Padre Melvin Doucette – Mensajes 2012 - Apariciones de Jesús y ...

Después de esto bajó Jesús a Cafarnaúm, con su madre y sus hermanos y sus discípulos, y no
se detuvieron allí sino pocos días.”
Queridos amigos,
Hoy es el primer sábado de agosto, dedicado especialmente a Nuestra Madre Santísima. Nos ha
pedido que vayamos a la Santa Misa el primer sábado de cada mes y que recibamos la Sagrada
Comunión: seremos bendecidos.
(A continuación encontraréis el Mensaje de Nuestra Madre Santísima entregado al padre
Melvin. Nuestra amada Madre María le habló con estas palabras:)
“Te bendigo, Mi hijo Melvin, y bendigo a todos Mis hijos dispersos por todos los países del
mundo. Estoy rezando por todos vosotros para que podáis tener las Gracias para
seguir a Mi Hijo Jesús cada día. Está siempre esperando que vayáis a Él para manifestarle
vuestro amor y para comprometeros con Él cada día. Ofreceos completamente a Él para que
tenga la libertad de hacer con vosotros lo que juzgue mejor. Deberíais ser como barro en las
manos del alfarero. El alfarero puede hacer lo que quiere con el barro, que no se
resistirá. Vosotros tampoco debéis resistiros a Jesús y a lo que desea hacer con
vosotros. Lo que hace es sólo para vuestro beneficio porque sabe lo que necesitáis.
El primer Milagro de Jesús, como sabéis, fue en las Bodas de Caná. Yo también estaba allí.
Cuando le dije que no tenían vino, produjo Su primer Milagro cambiando el agua en vino. Lo
hizo a pedido Mío. Siempre está dispuesto a escuchar lo que Le pida. Por lo tanto, venid a Mí,
hijos Míos, y pedidme lo que deseáis: iré a Mi Hijo Jesús con vuestro pedido. Nunca
rechazará un pedido Mío. Estoy trabajando por vosotros todos los días pero debéis tener
mucha fe en Él y hacer lo que os ha pedido. Os amo a todos.”
Padre Melvin
Domingo, 5 de agosto de 2012
“Progreso del Evangelio."
Lectura de la Epístola de San Pablo a los Filipenses 1, 12-26:
“Mas quiero que sepáis, hermanos, que las cosas que me han sobrevenido han sido favorables
al progreso del Evangelio, de suerte que mis prisiones, soportadas por Cristo, se han hecho
notorias en todo el pretorio y a todos los demás, y la mayor parte de los hermanos, alentados
en el Señor por mis prisiones, sienten más ánimos para anunciar intrépidamente la palabra del
Señor.
Algunos, ciertamente, por espíritu de envidia y rivalidad, mas otros también con buenas
intenciones predican a Cristo; los unos por amor, sabiendo que estoy puesto para la defensa
del Evangelio, mas los otros por emulación anuncian a Cristo, no limpiamente, imaginando
añadir aflicción a mis prisiones. Pues ¿qué? Mientras en todo caso, ya por segundas
intenciones, ya con lealtad, sea Cristo anunciado, yo de ello me gozo; más aún, me gozaré
siempre; porque sé que esto resultará en beneficio de mi salud, gracias a vuestras oraciones y
por la suministración del Espíritu de Jesucristo, según mi expectación y esperanza de que en
nada quedaré confundido, sino que, con toda seguridad, ahora, lo mismo que siempre, será
Cristo glorificado en mi cuerpo, ya por vida, ya por muerte. Pues para mí el vivir es Cristo, y el
morir, ganancia.
Por otro lado, si vivir en carne mortal es para mí rendir fruto de apostolado; no sé qué haya de
escoger. Me siento apretado por ambos lados: deseo ser desatado del cuerpo y estar con Cristo
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