88 - Revista Personae

-Por supuesto, I am hungry, my dear Rupert, ya tengo hambre. Y
para reforzar lo antes dicho voy probar unas flores de calabaza rellenas de queso y
CUITLACHOCHE hábilmente capeadas.
Un verdadera pieza de artesanía, no sólo por la presentación, sino también por
la deliciosa mezcla de sabores… Tante me permitió probar una florecita de su
plato. Yo preferí unas tostadas de jaiba, que tuve que escoger entre otras de camarón
o de atún. Excelentes.
Pero también ofrecen unos pulpos a la gallega, o un turnedó de atún, o unos
mejillones de cultivo al vino blanco. Y lo que parece ser una novedad, el salmón en
mole, que estaban saboreando nuestros vecinos de mesa. Apetitoso a simple vista.
Pero para quien prefiera las carnes rojas, el filete chemita, ya podemos decir
que internacionalizado, o un suculento Rib Eye pueden ser otra opción.
Tante prefirió las pastas y, entre el fideo seco en chipotle y los tallarines
acompañados de pollo o de salmón, encontró los negros con tinta de camarón. Éstos
no me permitió probarlos, pero hasta el aroma es toda una invitación a devorarlos.
Justo es mencionar que antes de entregarnos a la buena comida brindamos con unos
martinis, los clásicos, pues Wilhelmina así los prefiere, ya que la carta ofrece
un gran surtido y variedad de estos cocteles.
Otro detalle interesante es que se puede pedir un buen vino por copeo, oferta
que ojalá siga prosperando en todos los restaurantes, pues es excesivo cuando comen
dos personas el consumir toda una botella.
Dato curioso: pese a que el lugar
estaba lleno, nunca necesitamos desgañitarnos
para conversar. Indicativo de
que la clientela ha ido a buenos colegios
y no requiere de gritos ni carcajadas
para mostrar su presencia y regocijo.
Música de fondo no hay y si la hay, es
discreta, como deber ser.
- ¿Te has dado cuenta, Rupert, a
propósito de música de fondo, de la
cretinez de quienes la manejan en televisión?
Esos ruidos, que llaman efectos
especiales o música de fondo, no son
más que apoyos para los malos actores.
Te recomiendo una telenovela, con
excelentes interpretaciones, actores de
primera: Montecristo. Pero ¿sabes
cuál es el defecto, y grave? Los ruidos
que contaminan el buen trabajo de los
actores. Deberían expulsar, después
de fusilarlo, al sonidista o musicólogo
o lo que sea ese subdesarrollado que
debe ser sordo y alérgico a la buena
comunicación. Te recomiendo la telenovela,
¡mein Gott! ¡qué actores y
qué actuaciones!
- Tante, nunca te había visto
entusiasmada por una telenovela.
Siempre dijiste que eran churros
para amas de casa ociosas.
- Así es. Pero he cambiado de
opinión gracias Montecristo... pero no me discutas y ordéname un helado de
turrón que es algo que no debes perderte. Ordena dos, otro para ti, para que no andes
hurgando en mi plato.
Y, por supuesto, tomé helado de turrón y… no me arrepentí.
Fue una comida muy agradable. No sólo por los platillos magistralmente preparados,
sino también por el ambiente, la cálida decoración en la que destaca la madera
y una bien repleta cava alegrada con banderitas de varios países.
Buen servicio, atento, sin apresuramientos ni obsesivas presencias y… además,
con la variada plática de meine liebe Tante Wilhelmina, con sus cápsulas
culturales sobre el náhuatl y ¡oh, sorpresa! la televisión. No dejen de visitar el
Litoral, un lugar de primera en la gastronómica zona de la Condesa. Tante
también se lo recomienda. Hasta la próxima
Restaurante Litoral
Tamaulipas 55, Esquina con Montes de Oca
Colonia Condesa
Teléfonos: 52-86-20-15 y 52-86-20-25
P E R S O N A E • 2