Desarrollar el sentido del humor, una misión imposible »Laura ...

leer y leer
34
todos soMos lEctorEs
podamos ir comentando lo que se va encontrando
durante nuestra exploración
de ese nuevo universo de sentido. Por
eso a veces es bueno leer algo con otros,
tener compañeros de aventuras lectoras.
o saber escuchar con atención lo
que otro lee.
se nos olvida también que cada texto
exige un cierto tipo de lectura o de
acercamiento. Que no hay recetas. Y
que los textos literarios no se leen
igual que los de divulgación científica
o los instructivos, o los de historia...
Que los libros, además, ofrecen versiones
diferentes cada vez que los
leemos según los propósitos que se
tengan, según las experiencias
previas, nuestra historia, lo
que somos; todo esto marca
lo que entendemos, lo
que nos gusta o disgusta,
con lo que estamos de
acuerdo o no. Por eso ante
cada lector el texto es el mismo y a la vez
es otro, porque cada lector entiende y ve
lo que su historia previa le permite.
estos olvidos hacen que frecuentemente
la lectura en la escuela se viva
como un proceso monótono pues no se
explotan las ricas y diversas modalidades
de lectura.
2 Lo que se puede hacer desde la
escuela
en la escuela el maestro desempeña un
importante papel como mediador en el
desarrollo de habilidades de lectura de
los alumnos. si el docente no tiene los
olvidos antes señalados, seguramente
se preocupará por familiarizar a sus
alumnos con diversas modalidades de
lectura, por realizar los procesos más
adecuados para acercarse al pensamiento
de los autores según el tipo de
textos que se lean. es bueno, en este
sentido, reconocer las diferentes funciones
de los diversos textos y pensar en
estrategias de trabajo que tiendan a
apoyar, en los lectores, buenas construcciones
acerca de los contenidos que
se comunican en los textos, de sus propósitos,
de su estructura.
el tiempo destinado a la lectura es importante.
romper con el prejuicio de que
“leer es perder el tiempo” es imperativo.
los momentos y los lugares para realizar
las actividades de lectura dependen
de los lectores: maestros y niños. otro
aspecto importante es el poner a disposición
de los lectores textos diversos y
suficientes.
Y algo más, es muy importante compartir
con otros docentes las experiencias
o ideas que se van teniendo. Y eso
es lo que nos interesa hacer en el apartado
que sigue.
3 Un ejemplo, la lectura de un
texto narrativo literario
si el docente, por ejemplo, sabe que
cuando leemos un texto narrativo literario,
las metas de lectura más importan