Untitled - citaREA

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ó se desmejoran antes, debiendo ser desechados y
repuestos: algunos cambian de color, y suelen llamarse
claveles vueltos. Las buenas variedades de
claveles se multiplican por medio de esquejes y
acodos: prenden mejor los esquejes desgajados, y
sin embargo suelen corlarse para no perjudicar á
la planta madre; es el acodo con talón, indicado
en su lugar, el empleado para multiplicar los claveles,
y entre los prácticos se denomina espolón la
parte que se mantiene unida á la planta madre,
mientras que se llama lengüeta la parle libre ó
levantada por efecto del corte, la cual debe quedar
abierta y separada del espolón al enterrar el acodo.
También se acodan los claveles al aire en algunos
casos, usando embudillos á propósito, y tomando
las precauciones que exige la naturaleza de estas
plantas. Finalmente, los claveles pueden cultivarse
en el suelo, así como en macetas ó tiestos, que se
hacen de tamaño proporcionado, y se califican de
claveleros por esta razón; conviene envarillar los
claveles tan pronto como sus vastagos se hayan
alargado lo bastante para necesitar apoyo; el destallar,
es otra operación que tiene por objeto lograr
buenos claveles, suprimiendo los vastagos endebles
y laterales, dejando ¡os centrales y en cada
uno el botón terminal con exclusión de los demás
que se espinzan con la uña; es preciso también
ayudar la flor, impidiendo que revienten los cálices
de las clavelinas y serrólas por diferentes medios,
que se reducen á sujetar los cálices, y á rasgarlos
por igual para separar los dientes hasla