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46 Rompiendo las cadenas Tienes derecho de ser libre 47<br />
sobre el papel. Pero había algo infinitamente importante para que<br />
Lidia se percatara de quién era ella en Cristo. Satanás la había llevado<br />
a creer que era una persona malvada y despreciable, lo que<br />
por supuesto era mentira, ya que él no quería que ella supiera la<br />
verdad ni que Jesús satisficiera sus necesidades de vida; identidad,<br />
aceptación, seguridad, e importancia.<br />
Satanás sabe que la verdad de Dios destruiría su mentira de<br />
forma tan certera como que la luz disipa la oscuridad; y obviamente,<br />
él no se rendiría sin luchar.<br />
Eres hijo de Dios<br />
No hay nada más importante para tu liberación de la esclavitud<br />
de Satanás, que comprender y afirmar lo que Dios ha hecho<br />
por ti y que eres su Hijo. Las actitudes, acciones, respuestas y reacciones<br />
en las circunstancias de la vida son tremendamente afectadas<br />
por lo que uno cree de sí mismo. Si la percepción que tenemos de<br />
nosotros es de la pobre víctima de Satanás y de su intriga, probablemente<br />
viviremos como tal y estaremos esclavizados por sus mentiras.Pero<br />
sinos vemos a nosotros mismos como hijos amados y aceptados<br />
por Dios, tendremos mayores oportunidades de vivir así.<br />
Creo que es exactamente lo que Juan quiso decir en 1 Juan<br />
3:1,3: «Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, para que seamos<br />
llamados hijos de Dios; y por esto." Amados, ahora somos hijos de<br />
Dios... y todo aquel que tiene esta esperanza en él, se purifica a sí<br />
mismo, así como él es puro».<br />
Todos los cristianos caídos con los que he trabajado tenían una<br />
cosa en común, ninguno de ellos sabía lo que eran en Cristo ni<br />
tampoco entendían lo que significaser Hijo de Dios. Sin embargo,<br />
las Escrituras son muy claras: «Mas a todos los que le recibieron, a<br />
los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de<br />
I?ios»(Juan 1:12). «El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíntu,<br />
de que somos hijos de Dios. Y sihijos, también herederos; herederos<br />
de Dios y coherederos con Cristo., para que juntamente<br />
con él seamos glorificados» (Romanos 8:16,17).<br />
En este capítulo quiero resaltar varios aspectos importantes de<br />
nuestra identidad y posición en Cristo. Muchos de ustedes, ya<br />
pueden haber comprendido las verdades bíblicas resumidas aquí,<br />
pero algunos quizás piensen que esta es la parte más complicada,<br />
porque tiene un contenido doctrinal. Pero creo que es sumamente<br />
importante llevar a la práctica estos capítulos. Todos estos conceptos<br />
son fundamentales para la libertad de los conflictos espirituales<br />
como hijos de Dios.<br />
El tema de la identidad espiritual y la madurez en Cristo es<br />
tan importante que nuevamente, sugiero trabajar con el libro Victoria<br />
sobre la oscuridad (Unilit) paralelamente a este.<br />
(para profundizar en los estudios teológicos de posición y santificación<br />
progresiva, recomiendo leer el libro Lo Común hecho<br />
santo, que ya había mencionado anteriormente.)<br />
Eres espiritual y, por lo tanto,<br />
eternamente vivo<br />
La naturaleza básica del hombre está compuesta por dos partes<br />
principales: La material y la inmaterial; o el hombre interior y<br />
el hombre exterior (2 Corintios 4:16). La parte material es nuestro<br />
cuerpo físico y la inmaterial es nuestra alma / espíritu. Al ser creados<br />
a imagen de Dios, tenemos la habilidad de pensar, sentir yelegir<br />
(mente, emociones y voluntad la mayoría de las veces son relacionadas<br />
con el alma), y la habilidad de relacionarnos con Dios (si<br />
estamos espiritualmente vivos).Como cristianos, nuestra alma / espíritu<br />
está en unión con Dios desde el momento de la conversión y<br />
eso nos hace estar vivos en espíritu. Estamos físicamente vivos,<br />
cuando nuestro cuerpo está en unión con nuestra alma / espíritu.<br />
(Nota: Utilizo el término «alma / espíritu» porque los teólogos<br />
aún no llegan a un acuerdo con relación al alma humana y el espíritu,<br />
si son entidades separadas o básicamente lo mismo. Tratar de<br />
hacer la diferencia entre uno y el otro no es necesario para nuestro<br />
propósito.)<br />
Cuando Dios creó a Adán, le dio vida física y espiritual, pero<br />
debido a su pecado y a la consecuencia de la muerte espiritual, todos<br />
venimos a este mundo y nacemos físicamente vivos, pero<br />
muertos en espíritu (Efesios 2:1).