08.05.2013 Views

3)) 50 Sombras liberadas

3)) 50 Sombras liberadas

3)) 50 Sombras liberadas

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

de arriba del biquini —dice en voz baja e irascible.<br />

¿Y eso justifica lo que me ha hecho? Le miro fijamente.<br />

—No me gusta que me dejes marcas. No tantas, por lo<br />

menos. ¡Eso es un límite infranqueable! —le digo con furia.<br />

—Y a mí no me gusta que te quites la ropa en público.<br />

Eso es un límite infranqueable para mí —gruñe.<br />

—Creo que eso ya había quedado claro —respondo<br />

con los dientes apretados—. ¡Mírame! —Me bajo el cuello<br />

de la camisola para que me vea la parte superior de los<br />

pechos.<br />

Los ojos de Christian no abandonan mi cara y su<br />

expresión es cautelosa y vacilante. No está acostumbrado a<br />

verme así de enfadada. ¿Es que no ve lo que ha hecho?<br />

¿No ve lo ridículo que está siendo? Quiero gritarle, pero me<br />

contengo. Es mejor no presionarle demasiado, porque Dios<br />

sabe lo que haría. Al fin suspira y me tiende las manos con<br />

las palmas hacia arriba en un gesto resignado y conciliador.<br />

—Vale —dice en un tono apaciguador—. Lo entiendo.<br />

¡Aleluya!<br />

—¡Bien!<br />

Se pasa una mano por el pelo.<br />

—Lo siento. Por favor, no te enfades conmigo. —

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!