30.04.2013 Views

para leer durante el finde 24 noviembre

para leer durante el finde 24 noviembre

para leer durante el finde 24 noviembre

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Kilian es humano, pero más (II)<br />

by PAU FARRAS<br />

No es solo que gane todo lo que corre. No es solo que haya trascendido la competición<br />

<strong>para</strong> plantearse sus propios retos. También está su cuerpo. Kilian Jornet fascina por sus<br />

resultados, pero también por la trastienda que se oculta tras <strong>el</strong>los.<br />

Sus 34 pulsaciones por minuto (ppm) en reposo son propias de un atleta de fondo de<br />

élite, pero quedan por debajo de las legendarias 28 de Migu<strong>el</strong> Indurain. Sea como sea,<br />

no es esa la clave de su éxito, sino la capacidad que tiene <strong>para</strong> mantenerse <strong>durante</strong><br />

mucho tiempo cerca de su máximo. Se le han medido promedios de entre 180 y 190<br />

ppm <strong>durante</strong> una maratón alpina. Eso significa que su corazón aguanta <strong>durante</strong> cuatro<br />

o cinco horas <strong>el</strong> ritmo al que un corredor popular de 25 o 30 años soporta unos cuatro<br />

o cinco minutos. Su máximo, por cierto, es de 204.<br />

En otra variable que su<strong>el</strong>e medirse en los fondistas, <strong>el</strong> consumo máximo de oxígeno,<br />

registra 85 ml/kg/minuto, cifra superior a la de David Meca, que ya de por sí era un<br />

privilegiado (80). Hay quien explica esta variable apuntando la altitud en la que ha<br />

vivido toda su vida, factor que comparte con los indios tarahumaras de México,<br />

capaces de correr cientos de kilómetros a la semana, o los fondistas d<strong>el</strong> valle d<strong>el</strong> Rift,<br />

en África, dominadores d<strong>el</strong> fondo en atletismo. Debe añadírs<strong>el</strong>e que, como sucede con<br />

estos exóticos ejemplos, Kilian corre mucho y muy a menudo. En concreto, de cinco a<br />

siete horas diarias, siempre en <strong>el</strong> monte, lo que implica que a veces debe trepar, otras<br />

veces corre por encima de un glaciar y en otras ocasiones le toca ir esquivando rocas y<br />

árboles mientras desciende cuestas salvajes.<br />

Cuando se le pregunta si no le tienta <strong>el</strong> asfalto, r<strong>el</strong>ata que apenas ha corrido sobre él y<br />

que desde luego nunca ha participado en una carrera urbana. Por <strong>el</strong>lo, cuesta medirle<br />

en parámetros olímpicos, pero en alguna concentración con otros atletas ha registrado<br />

tiempos de 2 minutos 40 segundos en un kilómetro llano. La proyección de ese ritmo a<br />

unos hipotéticos 5.000 metros lisos sería de 13min 40s, un minuto más que <strong>el</strong> récord<br />

de Kenenisa Bek<strong>el</strong>e. Por supuesto, hay más de ficción que de realidad en la proyección,<br />

porque Kilian jamás entrenará con esos objetivos, pero sirve <strong>para</strong> hacernos una idea de<br />

su niv<strong>el</strong>.<br />

En su libro “Correr o morir” no se explaya mucho en sus números biológicos, pero<br />

cuenta experiencias que definen muy bien su carácter y su asombrosa capacidad de<br />

sufrimiento. En su r<strong>el</strong>ato de una carrera de ultradistancia cuenta como, tras sufrir una<br />

rampa en <strong>el</strong> gem<strong>el</strong>o, en lugar de <strong>para</strong>r a estirar, decidió ocultarle esa debilidad a su<br />

rival. Quien haya sufrido un calambre muscular sabrá lo que eso significa: lo habitual, si<br />

un corredor sigue trotando sin estirar, es que a las tres zancadas se le suba <strong>el</strong> gem<strong>el</strong>o<br />

de la otra pierna. A Kilian no. Tiene rampas, como todos, pero él sigue.<br />

* Pau Farrás es periodista.<br />

20

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!