02.05.2015 Views

EL PODER DE LA ESPOSA QUE ORA

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

<strong>EL</strong> <strong>PO<strong>DE</strong>R</strong><br />

Primero que todo permíteme aclara que el poder de una esposa que ora no es una forma de<br />

obtener control sobre su esposo ¡así que no te hagas muchas ilusiones! En realidad, es todo lo<br />

contrario. Es abandonar todo reclamo de poder en ti y descansar en el poder de dios para<br />

transformarte a ti, a tu esposo, tus circunstancias y tu matrimonio. Este poder no se nos da<br />

para ser usado como un arma para devolver los golpes a una bestia indomable. Es un medio<br />

apacible de restauración apropiada a través de las oraciones de una esposa que desea más<br />

hacer lo correcto que tener la razón y dar vida más que vengarse. Es una forma de invitar al<br />

poder de Dios a la vida de tu esposo, para su mayor bendición, que al fin es la tuya también.<br />

Cuando mi esposo Michael y yo nos casamos surgieron diferencias entre nosotros, la oración<br />

definitivamente no era mi primera opción. En realidad, estaba más cerca de ser el último<br />

recurso. Yo traté otros métodos primero, tales como discutir, rogar, no hacer caso, evadir,<br />

enfrentar, discutir y por supuesto, el tan conocido tratamiento del silencio, todo con mucho<br />

menos que resultados satisfactorios. Me tomó algún tiempo darme cuenta que al orar primero,<br />

estos métodos de operación no placenteros, podrían evitarse.<br />

Para cuando leas este libro, Michael y yo tendremos más de un cuarto de siglo de casados.<br />

Esto no es menos que milagroso. Por cierto, no es un testimonio de nuestra grandeza, sino a<br />

la fidelidad de Dios para contestar oraciones. Confieso que después de todos estos años<br />

todavía estoy aprendiendo y no es algo que sucede con facilidad. A pesar de que no tengo<br />

mucha práctica de estar haciéndolo tan bien como cuando lo hacía mal, puedo decirles sin<br />

reservas que las oraciones trabajan.<br />

En realidad, yo no aprendí cómo orar por mi esposo hasta que comencé a orar por mis hijos. A<br />

medida que obtuve respuestas profundas a la oración por ellos, decidí tratar de ser más<br />

específica y ferviente en la oración por él. Pero me di cuenta que orar por los hijos es mucho<br />

más fácil. Desde el primer momento en que ponemos nuestros ojos en ellos, deseamos lo<br />

mejor para sus vidas, sin condiciones, de todo corazón, sin dudas. Pero con un esposo, a<br />

menudo no es tan simple, en especial para alguien que ha estado casada por algún tiempo.<br />

Un esposo puede herir tus sentimientos, ser desconsiderado, despreocupado, abusivo, irritante<br />

o negligente. El puede decir o hacer cosas que traspasan tu corazón como una astilla. Y cada<br />

vez que comienzas a orar por él encuentras la astilla enconada. Es obvio que no puedes orar<br />

de la forma en que Dios desea que lo hagas hasta que te deshaces de ella.<br />

Orar por tu esposo no es igual que orar por tus hijos (aunque parezca similar), porque tú no<br />

eres la mamá de tu esposo. Nosotros tenemos autoridad sobre nuestros hijos que nos son<br />

dados por el señor pero no tenemos autoridad sobre nuestros esposos. Sin embargo, se nos<br />

ha dado autoridad “sobre todos los poderes del enemigo” (Luchas 10:19), y se puede hacer<br />

mucho daño a los planes del enemigo cuando oramos. Muchas cosas difíciles que suceden en<br />

una relación matrimonial son en realidad parte del plan del enemigo, preparado para minar la<br />

relación. Pero nosotras podemos decir: “No voy a permitir que nada destruya mi matrimonio”.<br />

“”No voy a quedarme de pie y mirar a mi esposo que está preocupado, golpeado o destruido”<br />

“No me voy a quedar sin hacer nada, mientras una pared invisible se levanta entre nosotros”<br />

“no permitiré que la confusión, la mala comunicación, las actitudes equivocadas y las<br />

decisiones malas erosionen lo que estamos tratando de edificar juntos”<br />

“No voy a tolerar que el dolor y la falta de perdón nos guían al divorcio”. Nosotras podemos<br />

tomar una postura en contra de cualquier influencia negativa en nuestras relaciones<br />

matrimoniales y saber que Dios nos ha dado autoridades su nombre para respaldarnos.<br />

Tú tienes los medios para establecer un cerco de protección alrededor de tu matrimonio porque<br />

Jesús dijo “Les aseguro que todo lo que ustedes aten en la tierra quedará atado en el cielo, y<br />

todo lo que desaten en la tierra quedará desatado en el cielo” (Mateo 18:18). Tu has<br />

autorizado en el nombre de Jesús detener el mal y permitir el bien. Tú puedes llevar ante Dios<br />

en oración cualquier cosa que controle a tu esposo: alcoholismo, exceso de trabajo, vagancia,

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!