Periodistas

periodismo comprometido, cuya función
se supone que es divulgar el trabajo de
estas organizaciones.
Gervasio Sánchez: Hasta el Ministerio de
Defensa hace periodismo comprometido.
N.C.: Nuestro trabajo tiene que ser comprometido
con la verdad, pero la etiqueta si
se banaliza o manosea acaba molestando.
G.S.: No hay otro adjetivo que más me
desagrade que comprometido. El periodismo
es compromiso. Entiendo la necesidad
de la etiqueta para distinguirlo
de la basura consagrada a fortalecer las
relaciones entre medios y poderosos,
que confunde. El periodismo es tan importante
como la sanidad y la educación.
Una sociedad sin buen periodismo está
condenada al fracaso y a la manipulación.
La sociedad española ha dejado de recibir
buen periodismo, entendido como aquel
que vigila al poder y no es su mejor amigo,
el que denuncia en tiempo real la corrupción
y no con años de retraso, el que incide
en mejorar la calidad informativa de
una sociedad, en definitiva.
A.A.: ¿Está el periodismo en peligro?
J.B.: El periodismo, no. Los medios
de comunicación tal y como los hemos
conocido hasta ahora, sí. Esto parece el
Imperio romano, derrumbándose friso
a friso, columna a columna. Al tiempo,
emergen nuevos medios. Pero aún nos
encontramos en plena transición y una
cosa no ha sustituido a la otra. Con todo,
este momento de impasse es muy interesante.
El viejo orden se desmorona. Despedir
a 10.000 periodistas en dos años no
es una buena señal, pero nadie niega que
hay profesionales y nuevos proyectos con
músculo y ganas de hacer las cosas bien.
N.C.: Yo sí lo veo en peligro. Al menos,
las empresas informativas lo están. La debilidad
económica que las mantiene ligadas
a los anunciantes y controladas por
estos, fundamentalmente por los poderes
oficiales, se traduce en el día a día de los
profesionales. Pese a que cuando las cosas
iban mejor económicamente tampoco
ejercíamos un periodismo claramente
beligerante contra la agenda oficial, gozábamos
de más libertad para denunciar
determinados abusos. Desde el momento
en que las empresas son más débiles y los
directivos están más pendientes de mantener
a flote la nave y no de ocuparse de
defender a sus profesionales frente a los
poderes que procuran callarlos, tenemos
un problema. Las administraciones locales
proporcionan más del 50% de la publicidad,
de los ingresos de algunos medios de
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