
no, y que él podría seguirse mojando mientras no cumpliese esa edad.
A un hombre con insomnio le preguntó qué detestaba hacer más. Le
contestó que fregar el piso. Entonces le indicó que cuando no pudiese
dormir, que se levantara y lo hiciese, y que contemplara fijamente su
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PSICOLOGÍA DE LAS
INSTITUCIONES
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institucionales
Encuentros
mensuales de
análisis de las
prácticas y
reflexión teórica
Diana Markwald
(Analista Institucional
Docente Posgrado UBA)
4957-2523
dianamarkwald@fibertel.com.ar
La mayor parte de los problemas el mundo se deben a gente que quiere ser importante. Thomas Eliot Campo Grupal / 13

CASONA CULTURAL
HUMAHUACA
“nosotros no es un lugar al
que se pertenece, es un
espacio al que se ingresa para
construirlo”
I. Lewkowicz
Centro Cultural cuyo micro
emprendimiento tiene aristas
de trabajo desde la Salud
Mental, la educación por el
Juego, el espacio comunitario
barrial, y el área artística:
Intentando armar un tejido
social, para la reconstrucción
de vínculos solidarios, promover
la cultura, difundir valores
de salud y articular creativamente
lo que esté pasando en
el entramado social que participa.
La Casona asumió ese
papel de referente barrial. Es
un lugar donde los vecinos y
tallerístas atienden el bar, pintan
murales en las casas, arman
milongas callejeras, intervenciones
recreativas y emprenden
movidas solidarias.
ÁREA DE TIEMPO LIBRE
Y RECREACION:
· “CUMBRE DE JUEGOS
CALLEJEROS”.
Sabados 15 a 18 hs
ÁREA PSICODRAMA:
·TEATRO ESPONTÁNEO:
primer viernes del mes 20 hs.
PSICODRAMA
PSICOSOCIAL: 5tos Viernes
PSICODRAMA Y JUEGO:
Jueves de 18.30 a 20.30 hs
ÁREA CULTURA,
ARTE Y SALUD :
TEATRO, Martes y 20.30 hs.
Miércoles 19 hs.
DIBUJO Y PINTURA: viernes
14 hs y sábados 13 hs.
PRODUCCIÓN
DE ESPECTÁCULOS:
Lunes 20 hs.
DANZA BUTOH :
lunes 19 .30 hs
TALLER DE PERCUSIÓN:
lunes 1800 hs
DANZAS AFRICANAS: miércoles
y viernes 18 y 19.30 hs
DANZA CONTEMPORANEA:
martes y jueves 17.30 hs
TANGO:
martes 19 hs
NARRACIÓN ORAL
miércoles 19 hs
AREA COMUNITARIA:
BARRIOS, MEMORIA
Y JUSTICIA: Jueves 19
VENTANA ABORIGEN:
Segundos viernes 21 hs
CASONA CULTURAL HUMAHUACA
Humahuaca 3508
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biblioteca, con lo cual acabó durmiéndose, primero sentado y luego en
su cama. Aquí aplicó una técnica del conductismo operante, creando un
castigo y un refuerzo negativo al comportamiento de insomnio.
7. Prescripción paradojal del síntoma, pero con alguna modificación
del tipo mencionado en el punto anterior.
8. Empleo de anécdotas aparentemente irrelevantes pero con mensajes
insertados ( “ embedded” )
cuentos, chistes, acertijos, relatos, todos con intención terapéutica.
9. Indicación de tareas a cumplir. Una que usaba frecuentemente era
la de escalar el Pico Squaw, cercano a su casa. El efecto variaba según
la persona. Uno le dijo que al ascender son su mujer se percató finalmente
del poco interés que ella tenía por apoyarlo y decidió por consiguiente
divorciarse. Otro refirió que al ver al paisaje desde la altura descubrió
que su visión de si vida era muy restringida y decidió “ ampliar
su panorama”, con varios cambios.
10. Técnicas hipnoticas de trance, directas o indirectas pero como lo
mencionamos, habitualmente permisivas, desactivando las pautas rígidas
de la mente conciente para activar los recursos ocultos de la inconciente.
Sus operaciones sobre la misma son notablemente similares a
las funciones del hemisferio derecho, descriptas más arriba.
En sus trabajos describe diversos métodos de inducción, incluyendo
los mensajes de “ doble vínculo” ( “ Ud. puede entrar en trance con los
ojos cerrados o abiertos, sentado o de pie, ahora o más tarde” . A un
hombre muy resistente: “ Ud. está sentado con los brazos sobre sus
piernas. Quiero que se resista con toda su fuerza a que sus manos se
levanten”)
Disociaciones ( dejar el cuerpo en un sillón y la cabeza en la cama ,
para una mujer con dolores cancerosos intratables). Centrar todo el dolor
en una zona pequeña del cuerpo y transformarlo en otro tipo de sensación,
como picazón. A veces no era posible suprimir del todo los síntomas,
pero sí tornarlos tolerables.
Alucinaciones positivas( una sesión de terapia familiar en la cual sólo
la madre estaba presente, el resto alucinados) y negativas.
Distorsión del tiempo. Compresión gradual del tiempo de percepción
del dolor.
Imaginería de futuro en estado de trance, resolviendo los problemas
con la mente inconsciente con amnesia posterior para que no interfieran
las limitaciones de la parte conciente.
Regresión y progresión en la edad, la primera para resolver temas del
pasado y la segunda para adelantarse a experiencias del futuro con fines
preparatorios.
CENTRO DE
BIOCREATIVIDAD
Fundado en 1987
Actividades de la segunda mitad del año
Area Terapéutica
- Psicoterapia Bioenergética/ Expresiva (Grupal e Individual)
- Terapia Familiar - Terapia de Pareja
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Talleres
- Ejercicios Bioenergéticos
- Biocreatividad (Por medio de los ejercicios Bioenergéticos, la
energía bloqueada es liberada, aprovechando su caudal para el
desarrollo creativo. En estos talleres se integran a otros profesionales
de distintas áreas: plástica, teatro, canto y música).
- Vínculos Creativos con Con-tacto
- Para padres de adolescentes
- Prevención de VIH/ Sida.
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(Tema a confirmar cada mes).
Director: Dr. Gerardo Smolar
Médico Psicoterapeuta - Bioenergetista
Profesor de Bioenergética y Biocreatividad
en el Centro Gestáltico de San Isidro desde 1994.
Luís Viale 89 (C1414ECA) - Tel: 4855-2772
E- mail: gerardo@biocreatividad.com.ar
centrodebiocreatividad@yahoo.com.ar
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Campo Grupal / 14 El verdadero viaje se hace en la memoria. Marcel Proust
Sustitución deliberada del síntoma, como paso previo para su resolución
total.
11. Total confianza en su capacidad de lograr cambios positivos en
sus clientes,lo cual era percibido por los mismos. A veces planificaba
cuidadosamente durante semanas su estrategia, en otros casos improvisaba
con gran eficacia cuando esto era posible.
12. Indiferencia en cuanto si le agrada o no a su cliente ( su autoestima
no dependía de ser o no aceptado)
13. Redefinición de los mensajes del cliente en la forma más conveniente
posible.Erickson era un orfebre el lenguaje, al cual había estudiado
exhaustivamente en cuanto a las implicancias de las palabras y
frases, pero ajustadas al marco de referencia de cada individuo.
Ësta es sólo una breve enumeración que merece ser completada con
un prolongado y exhaustivo estudio de los escritos de Erickson y de sus
discípulos, y en lo posible de la audición de sus grabaciones y videotapes.
Es una tarea de años, que debe ser acompañada de una práctica continua
y el aprendizaje por ensayo y error.
Tal dedicación terminará no sólo por incrementar los recursos técnicos
del profesional, sino modificará favorablemente su personalidad, que
es realmente su herramienta de trabajo, brindando también una capacidad
de comunicación excepcional de utilidad para todos nuestros roles.
Y como terapeutas, una gran flexibilidad, autoestima, respeto y compasión
por el sufrimiento ajeno, así como confianza en el potencial para
el cambio positivo.
En el lenguaje del Análisis Transaccional, un Padre Crítico o correctivo
positivo con valores sólidos y lógicos. Un Padre Nutritivo o
Protector cálido.Un Adulto bien informado y en constante búsqueda de
actualización. Un Niño Libre que disfruta aquí y ahora, curioso, creativo
y con buen
Bibliografía
Bogen, J.E: “ Some educational aspects of hemispheric specialization”.UCLA
Educatator,
No. 2, E:E:U.U., 1975.
Gazzaniga, M.y LeDoux, J. E.: “ The integrated mind”. , Plenum Press, Nueva York,
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Kertész, R. y Kerman, C.: “ Quiere hacer terapia?”.Ed. Ippem, Buenos Aires, 1987
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Ippem, Buenos Aires, agosto de 2003
MacLean, P.D.: “ The triune brain in evolution”. Plenum Press, Nueva York, 1990
Restak, R.M.: “ The brain” Bantam Books, Nueva York, 1984
Rosen, S.: “ Mi voz irá contigo”. Paidós, Buenos Aires, 1986
Sperry, R.W., Gazzaniga, M.S. y Bogen, J.E.: “ Interhemispheric relationionships: the
neocortical commisures; syndromes of hemispheric disconnection”. En P.J. Vinken y
G.W. Bruyn ( editores),
Handbook of clinical neurology, Vol 4, Ámsterdam, 1969
Zeig, J.K..: “ Un seminario didáctico con Milton Erickson”. Amorrortu, Buenos Aires,
1985
Primera Jornada de Psicología Institucional
PENSANDO JUNTOS COMO PENSAMOS:
UN ANÁLISIS DE LAS PRÁCTICAS INSTITUIDAS
“En homenaje a Fernando Ulloa”
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cuatrimestre. Cupos Limitados
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- Curso “De Shakespeare a Verdi: Macbeth” por el
Prof.
28 de julio y 4 de agosto, de 19 a 21 hs.
Arancel: $60.
- Grupo de Estudio de Religiones: Tema: “El
Crisitianismo” 5 de agosto, de 14:30 a 16:30 hs.
Arancel: $100. Duración: Anual.
- Tributo a Charly García por La vanguardia es así.
7 de agosto, 20 hs. Entrada: $5
- Inauguración de Graciela Borthwick “Obra
reciente” 11 de agosto a las 19:30 hs. Actividad no
arancelada.
- Curso “Jung: La recuperación de lo sagrado”
12 de agosto, de19 a 21 hs. Arancel: $140.
Duración: 6 clases.
- Curso “Cine político argentino”
13 de agosto, de 19 a 21 hs. Arancel: $100.
Duración: 4 clases.
- Conferencia de Dina Picotti “La presencia
ausente del negro en Argentina” 14 de agosto a las
19:30 hs. Actividad no arancelada.
- Curso a cargo de Inés Cisneros “Mirar Arte”
21 de agosto, de 19:00 a 20:30 hs. Duración: 5
encuentros. Arancel: $140.
- Presentación de la colección infantil “El libro de
Agustín” 25 de agosto, a las 19:00 hs. Actividad
no arancelada.
Talleres y Grupos de Estudio que continúan
(Duración anual)
- Grupo de Estudio, “Lectura de la Biblia”
Los lunes de 16:30 a 18:30 hs. / Arancel: $100
mensuales. Comenzó: 4 de febrero.
- Tallerde Escritura Creativa “El placer de escribir”
Jueves de 14 a 16 hs./ Arancel: $130 mensuales.
Comenzó: 13 de marzo.
- Taller de Escritura articulado con artes de Viviana
Guerra “Sol de letras”. Los viernes de 19:00 a
20:30 hs. Arancel: $130. Duración: Anual.
Comenzó: 2 de mayo.
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Coordinador en Psicodrama
Seminario Mapa Fantasmático Corporal
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buma@webar.com / www.mascarainstituto.com.ar
El Bancadero - Escuela Taller de Psicología
Política y Economía Social
Tema: El Sujeto, las Organizaciones y la Sociedad
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El Bancadero Asoc. Mutual de Asistencia
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Pje Carlos Gardel 3185 2º piso “E” Abasto
4862-0944/ 4865-0923
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c/mes 14 a 18hs)
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c/mes de 9 a 13hs)
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c/mes de 20 a 21,30hs) y (3º Sábado de c/mes de
17,30hs a 20hs) (Inscripción previa)
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. Grupos Terapéuticos (entrevista de admisión sin
cargo)
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individuales y grupales
Lic. Silvia Schverdfinger y equipo (Supervisión:
Eduardo “Tato” Pavlovsky)
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Miércoles 6 de agosto – Jueves 14 de agosto, 19
hs.
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El inicio de clases para la carrera será el 12 de
agosto
Informes e inscripción: Av. Córdoba 4484, Capital.
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Orientado a: profesionales y estudiantes de las carreras
de: Psicología, Psicopedagogía, Docencia,
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Ocupacional, Psicomotricidad y carreras afines.
Modalidad: a distancia por internet
Duración: agosto y septiembre
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Occidente
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Duración: bimestral
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Una ampliación del paradigma de la Psicología
Humanista,integrando antiguos conocimientos de
Oriente (Taoísmo, Budismo, Yoga, Sufismo) para su
aplicación práctica en la comprensión de si mismo,
así como en el trabajo con pacientes y en la coordi-
nación de grupos
15-5377-2025 (directo) 4823-4683 (mensajes)
info@centrotranspersonal.com.ar
www.centortranspersonal.com.ar
Taller de agosto de ArtTerapia
El objetivo de este taller es participar de una experiencia
grupal para conocer la modalidad de arte terapia.
Para ello se propone una exploración a través
del recorrido por una secuencia de imágenes.
Se utilizarán técnicas y materiales de Arte plástico,
pero no es necesario tener habilidades ni
conocimientos específicos.
Duración: cuatro encuentros
Martes 12 / 19 / 26 / de Agosto y 2 de Septiembre.
Horario: 18.30 a 20.30 hs.
Cupos reducidos. Inscripción previa.
4855-9680 / 4778-3928 / 15-5599-2932
judithmendelson@yahoo.com.ar
Jornada anual. Actualizaciones en el abordaje de
pacientes con vulnerabilidad somática
Trabajos libres – Paneles – Talleres
Sábado 30 de agosto
Lugar: sede IPBA
Av. Córdoba 4580, Capital
Horario: de 10 a 17 hs.
Arancel: $60 - Se otorgan becas
Informes e inscripción previa: 4775-1673
ipba@fibertel.com.ar
www.psicosomaticaipba.org.ar
Escuela de Terapia Escénica
Abierta la inscripción segundo ciclo del 2008.
- Barrio Norte (BA) (comenzando el sábado 30 de
agosto a las 14.30, frecuencia quincenal)
- Zona Oeste (comenzando el jueves 21 de agosto
a las 19.30, frecuencia semanal)
Módulo cuatrimestral no correlativo:
“La Creatividad como Camino” o cómo construir
nuevos personajes para nuestra permanente expansión.
Habrá una entrevista de admisión para todos los
postulantes e invitación a clase abierta mostrativa
para quienes lo soliciten.
Dirige: Lic. Graciela Piperno
Informes: Grupo Ananké
4659-4007 /4443-8965
grupoananke@ciudad.com.ar
Programa Completo: grupoananke.blogspot.com
Agosto en el Centro de Biocreatividad
Director: Dr. Gerardo Smolar
Talleres
- Ejercicios Bioenergéticos
- Biocreatividad (Por medio de los ejercicios
Bioenergéticos, la energía bloqueada es liberada,
aprovechando su caudal para el desarrollo creativo).
-Taller de integración “Del corazón a la arcilla”
(Cuerpo y plástica).
- Vínculos Creativos con Con-tacto.
- Para padres de adolescentes.
- VIH/ Sida.
- Taller Gratuito/ 3er sábado del mes.
Sábado 16 de Agosto de 10 a 12hs
“La Bioenergética en mí día a día”
(Tema a confirmar cada mes).
Luís Viale 89 (C1414ECA)- Tel: 4855-2772
E- mail: gerardo@biocreatividad.com.ar
centrodebiocreatividad@yahoo.com.ar
www.biocreatividad.com.ar
Curso on line “Familias Ensambladas”
(“Tuyos, míos y nuestros”)
Del 12 de agosto al 30 de septiembre
Docente: Dra. Dora Davison mas informacion
Destinatarios: Psicoterapeutas, Psicólogos, Psicopedagogos,
Consejeros, Mediadores, Trabajadores
Sociales, Abogados de Familia.
Temario:
A qué se denomina familia ensamblada
Diferencias estructurales y dinámicas
La pareja
Los nuevos roles
Los chicos
La parentalidad ensamblada
Conozca nuestras aulas y otros datos de interés,
entrando a www.familias21.tizaypc.com
Informes e inscripción:
familias21internacional@gmail.com
Seminario de introducción al Coaching & PNL
Inicio jueves 7 de agosto.
Días jueves de 18 a 20 hs
Coach: Luisa Cordeiro
El mundo es un espejo en el que todos pueden contemplar su propio rostro. Willians Thackeray
Vacantes limitadas
Informes e inscripción: 15-6120-6105
cursos@luisacordeiro.com.ar
7° Congreso Internacional de Salud Mental y
Derechos Humanos
Se encuentra abierta la inscripción al 7° Congreso
Internacional de Salud Mental y Derechos Humanos
organizado por la Asociación Madres de Plaza de
Mayo a realizarse del 10 al 13 de diciembre de
2008 en la Universidad Popular Madres de Plaza de
Mayo sita en Hipólito Yrigoyen 1584, Buenos Aires,
Argentina.
Al interior de este acontecimiento se efectuará el V
Encuentro de Lucha Antimanicomial, y el III
Encuentro Internacional de Detenidos en
Movimiento.
Presentación de trabajos hasta el 12 de septiembre.
Informes e inscripción en la Universidad Popular
Madres de Plaza de Mayo (Sede 2), Hipólito
Yrigoyen 1432 1° Piso, Bs. As. Argentina. Tel (011)
4382-1055.
Mayor información en www.madres.org o remitirse
a congreso@madres.org
Curso de formación en análisis institucional
Abierta la Inscripción - Ciclo 2008
Agosto – Noviembre
Lunes de 19 a 21hs.
Ciclo Introductorio
Análisis Institucional
Certificados oficiales
Informes e inscripción. 4983-2278 4981-2193
4381-3358
IAETES: San José 225-243 – Capital
IX Congreso de Análisis Transaccional Integrativo
“El Análisis Transaccional en la Sociedad del
Conocimiento”
Del 22 al 24 de agosto
El encuentro abordará, entre otros, los siguientes
temas:
- Las nuevas ciencias de la conducta
- Ejercicio profesional del psicólogo Análisis
Transaccional y Educación
- Religión y psicología
- Psicoterapia positiva y Coaching
- La pareja y la familia contemporánea
- Inteligencias Múltiples y Creatividad
- Conciencia del cuerpo
- El manejo del stress
- Psicoterapia y psicofármacos, usos y abusos
- Indicadores actuales del stress psicosocial en el
espacio laboral
También se tratarán temas relacionados con
Emprendedurismo, Empresas familiares y
Resolución alternativa de conflictos.
Los interesados en recibir mayor información
pueden comunicarse vía e-mail a:
rkertesz@uflo.edu.ar csteccon@uflo.edu.ar
o telefónicamente al (011) 4631-4208/8056
Organiza: Universidad de Flores
EPISTEMOLOGÍA
para principiantes
Denise Najmanovich
Mariano Lucano
Presentación:
lunes 11 de agosto. 19,30 hs.
Microcine del Centro Cultural
Recoleta, Junin 1930
Entrada libre y gratuita
Campo Grupal / 15

BARCELTA
Luis Gruss
Campo Grupal / 16
lgruss@ciudad.com.ar
Una cita ambigua en medio de una calle que podría ser un río o
un desierto sería como decir ningún lado puesto que cualquiera
de las dos orillas y tantísimas posibilidades no conspiran -sin
embargo- cuando oscurece y el hombre camina derivando, o
mejor, buscando en calma a la bailarina cuya figura se va delineando
entre las sombras.
Ella es joven, un calificativo que en este caso no aporta demasiado,
aunque en otras circunstancias debería. El hombre de la
chaqueta gris, en cambio, arrastra algún dolor de años, una ofensa
quizás o una caída en un pozo del cual no ha salido por más
que haya aprendido a deambular en huecos tremendos de seca felicidad.
La bailarina espera sentada en un escalón tan alto como el
nivel del mar. Sus piernas están cubiertas por una pollera de los
sesenta o los setenta, lo suficientemente amplia como para que
no pudiera adivinarse mucho de sus nalgas africanas; el torso
parece contenido por una blusa que difícilmente simula los
pechos que al parecer buscan lo que está delante de sí misma; el
pelo de perra lanuda, los aros largos como discursos, toda ella
nimbada por cierta sonrisa que algunos, los menos ingeniosos,
denominan imborrable por cierta degradante inclinación a la
comodidad.
Los dos van o iban a entrar en un bar tenue o de luz amortiguada
como habría detallado la bailarina en días menos feos y mojados;
pero el lugar indicaba un abandono de vitalidad: persianas
cerradas como párpados, ninguna luz de oposición, el desaliento
de lo que pudo ser y quizás no volvería. La bailarina y el hombre
de la chaqueta gris se miraron largamente con ganas tal vez
de abandonar el plan que habían apurado pero dispuestos en fin
a dar algún alivio a sus cuerpos cansados, quizás compartiendo
una bebida extranjera, una broma, un beso dibujado con pinceladas
gruesas como en ciertos cuadros modernos, las manos buscándose
el origen mismo de las uñas rotas a dentelladas. Y no
por casualidad este relato empieza a desplegarse ahora en pasado,
forzando a sus verbos para que abandonen el puro presente hasta
perderse en la vana conjugación de un recuerdo.
-Adónde vamos— dijo o preguntó el hombre de la chaqueta gris
mientras la bailarina se levantaba de todo el día quizás para dar,
como en el circo, un triple salto mortal.
Ante la falta de respuesta caminaron unas cuadras hasta el sitio
caratulado como Barcelta, un lugar de esos que invitan a besarse
y a reír con cierta manía exhibicionista. No fue el caso de ellos
que se depositaron (es un decir) en unos sillones de cuerina blanca,
próximos a la pared, y comenzaron a hablar distraídamente
mientras en el fondo una pareja apretaba clavijas de hotel por
horas y otra, más próxima, daba lugar a esas risas molestas que
suelen rondar en carnavales de nylon. Nada especial. La conversación
derivó por asuntos de infancia, música incidental, un
padre desinteresado y ya con otros hijos, una madre esperando
algo indefinido en algún punto del norte cercano y cosas así
como ir al baño, reír o sonreír por cualquier cosa, esperar que la
jarra de cerveza produjera efectos que posibilitaran un beso o
algún acercamiento de otro orden. Nada de eso ocurrió si bien la
nada no alcanza para abarcar las sutilezas; lo que hubo, si es que
el verbo haber tiene peso en el contexto, fue una escena incomprensible
desde cerca y previsiblemente íntima a la distancia que
los hechos ofrecían. La bailarina habló de sus manos y las mostró
a la manera de los magos. Ni por aquí ni por allá. Son chicas,
dijo como quejándose y estirándolas hacia delante como para
que el hombre de la chaqueta gris las tomara y extendiera la
acción hacia los brazos delgados y, luego, hasta el cuello que se
dejó caer con armonía de gran cabellera para que la mano velluda
del hombre pudiera deslizarse en un sitio invisible pero cierto,
es decir, el cuerpo real de una mujer expuesto en su mayor
carencia y entregado a lo que fuera en una situación de luz baja
y por completo fuera de programa.
Aún así la bailarina se endureció de pronto, dijo vamos, el hombre
pagó a velocidad cansina y los dos salieron de ahí como
sonámbulos a una calle ingrata y más bien despoblada.
-Quiero fumar- resumió ella y fue en busca de fuego, algo que
raramente falta en los tugurios. El hombre de la chaqueta gris
aprovechó la escena para tomar a la dama por atrás y acariciarla
obscenamente como lo habría hecho en otras ocasiones más o
menos similares e igualmente improductivas. La bailarina no
puso reparos pero empezó a andar a grandes zancadas hasta que
la llegada de un auto la hizo dispararse o disiparse luego de intentar
unos besos piadosos en la comisura de los labios del varón
desconcertado, casi indiferente a lo que ocurría, viéndola extin-
guirse de pronto con la misma facilidad con que hasta hace un
instante la observara estirar sus manos, sus brazos y el cuello en
una entrega no tan común hacia un desconocido que ahora había
quedado a la intemperie como siempre, tratando vanamente de
reconstruir los momentos esenciales de lo que acababa de pasar
con su mente poco fértil, más bien apagada, diluida en luces de
autos o vidrieras mientras consideraba su situación. Alcanzó a
meditar apenas en las tantísimas posibilidades que ofrece la
noche a los que han muerto de verdad hace ya tiempo y con
pocas ganas de resucitar, más a esa hora tan inconveniente de la
noche extrañamente amortiguada.
RINCÓN DE LUZ
Marcelo Miceli
LA CITA
La palabra cita tiene por lo menos dos significados
posibles: encuentro entre personas, referencia
a algún autor que se reproduce textualmente
en un escrito. Pero quienes trabajan con
el lenguaje (y los peces banana forman parte de
esa extraña legión) no se hacen demasiados
problemas con el sentido último de las palabras
que usan. En todos los casos una cita es resultado
de una invitación colectiva o individual que
produce algún efecto inesperado y singular. Y si
no esperamos lo inesperado -decía Heráclito
con razón- jamás lo encontraremos.
marcelo.miceli@yahoo.com.ar
La mesa del bar está ocupada. La elegí por estar estaba alejada
del resto, en un rincón que permite ver la calle. Un morocho
toma café con leche y piensa en algo que solo le incumbe a él.
No está sentado en mi mesa sino al lado, pero su presencia me
impediría estar tranquilo, que para eso vengo. Más tarde una
mujer le hará compañía. No es el tipo de mujer con quien lo asociaría.
Cada pareja es un mundo.
Entre el morocho y yo hay tres coreanas y un coreano. Son coreanos
porque tienen la nariz metida para adentro. Caras aplastadas.
Así me explicó un amigo que eran los coreanos, a diferencia de
los chinos, que no recuerdo que me dijo.
No entiendo lo que dicen, aunque hay risitas cada tanto. Por la
distancia tampoco entiendo qué es lo que habla el morocho con
la mujer (ya llegó), así que el resultado es el mismo.
Nadie puede explicar el clima caluroso de estos días de invierno.
La moza me indica que los tapaventanas están rotos y que por
eso hace calor. La moza siempre tarda en venir por mi pedido y
cuando viene dice siempre lo mismo: "disculpá pero no te vi
subir". Ponen un solo mozo para planta baja y para arriba. Es
lógico que no me vea ni me quiera ver. Sube y baja las escaleras
en una rutina a la que nadie podría acostumbrarse. ¿Merece
propina por eso?
Ahora la mujer del morocho parece más acorde. Usa un pulover
rojo y se sube los lentes a la cabeza. Tiene rulos. El morocho
usa campera verde militar. Discuten civilizados. Ninguno interrumpe
su desayuno.
La televisión está en Hallmark, sin volumen. Parece un policial.
Hay movimientos rápidos de cámara y una rubia platinada con
un ojo tapado por el peinado. Otra escena: una pareja discute. No
dura tanto como para un Oscar dramático, pero va en esa tónica.
Parece que ella se automedica porque él descubre un cajón con
pastillas. Ahora pelean: gana él cuando le aprieta el cuello.
La radio del bar es Kabul. Pasa mejor rock que la mayoría de las
radios. No pasa melódicos. Es raro que un bar tenga a Kabul
como sonido de fondo. Quizá el bar me guste por esto.
El morocho no toma café con leche sino cortado o café solo. No
había visto el pocillo. Se lleva las manos sobre la cabeza. Casi
enseguida mueve su brazo derecho frenéticamente, puntualizando
algún reproche.
Los coreanos empiezan a hablar en castellano. Después callan.
Ahora en la película se besan, pero no son los mismos de antes.
Aunque el reflejo del sol me impide, la verdad, distinguir bien
lo que pasa. Tras el beso hay tiros. Los mismos que se abrazaban
ahora quieren matarse.
El sol baja hacia el morocho y la mujer. Kabul pasó a una canción
frenética de las que pone cada tanto. Los coreanos o ya no
hablan, o hablan bajito. El morocho alza la voz y dice No, no.
¿Por qué no?, quisiera preguntarle.
Dejo propina. Me siento en culpa porque ella trabaja y yo tomo
café en un bar. Si todos pensaran así. Cuando yo trabajo no me
dejan propinas. Me arrepiento: podría retirar las monedas. La
medialuna era rica, con personalidad de medialuna.
En la película hablan mucho por celular. Los coreanos mandan
mensajitos por celular. El morocho de mi mesa habla. No tiene,
no tienen, nada más entre las manos que sus gestos.
Su actitud pasó a ser relajada. Vuelve a llevar las manos sobre
la cabeza pero en una especie de bostezo. La mujer apoya su cara
entre las manos, escucha, y lanza una palabra cada tanto. Pero al
rato vuelven a discutir. La verdad, no sé. Para mí que hay cariño
(el amor es más fuerte), pero sin vuelta atrás. Espero que lo
resuelvan pronto, así puedo volver a mi rincón.
OÍDO AL PASAR
Darío Miranda
A lo mejor, la alegría sólo la viven los que son incapaces de definirla. Montserrat Roig
damiranda@hotmail.com
El 37 se sacudió y di la cabeza contra el vidrio de la ventanilla.
Había logrado dormir casi toda la hora y pico de viaje. Con los
ojos entrecerrados miré para afuera. La lluvia no había parado y
la humedad dentro del colectivo se hacía insoportable. Los problemas
de trabajo vagaban por mi cabeza, pero yo solo tenía el
objetivo de llegar a casa.
-Hoy la mata – escuché desde atrás.
Todavía estaba entre dormida, pero me llamó la atención la voz
de la chica. Tal vez ya había escuchado esa voz de fumadora en
otro viaje. Oía que seguían hablando en ese tono confidencial.
Pero yo no podía escuchar más que frases sueltas a causa de los
ruidos de la calle. Intenté girar la cabeza, pero un hombre de
abdomen prominente estaba parado a mi lado, tapándome la
visual. Entendí que las dos chicas venían en la misma posición
que el gordo y yo. Una sentada en el asiento individual, la otra
parada a su lado. Agudicé el oído para tratar de pescar algo.
-Los encontró en el dormitorio…cuernos con el amigo – le contaba
la de la voz rasposa.
-¿Pero no era trolo? - contestaba la que estaba de pie.
-Los encontró a los dos…violento…por el cogote.
Me interesó la situación. En un momento me agaché como
arreglándome la botamanga del pantalón e intenté mirar hacia
atrás. Pero el gordo a mi lado me lo impidió. Llegamos a una
esquina y el colectivo se detuvo en un semáforo. Ahora las
escuchaban mejor, aunque seguían en tono confidencial. La que
estaba de pie tenía una voz suave, casi como la de una nena.
-¿Y vos cómo sabés? – preguntaba a su amiga.
-Me contó mi hermana. Una noche lo agarró del cogote a
Andrés. Aparte tiene un revólver, ¿viste que tiene un revólver?
-¿Quién? ¿Juan Manuel? – preguntó por lo bajo la de voz aniñada.
-¿Y quién va a ser, boluda? – contestó el vozarrón.
El micro arrancó otra vez y tomó Avenida Espora. Comenzó con
su habitual recorrida de baches. Los barquinazos hacían que el
gordo se apoyara cada vez más. Tuve que pegarle con el hombro
porque se estaba pasando de vivo. En un momento recordé algo
de una novela de Agatha Christie. Saqué del porta cosméticos un
espejito e intenté mirar hacia atrás. Sin que fuera muy evidente
que estaba espiando, solo pude ver el pelo largo y enrulado de la
chica que iba sentada y tenía el vozarrón de fumadora.
-¡Pobre Isabel! – decía la de la voz aguda.
-Bueno pero quien la mandó a meterse con un tipo que estuvo
en cana- le contestó la del vozarrón.
Estuvieron unos minutos calladas. Después sentí movimientos
a mi espalda y el gordo que se tiraba en el asiento vacío. Las
escuché a las dos pidiendo permiso, mientras se perdían en el
mar de gente. El colectivo se detuvo y bajaron por la puerta
trasera. Pero la esquina estaba oscura y solo pude ver dos siluetas
perdiéndose en la noche. Me quedé pensando en la calle donde
bajaron. Era solo dos paradas antes de la mía. Yo conocía esa
calle, e intenté recordar a alguna Isabel. Tampoco ubicaba a un
Juan Manuel o un Andrés. Aunque podía ser gente nueva en el
barrio. Cuando llegué a mi esquina corrí como loca a mi casa.
Tenía la sensación que el peligro estaba ahí nomás, a una pocas
cuadras.
Cuando entré, mi mamá ya había puesto la mesa. Me senté y le
conté desesperada la conversación del colectivo. Asintió con la
cabeza mientras seguía con sus cosas. Encendió el televisor y se
sentó a comer conmigo. Sintonizó como siempre la novela de
las nueve. Para mi tranquilidad en una de las escenas centrales,
Juan Manuel asesinó a Isabel por serle infiel con su amigo
Andrés.