¡Gracias a Dios por medio de Jesucristo nuestro Señor! En conclusión, con la mente yo mismo me someto a la ley de Dios, pero mi naturaleza pecaminosa está sujeta a la ley del pecado. Romanos 7:25 Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas. Marcos 12:30
CAPÍTULO OCHO SUS TEMORES Hay muchas cosas en este mundo a las que temer, solo un necio diría lo contrario. Pero cuando el temor nos domina, atormenta y controla nuestras visas, nos hemos convertido en cautivos de él. Los hombres, a menudo, son susceptibles a esto porque sin ellos ni siquiera darse cuenta, son atacados por “qué ocurriría si” ¿Qué ocurriría si no puedo ganar suficiente dinero, si algo le sucede a mi esposa e hijos, si contraigo una enfermedad terrible, si mi negocio fracasa, si no puedo ser un buen padre, si me quedo lisiado y no puedo trabajar para sostener a mi familia; si soy vencido o amenazado; si no puedo funcionar sexualmente, si nadie me respeta; si me veo involucrado en un accidente, si muero?” El temor puede controlar a un hombre (Salmo 48:6) y causar que su vida se pierda (Salmo 78:33). Si él es “dominador por un gran temor” (Lucas 8:37) esto lo puede mantener alejado de todo lo que Dios tiene para él. Nuestro segundo año de casados, Michael y yo hicimos un viaje a Italia, Gracia e Israel con nuestro pastor Jack Hayford y su esposa Anna y algunas personas de nuestra iglesia. Michael siempre ha sido un viajero muy ansioso, así que para cuando llegamos a Crecia, él estaba con tensión. Una noche, después de unos días en que estábamos exhaustos, él dijo: - Esto para mi resulta terrible, yo no puedo quedarme en la gira. - ¿A qué le temes exactamente?- Le pregunté. - No estoy seguro – me respondió – Pero tal parece que todo en mi vida se va a desmoronar si no regreso a la casa de inmediato. Aunque era tarde en la noche, llamé a la habitación del pastor Jack para decirle que nos marchábamos en la mañana. Yo estoy segura de que él ya estaba acostado pero me dijo: - Voy para allá El vino a nuestra habitación de inmediato y Michael compartió con él lo que estaba experimentado. El pastor puso su brazo compasivo alrededor de sus hombros y le habló sobre el amor que le tenía el Padre celestial. - Dios te ha adoptado como su hijo – le dijo-. Cuando tú estás en la presencia de un Padre Fuerte y amoroso, no hay que tener temor. El pastor Jack oró por Michael para que pudiera percibir con claridad el amor de su Padre Celestial y él también le demostró el amor de un padre. Fue un simple acto inspirado por la bondad del Espíritu Santo pero una relación poderosa para Michael. A causa de esto, él pudo superar su temor y nos quedamos en la gira hasta el final. Y fue bueno que lo hiciéramos. Yo quedé encinta en Jerusalén y nueve meses más tarde nuestro hijo Christopher, nació el día del cumpleaños del pastor Jack. Cosas significativas suceden en nuestras vidas cuando no permitimos que el temor domine una situación. Hay una diferencia entre un pensamiento de temor que viene a la mente como un aviso para orar por una cosa en particular y el espíritu atormentado de temor que paraliza. Tu no deseas debilitar los avisos del Espíritu Santo al corazón de tu esposo, sino apoyarlo mientras él lucha contra el temor destructivo. Jesús dijo: “Les voy a enseñar más bien a quien deben tener: teman al que, después de dar muerte, tiene poder para echarlos al infierno. Sí les aseguro que a él deben temerle (Lucas 12:5) El único tipo de temor que se supone que nosotros tengamos es el temor del Señor. Cuando tienes el temor al Señor, Dios promete librarte de tu enemigo (2 Reyes 17:39) protegerte del mal (Proverbios 16:6), mantenerte riquezas y honor (Proverbios 22:4), suplir todo
- Page 1 and 2: EL PODER DE LA ESPOSA QUE ORA Storm
- Page 3 and 4: EL PODER Primero que todo permítem
- Page 5 and 6: Antes que descartes el matrimonio
- Page 7 and 8: Si despiertas una mañana con un ex
- Page 9 and 10: UNA ORACIÓN A LA VEZ NO te abrumes
- Page 11 and 12: pequemos en nuestros corazones, por
- Page 13 and 14: gozosa, amorosa, que perdona. Donde
- Page 15 and 16: arrepentimos. El recibió mis suger
- Page 17 and 18: defensiva porque él pensaba que yo
- Page 19 and 20: Muéstrame dónde hay pecado en mi
- Page 21 and 22: CAPITULO DOS SU TRABAJO Bernardo po
- Page 23 and 24: encontrar y hacer un buen trabajo.
- Page 25 and 26: Puede que no sea posible el usar la
- Page 27 and 28: esposo necesita ser cubierta en ora
- Page 29 and 30: CAPÍTULO CINCO SU CARIÑO Tomás y
- Page 31 and 32: ¡Ojalá pudiera mi cabeza reposar
- Page 33 and 34: desea lo que es contrario al Espír
- Page 35: a Dios ni le dieron gracias, sino q
- Page 39 and 40: CAPÍTULO NUEVE SU PROPÓSITO Toda
- Page 41 and 42: CAPÍTULO DIEZ SUS DECISIONES Surgi
- Page 43 and 44: CAPÍTULO ONCE SALUD Durante años
- Page 45 and 46: CAPÍTULO DOCE SU PROTECCÍON Cuán
- Page 47 and 48: CAPÍTULO TRECE SUS PRUEBAS Toda la
- Page 49 and 50: no se cansarán” (Isaías 40:31)
- Page 51 and 52: presión él pueda actuar de acuerd
- Page 53 and 54: nunca nos avergoncemos (Salmo 71:1)
- Page 55 and 56: Ora por tu esposo para que siempre
- Page 57 and 58: Después que tuvimos a nuestros hij
- Page 59 and 60: CAPÍTULO DIECIOCHO SU PATERNIDAD U
- Page 61 and 62: Señor, sé que les pasamos una her
- Page 63 and 64: a su cabeza, dejándolo en el senti
- Page 65 and 66: sea quebrantado por causa del dolor
- Page 67 and 68: que el Señor nos tenga que discipl
- Page 69 and 70: ORACIÓN Señor, tú has dicho en t
- Page 71 and 72: ORACIÓN Señor, yo sé que el homb
- Page 73 and 74: ORACIÓN Señor, oro para que tu Es
- Page 75 and 76: ORACIÓN Señor, oro para que mi es
- Page 77 and 78: ORACIÓN Señor, tú has dicho que
- Page 79 and 80: Caminar en obediencia tiene que ver
- Page 81 and 82: de la clave para desatar todo esto
- Page 83 and 84: ORACIÓN Señor, oro para que le de
- Page 85: hable de una visión de su propio c