30.01.2015 Views

Descargar PDF (32.8Mb) - SEOC

Descargar PDF (32.8Mb) - SEOC

Descargar PDF (32.8Mb) - SEOC

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Por el contrario, en el caso de las explotaciones intensivas sí es frecuente que los malos<br />

olores que emanan se extiendan a una superficie considerablemente superior al ámbito físico de la<br />

explotación. Hemos de aceptar que se aprecian diferencias significativas entre los olores que<br />

despiden las explotaciones ganaderas atendiendo a la especie concreta de ganado que se cría en ellas,<br />

llegándose al caso de que en algunas regiones existe una normativa específica reguladora de las<br />

distancias mínimas de las instalaciones ganaderas, especialmente de las porcinas, a los núcleos de<br />

población. No es el caso de las explotaciones ovinas, poco contaminantes al respecto, contrariamente<br />

a las caprinas para las que es muy difícil neutralizar el olor "sui generis" especialmente puesto de<br />

manifiesto con la presencia de los machos.<br />

Cabría formular medidas preventivas o correctoras tendentes a eliminar, o cuando menos<br />

atenuar, en su propio origen, los focos generadores de malos olores; sin embargo, esto no es<br />

frecuente que se lleve a cabo en instalaciones ganaderas aunque sí funcionan con éxito en procesos<br />

industriales convencionales en los que se requiere aplicar sistemas de desodorización.<br />

3.4. Incidencia sobre la flora<br />

Para entrar en el análisis de este apartado en lo referente al sector extensivo hemos de<br />

atender tres aspectos característicos del mismo: la alimentación, la bebida y la generación de<br />

residuos, que conjuntamente con la vegetación configuran uno de los sistemas naturales cuyas<br />

condiciones de estabilidad han de ser objeto de examen. En efecto, la ganadería, y más<br />

concretamente, el colectivo de animales herbívoros tienen su fuente de sustento en la vegetación, de<br />

tal modo que viven de ella y en equilibrio con ella. Podemos admitir, en principio, que el ganado, al<br />

alimentarse a partir de la vegetación, reduce la cantidad de ésta, y posiblemente, su diversidad, en la<br />

medida en que aquél tenga un comportamiento selectivo. Sin embargo, esta afirmación es tan sólo<br />

cierta a medias, puesto que el factor que determina realmente la abundancia o escasez de la<br />

vegetación no es tanto la ganadería sino el clima.<br />

Podemos comprobar sin dificultad alguna que para una carga ganadera constante,<br />

dependiendo de la temporada, y dentro de ella de las bonanzas o adversidades del clima, encontramos<br />

diferente cantidad o variedad de vegetación, y en definitiva, de potencial alimentario. Por ello, hemos<br />

de admitir que no es la ganadería en sí quien agota los pastos cuando existe un equilibrio razonable<br />

entre el número de cabezas o masa pastante y la superficie disponible, sino el clima, que<br />

conjuntamente con el ganado, pueden acentuar el empobrecimiento en cantidad o en variedad de la<br />

vegetación.<br />

41

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!