HISTORIA DE CHUQUISACA 36 - Archivo y Biblioteca Nacionales ...

HISTORIA DE CHUQUISACA
de la entrada, que fué en este motin? Morales respondió, que era
verdad que avia sido Pedro Gonzales de los principales, y que la
noche vispera de sant Miguel, avia sido de parecer que se pusiesse
fuego al galpón de su estancia: y que dixessen que era muerto. Más
que ciertamente no sabía del. Dixole Carvajal. Señor Morales, pues
no me dezis del, yo os prometo que aveys de morir y que no
resuciteys agora, porque le harán cuartos, y ninguno llevaran al
agua. Lo qual fué luego executado, y lo mismo en Espinosa. De ay a
poco traxeron presos a Castillo, vezino de la villa de Plata, y otros
cinco o seys, y luego assí mismo los mandó ahorcar y hazer quartos.
Y aviendo hecho justicia de diez y seys personas, perdonó a Julian
de Humaran, y a Llantadilla y otros algunos. Y por muchos ruegos
que intervinieron, e importunación de Camorano clérigo, perdonó
también a Pedro Gonzales de Prado. Después desto, Francisco de
Carvajal tratava mejor a su gente, y dava algunas pagas y socorros
para vestirse, y otras necesidades: y a los de la entrada procuró
echarlos de sí, y embiólo de tres en tres, y de quatro en quatro, al
Cuzco y a Arequipa, y a Guamanga: pareciendole que assí convenía,
para seguro de su persona, y por otros motivos que para ello tuvo.»
En seguida Carvajal envió por delante los tesoros a Lima
1.400,000 $ y marchó él, dejando a Alonso de Mendoza de autoridad.
Habiendo llegado a América el primer Virrey Blasco Núñez Vela
en 10 de enero de 1544, fué preso por los oidores y batido por
Gonzalo Pizarro, en Añaquito a 2 leguas de Quito el 18 de enero de
1546, de dicha batalla murió el Virrey y 70 hombres, habiendo sido
victimados más de 60, 20 de los muertos eran de Pizarro. Carvajal se
hallaba entretanto, pacificando los Charcas y llenándose de oprobio
con sus crímenes y de riquezas con su avaricia en La Plata. El 13 de
agosto de este mismo año, el licenciado Gasca llega a Panamá.
Mientras marchaba Carvajal a Lima a donde llegó con 150 lanzas
y 300 hombres, Gonzalo Pizarro estaba en disposición de darle la
muerte, porque al fin las crueldades y robos de aquél, llenaron la
medida de la tolerancia. El licenciado Cepeda que era el Teniente
General de Pizarro, contribuyó para despertar esta odiosidad, pues,
quería ser único en el ánimo de Pizarro, mas, la circunstancia de que
se aproximaba el día de la batalla con el Virrey, que recibió seis
navíos, gente, armas y caballos, de don Antonio de Mendoza virrey
de Nueva España, así como de Nicaragua y Guatemala, lo obligaban
a ser deferente con él.
Pizarro que con más de 900 hombres de tropa se preparaba para
la lucha, habiendo pagado a sus capitanes las sumas de 20, 30, 40 y
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