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RESTITUTO DÍEZ LIÉBANA
Lo que David da, la vid_da….
Lo que David da, la vid_da…. Uvas de la inteligencia que, según su madurez,
varían su dulzura…, tiempo al sol, al trato con el dios y con los dioses
oportunos, sol al tiempo..., juego difuso entre el cielo y la tierra que supera lo
dual.
Entre lo luminoso y lo oscuro, camino seguro en el filo incierto de la navaja, la
línea del suelo: a un lado la locura, al otro la vanidad; todo para hacerlo todo,
para descubrirlo de la nada.
Mantener el equilibrio como el héroe, sin alejarse de la tierra que le sustenta,
para no perder la fuerza, ni acercarse en exceso al sol que derrita la cera que
une sus plumas.
La uvas de su inteligencia machacadas por su inquietud, por su curiosidad y
divertimento, desmenuzan y combinan los elementos, fermentan los prejuicios
y los supuestos y ofrecen un vino joven y alegre que quita la sed e ilumina el
paladar y que el tiempo mejora.
Al fuego de la pasión, del amor por los otros, lo que se deshecha, se aprovecha
y se eleva en los sublimes alcoholes, perfumes del pensamiento.
David, el amor obliga al amor…y con afecto, por fin escribo mis ocurrencias
para que la tinta las fije en el tiempo y parezcan pensamientos.
David, todo mi cariño, mi aprecio, mi agradecimiento y mi respeto.
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