14.05.2013 Views

¿Quieres descargar el primer capítulo de esta novela?

¿Quieres descargar el primer capítulo de esta novela?

¿Quieres descargar el primer capítulo de esta novela?

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

nes una apariencia tan radiante, ¿sabes?... Da igual, ya contrataré<br />

a alguien...<br />

—¿Contratar a alguien? No harás semejante cosa. Una gala<br />

organizada por mercenarios —pronunció la palabra con antipatía—<br />

no pue<strong>de</strong> resultar más que vulgar. Ya intentaré, no sé<br />

cómo, encontrar fuerzas para organizar algo... y para buscarte<br />

una muchacha a<strong>de</strong>cuada... Pero te lo advierto, Nash, con tan<br />

poca ant<strong>el</strong>ación y al principio <strong>de</strong> la temporada, cuando todas<br />

las invitaciones están ya repartidas, la fi <strong>esta</strong> será <strong>de</strong> lo más <strong>de</strong>slucida.<br />

—Lo sé. Y lo lamento —Nash no tenía la menor duda <strong>de</strong> que<br />

<strong>el</strong> baile sería espléndido; su voz tomó un aire <strong>de</strong>spreocupado—.<br />

¿Puedo convencerte para que le envíes una invitación a la tía d<strong>el</strong><br />

zar <strong>de</strong> Rusia, la gran duquesa Anna Petrovna Romanova?<br />

A lady Gosforth se le cayeron los impertinentes.<br />

—¿La tía d<strong>el</strong> zar <strong>de</strong> Rusia?<br />

—Llegará a Londres pocos días antes d<strong>el</strong> baile. No conoce a<br />

nadie allí y ha solicitado mi ayuda. No le importará que se trate<br />

<strong>de</strong> algo reducido.<br />

La gran duquesa era tan sociable como su tía y adoraba las<br />

fi <strong>esta</strong>s a lo gran<strong>de</strong>.<br />

—¿Una gran duquesa? —con los ojos cent<strong>el</strong>leantes <strong>de</strong> ambición,<br />

tía Mau<strong>de</strong> se puso <strong>de</strong>recha y consiguió dar un cansado suspiro—.<br />

Hay que ver cómo me haces <strong>de</strong>slomarme, muchacho.<br />

—Lo sé.<br />

Nash adoptó una expresión arrepentida. Con una gran duquesa<br />

rusa <strong>el</strong> baile sería <strong>el</strong> acontecimiento <strong>de</strong> la temporada, y su<br />

tía lo sabía.<br />

Nash Renfrew había solicitado permiso para regresar a Inglaterra<br />

por dos motivos: tomar posesión <strong>de</strong> una herencia y buscar<br />

esposa. Sabiendo lo difícil que la anciana gran duquesa podía<br />

ser, <strong>el</strong> embajador le había concedido <strong>el</strong> permiso a condición <strong>de</strong><br />

que Nash estuviera pendiente <strong>de</strong> <strong>el</strong>la en Londres.<br />

Él, le dijo <strong>el</strong> embajador, sabía cómo manejar a las damas ancianas<br />

<strong>de</strong> trato autoritario y difícil. Nash lo informó <strong>de</strong> que era<br />

consecuencia <strong>de</strong> haberse pasado toda la vida manejando a tías y<br />

tías abu<strong>el</strong>as excéntricas y autoritarias. Una <strong>de</strong> las cuales, por cier-<br />

12

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!