Cese el fuego

Nacional del Estado Civil, financiación de campañas electorales y otros.
Posteriormente firmó el 20 de noviembre la Ley 35 de 1983 mejor conocida como la Ley de
Amnistía, que a pesar de los micos colgados a última hora, y sobre los cuales dejaron constancia
algunos congresistas en los puntos 7, 8 y 9 por ser completamente extraños a la ley y que eleva la
pena al que porte armas sin permiso, dan facultades indefinidas al presidente para modernizar la
policía y vía libre a la llamada acción cívico-militar, a pesar de eso, era regida por un espíritu
absolutamente distinto al de la amnistía de Turbay.
fijémonos que a diferencia de pasadas épocas, Belisario logró crear un clima diferente para la
discusión de los problemas, manejo con mayor tacto el orden público, creó una expectativa en torno
a lo que se llamó el nuevo estilo, y buscó así crear un ambiente adverso y negativo para las fuerzas
guerrilleras, pretendiendo colocarlas como las causantes de la situación de guerra que se vivía en
algunas zonas del país, tratando de hacer aparecer al gobierno como abanderado de la paz, y a la
guerrilla como propiciadora de la violencia. El gobierno de Belisario quería recoger y acaparar el
profundo sentimiento de paz que alberga cada colombiano, quería capitalizar la más sentida
reivindicación del pueblo.
Teníamos, entonces, dadas las condiciones especiales que se estaban presentando, la obligación de
manejar la situación para agitar nuestro programa, nuestro pensamiento, nuestro criterio sobre los
problemas de la nación y las salidas que esbozábamos.
A estas alturas, ya se hacían evidentes las contradicciones que existían a nivel de la clase
gobernante, sobre la interpretación del momento que se vivía. Por ello mismo, en un derrotero o
guía que enviamos a los frentes decíamos:
"Un poco antes y muy especialmente de la aprobación de la Ley de Amnistía por parte del Gobierno
Nacional, se puso de manifiesto una aguda contradicción entre la parte civil del Gobierno y la parte
militar. Los marxistas desarrollamos nuestras políticas utilizando las contradicciones que se dan en
la sociedad, en el enfrentamiento de las clases sociales que necesariamente se expresar en la lucha
política. Los marxistas en desarrollo de la política, no sólo tenemos en cuenta las contradicciones,
sino que debemos descubrir su origen, su naturaleza y su carácter. Además estamos obligados a
precisar de qué contradicciones se trata: ¿de contradicciones fundamentales, antagónicas, no
antagónicas, subsidiarias o colaterales? ¿Se trata de un momento determinado de la historia de un
pueblo, de una contradicción fundamental y determinante, pongamos por caso la que se da entre
capital y trabajo? ¿Se trata del surgimiento de otras contradicciones que hacen perturbadora y más
profunda la contradicción fundamental? ¿Se trata de un momento determinante de la historia de un
país, cuando al lado de la contradicción fundamental y determinante se anudan todas las demás
contradicciones de la sociedad capitalista, aquí en nuestro país amalgamadas con las
contradicciones de un desarrollo capitalista contrahecho, donde se dan el capital financiero filial del
gran capital financiero internacional, al lado del capital no monopólico y de rezagos de todos los
modos de producción anteriores?
Por eso, cuando no logramos usar en el análisis de la vida colombiana en toda su profundidad, el
método de materialismo histórico, puede equivocarse la formulación política y. por qué no, la
formulación militar que es necesariamente una forma de la lucha política.
Cuando estamos claros de las contradicciones, sabemos utilizarlas y ubicarías en beneficio de la
lucha general, podemos estar seguros que conocemos y nos apoyamos en lo revolucionario de los
procesos objetivos, de las leyes que rigen el proceso social".
Y más adelante decíamos: "Visto lo anterior, seguramente podemos ver con más claridad el