27.04.2013 Views

Numero 103 - Escuela de Psicología Social de Montevideo

Numero 103 - Escuela de Psicología Social de Montevideo

Numero 103 - Escuela de Psicología Social de Montevideo

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

El grupo como<br />

significante<br />

María <strong>de</strong> las Merce<strong>de</strong>s<br />

Guidobono<br />

Nosotros, como operadores en psicología<br />

social estamos acostumbrados a<br />

trabajar en grupo y con grupos. Este<br />

acostumbramiento pue<strong>de</strong> ser un obstáculo<br />

a la hora <strong>de</strong> evaluar las instancias<br />

<strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> lo grupal. Porque un grupo<br />

que tiene entidad como tal, está también<br />

compuesto por sujetos que en lo<br />

individual están atravesados en su discurso<br />

por lo social. A veces cometemos<br />

el error <strong>de</strong> no observar esto.<br />

El lenguaje es una estructura que nos<br />

preexiste, y a la vez que nos trascien<strong>de</strong>,<br />

lo que quiere <strong>de</strong>cir que cuando venimos<br />

a un grupo, en nuestra verticalidad<br />

traemos todo esto: como seres particulares<br />

hemos preexistido en el lenguaje<br />

antes <strong>de</strong> nacer, nuestros padres ya nos<br />

asignaron un lugar, nos dieron un nombre,<br />

y al morir trascen<strong>de</strong>mos porque se<br />

nos pue<strong>de</strong> traer al presente a través <strong>de</strong>l<br />

lenguaje., vamos a <strong>de</strong>splegar en el<br />

plano horizontal <strong>de</strong>l grupo todo esto<br />

que se juega <strong>de</strong> manera inconsciente<br />

en nuestra verticalidad: pues conocer la<br />

estructura <strong>de</strong>l lenguaje, dirá Lacán, nos<br />

sirve para compren<strong>de</strong>r la estructura <strong>de</strong>l<br />

inconsciente, ya que ambos tienen<br />

leyes semejantes.<br />

El grupo también tiene una instancia,<br />

como la letra (soporte material <strong>de</strong>l lenguaje)<br />

insiste, quiere salir a la luz,<br />

necesita satisfacerse en el <strong>de</strong>venir grupal,<br />

porque un grupo es el conjunto <strong>de</strong><br />

todas las mutuas representaciones<br />

internalizadas en cada miembro <strong>de</strong>l<br />

grupo <strong>de</strong>l otro, <strong>de</strong> ese otro que está en<br />

el grupo y con el cual entablo una relación<br />

simétrica, creyendo en principio<br />

que me relaciono con un integrante y<br />

dándome cuenta <strong>de</strong>spués que me relaciono<br />

con la representación que tengo<br />

<strong>de</strong> mi compañero, pero nunca con mi<br />

compañero. Por ese motivo se dará<br />

una especie <strong>de</strong> fantasmática grupal,<br />

que me hará tener diferentes representaciones<br />

<strong>de</strong> mis compañeros, son resonancias,<br />

ecos <strong>de</strong> otras representaciones<br />

semejantes que ya están mi: procesos<br />

transferenciales que se jugarán en<br />

todo momento, imágenes <strong>de</strong>sajustadas<br />

que, con el tiempo se <strong>de</strong>sajustarán y<br />

ajustarán más. Porque el grupo se <strong>de</strong>stroza<br />

y se une, todo es transitorio en<br />

un grupo.<br />

El grupo es como un significante: no<br />

significa nada, por lo tanto pue<strong>de</strong> significar<br />

cualquier cosa, lo que signifique<br />

se dará en el <strong>de</strong>venir grupal , cada<br />

cosas que suceda en un grupo será un<br />

significante que unido a otro irá <strong>de</strong>jando<br />

en suspenso su significación, sus<br />

puntos <strong>de</strong> capitón que, articulan y dan<br />

significaciones.<br />

El grupo dice y se dice: su discurso<br />

está penetrado por la trama social y<br />

está compuesto <strong>de</strong> muchas imagénes<br />

acústicas que no querrán <strong>de</strong>cir nada, y<br />

la vez querrán <strong>de</strong>cir mucho. Tarea <strong>de</strong>l<br />

operador psicosocial será <strong>de</strong>santrañar<br />

estas metonimias grupales, estos <strong>de</strong>splazamientos<br />

<strong>de</strong> significantes, esos<br />

estados temporarios <strong>de</strong> significación,<br />

sin querer darle un punto final, sin querer<br />

adjudicarle una significación acabada.<br />

Un grupo también se dice a través <strong>de</strong><br />

metáforas, <strong>de</strong> sustituciones <strong>de</strong> significantes,<br />

<strong>de</strong> muchas representaciones<br />

que se con<strong>de</strong>nsan en una sola representación,<br />

como en un sueño.<br />

Tarea <strong>de</strong>l operador será también estimular<br />

la creatividad <strong>de</strong>l grupo, eso es<br />

lo mágico <strong>de</strong> ser sujetos <strong>de</strong>l lenguaje:<br />

po<strong>de</strong>r crear en el plano simbólico aquello<br />

que no existe, ser libres y capaces<br />

<strong>de</strong> imaginar otras realida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l<br />

grupo.<br />

Es nuestra responsabilidad como profesionales<br />

<strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l campo <strong>de</strong> lo grupal,<br />

tener en cuenta todos estos procesos<br />

en que un grupo se verá inmerso,<br />

porque somos sujetos gracias al lenguaje,<br />

entonces toda estructura grupal<br />

tendrá anclaje en la estructura <strong>de</strong>l lenguaje.<br />

“Nunca matarse”<br />

El misterio <strong>de</strong> lo humano<br />

en el <strong>de</strong>sgarro social<br />

Ricardo Arias<br />

ricarias@fibertel.com.ar<br />

Nos empeñamos en dirigir sus vidas<br />

sin saber el oficio y sin vocación.<br />

Le vamos transmitiendo nuestras frustraciones...<br />

J.M.Serrat<br />

Un joven se suicida, un joven <strong>de</strong> la ciudad, un ciudadano adolescente.<br />

Me estremezco. Resonancias <strong>de</strong> otros suicidios, <strong>de</strong> otros<br />

interrogantes y misterios, me toman. Hay acontecimientos que<br />

se retuercen en preguntas. Se aparece un territorio <strong>de</strong> sujetos sujetados<br />

en el suicidio por una sustancia mortificada:¡un muchacho se arroja<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> la ambulancia que concurrió a su auxilio!<br />

Cuerpos sustanciales, esencialmente semejantes al mio. ¿Que experiencias<br />

hizo que se <strong>de</strong>sligara <strong>de</strong> sus compañeros? ¿De su familia? ¿De<br />

sus sustancias subjetivantes?<br />

¿Un cuerpo roto arrojado por fuera <strong>de</strong>l mundo <strong>de</strong> la conversación?<br />

Pue<strong>de</strong> ser: ya no esta para explicarse, justificarse. ¿Nos <strong>de</strong>jó esa tarea?<br />

Quizás. Aunque creo que nos quedamos sin que nos <strong>de</strong>jara nada. Solos,<br />

sin él y sin ninguna respuesta.<br />

Me llaman, por mi profesión, a concurrir a “contener” a los compañeros<br />

<strong>de</strong> división en el colegio don<strong>de</strong> concurría Claudio. A manera <strong>de</strong><br />

titular, las autorida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l colegio, me reciben con un angustioso “Se<br />

suicidio un alumno”.<br />

Empiezo con la tarea “ad-honorem” <strong>de</strong> ubicar el territorio <strong>de</strong> los cuerpos<br />

mortificados que <strong>de</strong>limita aproximadamente el sitio <strong>de</strong> la tragedia<br />

para los sobrevivientes. Se mueven en los pasillos, biblioteca, aulas,<br />

veredas.<br />

Espacios inciertos, pues la potencia <strong>de</strong> la huida extrema, exce<strong>de</strong> al<br />

saber yoico personal y cualquier territorio <strong>de</strong> saber profesional.<br />

Velocida<strong>de</strong>s, intensida<strong>de</strong>s, latitu<strong>de</strong>s, longitu<strong>de</strong>s, son arrasadas por el<br />

efecto <strong>de</strong> ese instante suicida. ¿Suicida? Ya esta: ahora es un relato<br />

anclado en la verosimilitud <strong>de</strong>l diagnostico <strong>de</strong>l diccionario y las estadísticas.<br />

Hubo testigos. Aparentemente los médicos <strong>de</strong> la ambulancia que lo<br />

habían tomado para trasladarlo dicen algo. La ambulancia, la camilla,<br />

el <strong>de</strong>stino hospitalario, la guardia psiquiátrica, es un conjunto <strong>de</strong> puro<br />

vació. Des<strong>de</strong> ahora es dolor y vanos intentos <strong>de</strong> construcción <strong>de</strong> abrazos<br />

<strong>de</strong>morados y besos prometiéndose curar las heridas. Y Claudio<br />

insistirá en no volver.<br />

Ya Claudio no tiene el potencial y la virtud transgresora, psicótica,<br />

linda (como generoso, loco, drogón, simpático, raro) <strong>de</strong> volver. Lo voy<br />

sabiendo en la escucha entre sitios. Él ahora no pue<strong>de</strong> hacer caminos<br />

sobre la mar… ¿pero nosotros si?<br />

Junto a los amigos y conocidos doy lugar en plano y pliegues a la<br />

consistencia <strong>de</strong> los dichos. Flexible, la circulación <strong>de</strong> la palabra surfea<br />

superficies heterogéneas. Sólo estos hechos <strong>de</strong> palabras y gestos dan<br />

efecto <strong>de</strong> fuga simbólica, <strong>de</strong> creatividad, que estremece la sustancia <strong>de</strong><br />

la <strong>de</strong>solación que es violentada en cada intento <strong>de</strong> <strong>de</strong>senclavar el relato<br />

<strong>de</strong> lo previsto, <strong>de</strong> “un alumno se suicidó”. Cada tanto el estado <strong>de</strong> sustancia<br />

se modifica: salta <strong>de</strong> baldosa, <strong>de</strong> terraza, <strong>de</strong> intensidad, <strong>de</strong> bor<strong>de</strong>.<br />

Hay llantos, tristezas y lagrimas jóvenes. Se <strong>de</strong>sterritorializa la certeza<br />

<strong>de</strong> que no hay imposibles. Hay otras distancias, nuevos afectos tristes.<br />

Efectivamente, Claudio no vuelve. Sólo se atisba en un horizonte que,<br />

aún, en algún lugar estará. ¡Y! ¡Podría ser! Quizás entre los cuerpos <strong>de</strong><br />

los amigos y amigas que en un <strong>de</strong>venir, obligatoriamente <strong>de</strong>seante y<br />

<strong>de</strong>sviado, se <strong>de</strong>spren<strong>de</strong>n <strong>de</strong> Claudio. Reencuentro intimo casi por última<br />

vez, en el mismo momento que intentan <strong>de</strong>cir amigo, vida, alegría,<br />

loco, sintiéndose un poco él. Re-corren con él: aulas, calles, música,<br />

medianeras, techos, estrellas, sótanos, códigos inconclusos.<br />

Toman y dan la palabra atravesada por el dolor <strong>de</strong>l misterio y la bronca<br />

<strong>de</strong>: ¿Dón<strong>de</strong> están los adultos? Esos adultos preocupados por su <strong>de</strong>berser<br />

y <strong>de</strong>ber-comprar que se ausentan <strong>de</strong>l lazo social intimo. Adultos que<br />

están angustiados en sus cuerpos duros, doloridos <strong>de</strong> miedo entre las ficciones<br />

<strong>de</strong> los medios <strong>de</strong> comunicación que anuncian nada, sólo nada <strong>de</strong><br />

porvenir burocrático y ocio postergado.<br />

Padres y madres seducidos por la maquina infernal <strong>de</strong> los medios que,<br />

a fuerza <strong>de</strong> repetición <strong>de</strong> lo mismo construyen una realidad y una sensación<br />

como para dar verosimilitud a sus ficciones autistas y crueles. Y<br />

mientras, se van convirtiendo en el espejo especular - punta a punto <strong>de</strong>l<br />

mensaje- en mo<strong>de</strong>los <strong>de</strong> fetiche, <strong>de</strong> mercancías <strong>de</strong> ocultamiento <strong>de</strong> la<br />

vida y <strong>de</strong> la muerte. Y aquellos seguros <strong>de</strong> si mismos son perforados<br />

por la misma mismidad con la radical ausencia <strong>de</strong> Claudio y sus escenarios.<br />

Ahora están tentados a Objetar, en si mismos, don<strong>de</strong> no hay sustancia,<br />

ni sujeto ni subjetividad el interrogante: ¿cómo pasó? Es posible<br />

que recurran, otra vez, al guión chato <strong>de</strong> la repetición policíacamedica<br />

masificadora <strong>de</strong> la vida. Efectivamente, Claudio corría entre esas<br />

mallas. ¿Huía?<br />

Claudio logra en las palabras un <strong>de</strong>venir político, circunscrito y discreto,<br />

acor<strong>de</strong> a la i<strong>de</strong>ología <strong>de</strong> la clase media instruida a la que pertenecen<br />

sus padres, maestros, médicos, sacerdotes, pastores. ¿Es sólo alum-<br />

Campo Grupal / 4 Todas nuestras opiniones son <strong>de</strong> otros. Fernando Pessoa<br />

no <strong>de</strong> escuela? O es ese adolescente que salta por las cornisas <strong>de</strong> los<br />

edificios urbanos entre azoteas llenas <strong>de</strong> apariciones, máscaras y fantasmas.<br />

Claudio, ¿Quiso salir <strong>de</strong> una cronología banal? ¿Lanzarse en el riesgo<br />

subjetivante <strong>de</strong> ser tomado por el Otro? No lo se. Pero estamos<br />

puestos a conversar. De esto se trata lo nuestro “profesional” en el<br />

marco <strong>de</strong> la conmoción que tienta a enmu<strong>de</strong>cernos.<br />

Puesto a caminar entre – que otra cosa podría yo- los alumnos, ellos,<br />

se fueron relatando los datos con que se contaba acerca <strong>de</strong> la situación<br />

<strong>de</strong> Claudio, <strong>de</strong> lo que provocó o no el hecho <strong>de</strong> este suicidio entre sus<br />

compañeros <strong>de</strong> curso y en la escuela en general.<br />

No quieren que sea un hecho policial ni <strong>de</strong>l or<strong>de</strong>n médico. Es un<br />

hecho jurídico, la ley <strong>de</strong> la palabra esta tocada. La legalidad <strong>de</strong> los vínculos,<br />

la confianza, la libertad, la solidaridad subjetivante. Lo humano<br />

radical esta <strong>de</strong>stratado. Entre ellos es una oportunidad para gritar: ¡Aun<br />

tengo la vida!, como Claudio.<br />

No todo pasa…en el aula<br />

Aproximadamente 25 alumnos <strong>de</strong> la división <strong>de</strong> Claudio más otros 7<br />

amigos <strong>de</strong> otros cursos, que ellos invitaron, están en el aula. Se van<br />

poniendo en ronda. Luego <strong>de</strong> un rato, sigo caminando en circulo como<br />

buscando un gesto ausente en la sala, tratando <strong>de</strong> encontrar un <strong>de</strong>talle,<br />

un punto <strong>de</strong> apoyo para navegar un mar <strong>de</strong> <strong>de</strong>sconfianza que me permita<br />

la palabra y la escucha entre la expresión <strong>de</strong> todos. Me doy cuenta<br />

que “presentarme” es <strong>de</strong>jarme atravesar por la ausencia <strong>de</strong> Claudio.<br />

¿Claudio ya no está más?, digo, afirmo. Me presento y se lanza una<br />

presentación <strong>de</strong> cada cual con lo puesto. La hacen en ronda, tocándose<br />

con la mano para darse la palabra. En la trama, con huellas que preexistían<br />

a mi llegada, empiezan a relatar entre varios como sucedió lo <strong>de</strong><br />

Claudio. No hay coinci<strong>de</strong>ncia, no importa. Igual se hace camino, todos<br />

tienen interés por lo dicho, sorpresa por la intensidad que hace superficie<br />

en cada uno, por la necesidad <strong>de</strong> participar, por mirarse <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la simpatía<br />

<strong>de</strong>l compañero por el dolor propio. Antes, me habían anticipado,<br />

“es un grupo fragmentado”. Des<strong>de</strong> este “diagnóstico”, por lo menos<br />

apresurado <strong>de</strong> algún adulto, ellos van dando distintas perspectivas para<br />

ceñir lo imposible: la ausencia trágica <strong>de</strong> uno más. De este Claudio que<br />

ya no está. Y ellos siguen con-versando con pesar <strong>de</strong> la muerte. No es<br />

la primera vez. Muchos dicen que la muerte ya es parte <strong>de</strong> su experiencia.<br />

Me <strong>de</strong>jo llevar sin certeza a dar pie a la producción <strong>de</strong> algunas escenas<br />

y situaciones don<strong>de</strong> Claudio esta presente y se habilitan a representarlo,<br />

a <strong>de</strong>cir lo no dicho aún, y con dulzura y cuidado <strong>de</strong>cir lo “difícil”<br />

<strong>de</strong>l amigo y compañero. Eso que ellos, y solos, y cada cual, sabe<br />

que quizás él mismo o el otro, dicen en su <strong>de</strong>cir. La palabra circula creando<br />

luces y nuevas sombras.<br />

-¿Que le contamos a Claudio que ya no está?<br />

Se escucha reiteradamente la palabra “especial”, era un ser especial,<br />

Claudio es especial. Un tipo divertido, es un tipo que se interesaba por<br />

los <strong>de</strong>más pero no podía comunicar lo que le pasaba a él. Medio pesado.<br />

Se traía sus sopitas Light. Lo voy a extrañar. Era muy loco. Quizá<br />

no encontró la ayuda que necesitaba. Lo voy a extrañar. Lo quería<br />

mucho. Nunca contaba cosas <strong>de</strong> él, pero siempre estaba para ayudar a<br />

otros.<br />

Se escucha algo así como Claudio no, no entro en… eso, en algo,<br />

en… y no pudo salir.<br />

Era divertido. Nos hacia reír.<br />

¿Siempre hay algo que no encontramos como <strong>de</strong>cir?<br />

Hay palabras que son difíciles…<br />

Ella dice que se siente culpable, responsable -aclara- porque quizá<br />

podría haber hecho algo más. Hay lugar, no mucho, a conversar <strong>de</strong> eso<br />

<strong>de</strong> “sentirse con culpa” por lo que sucedió.<br />

Ge<strong>de</strong>la<br />

-Que le dicen a Claudio: “Que se quiera más a él mismo” “ Permitite<br />

hacer lo que quieras” “Gracias por hacernos reír” “Que estés tranquilo”<br />

“Que encuentre lo que no encontró acá” “Ge<strong>de</strong>la en el cielo” “Que<br />

encuentre la paz” “Te voy a extrañar”.<br />

Nos movemos y la escena se centraliza sobre el lateral obsceno: se<br />

ubica a la escuela, a mí, a los adultos, a las autorida<strong>de</strong>s. ¿Que me dicen?<br />

“Que te preocupes más” “Que cui<strong>de</strong>s más, que contengan más” “ Que<br />

se <strong>de</strong>jen <strong>de</strong> jo<strong>de</strong>r, sabían, que no se hagan los pelotudos” “ Que se fijen<br />

más en la persona” “ que se ocupen más <strong>de</strong> la gente” “Que alguien se<br />

haga cargo <strong>de</strong> lo que pasa”.<br />

“Que se tomen cinco minutos para ver lo que pasa”. “En este caso<br />

no hay nada que <strong>de</strong>cirle” “Los gran<strong>de</strong>s son los que primero tenían que<br />

hacer algo”.<br />

“Que no cierren puertas” “Que aprendan. Que hagan algo”<br />

“Que se haga cargo cuando un alumno necesita ayuda” “Que no hizo<br />

lo suficiente”.<br />

“Nosotras, hace un tiempo, le dijimos a el psicólogo que Claudio no<br />

estaba bien”.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!