88 - Revista Personae

Francois Beyrou
Toda la estrategia del presidente de la UDF se basa en una apuesta: los franceses rechazan la
bipolarización del debate político alrededor de la UMP y del PS. El problema es que Nicolás
Sarkozy y Sègoléne Royal trascienden ya, cada uno a su manera, el enfrentamiento entre
derecha e izquierda.
El ni pauvre ni riche (ni pobre ni rico) utilizado por Bayrou ya no es suficiente para
distinguirlo de los dos favoritos de la competencia presidencial. Para imponerse como el tercer
hombre, trata de presentar el voto centrista como la única alternativa republicana, al voto
radical de la extrema izquierda o de la extrema derecha, pero este posicionamiento le coloca aún
más lejos, atrás, de Jean-Marie Le Pen en las encuestas. El candidato de la UDF espera que
la omnipresencia de la pareja Sarko-Ségo en los medios de comunicación, que él denuncia,
provoque una reacción a su favor entre los electores.
Marie-George Buffet
La candidata comunista se ha impuesto contra la voluntad de una parte de los colectivos antiliberales.
Por tanto, debe convencer que puede reunificar, más allá de la familia comunista. Una
apuesta muy lejos de haberse ganado, sobre todo, porque el altermundialista José Bové, de
nueva cuenta se declaró disponible para una candidatura unitaria en su lugar.
Arlette Laguiller
La portavoz de Lucha Obrera –que obtuvo el 5.7% de los votos en la primera vuelta en 2002-,
deberá compartir los votos de la extrema izquierda con Olivier Besancenot, como en 2002,
pero en condiciones en que, sin duda, se han vuelto más difíciles por la atracción despertada por
Sègoléne Royal. Subsiste la incógnita.
Dominique Voynet
La pregunta en este caso es si la candidata de los Verdes, de 47 años de edad, podrá imponerse, pese al fenómeno del animador
de televisión Nicolás Hulot, de 51 años de edad. Las encuestas le auguran entre el 8 y el 10%. ¿Qué ganarían los Verdes
con uno u otro?
Philippe de Villiers
Al dirigirse a la derecha patriótica del gobierno, el candidato del Movimiento por Francia, se esfuerza en
endurecer su discurso con el propósito de captar una parte del electorado de Jean-Marie Le Pen. Sus intenciones de voto
van del 2 al 3%. Y aún le falta por salvar el problema de las 500 firmas del padrinazgo.
Y, éramos pocos y parió la abuela, dice el refrán castizo que viene como anillo al dedo para el caso de las elecciones
francesas. Cuando se creía que ya nadie se presentaría llegó, el 1 de febrero pasado, el líder antiglobalización económica, y las
multinacionales de la alimentación, José Bové, de 53 años de edad, que a menudo se le compara con el héroe galo Asterix
que lucha contra el Imperio Romano, con el que comparte grueso bigote y estatura, que se ofreció como alternativa a todos los
franceses decepcionados por la izquierda. Bové es el 46° candidato, para disgusto de muchos y consuelo de pocos.
Además, según los sondeos, el 71% de los franceses estaba en contra de la idea de que Bové se presentara a las elecciones
y sólo cuenta con apenas el 2% de la intención de voto. Tampoco cuenta con la firma de los alcaldes que son necesarias para ser
declarado candidato formal.
Para que nada le falte, un juez le condenó a cuatro meses de prisión efectiva por haber tomado parte en la destrucción
de cultivos transgénicos en 2004. La pregunta es si tiene que purgar esta sentencia antes o después de los comicios. Pronto se
sabrá. La verdad es que si llega libre a los comicios, su candidatura provocará que el voto de la izquierda se difume en contra de
Sègoléne Royal. A cambio, Bové únicamente ofrece al elector: Otro mundo es posible.
En tanto, Francia está politizada y sus intelectuales también. Muchos de ellos, en vez de apoyar a la Royal, optaron por
manifestarse a favor de Nicolás Sarkozy. Los oráculos intelectuales franceses han entrado en la presente campaña electoral,
aunque ya no son los tiempos de Jean Paul Sastre, Albert Camus, Raymond Aron o André Malraux. Sus votos
y sus opiniones, vertidas en todos los medios de comunicación, cuentan mucho. El 22 de abril se sabrá prácticamente la verdad.
Allons enfants de la Patrie (¡Adelante hijos de la Patría!)
José Bové
P E R S O N A E • 3