Kaikan Nº 70 - Setiembre 2012 - Asociación Peruano Japonesa
Kaikan Nº 70 - Setiembre 2012 - Asociación Peruano Japonesa
Kaikan Nº 70 - Setiembre 2012 - Asociación Peruano Japonesa
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
HISTORIA<br />
Origen, pasado y reencuentro<br />
de una familia japonesa y nikkei<br />
La gran<br />
novela de los<br />
Nishisaka<br />
[texto Javier García Wong Kit]<br />
No hay persona<br />
que<br />
no tenga<br />
historias,<br />
anécdotas<br />
y recuerdos<br />
familiares que atesora en la<br />
memoria y que podrían servir<br />
para escribir cientos de<br />
páginas de un libro. Lucero<br />
Nisizaka Figueroa no está escribiendo<br />
un libro ni una novela<br />
histórica, pero desde hace<br />
unos años viene recopilando<br />
información sobre sus ancestros<br />
japoneses de apellido Nisizaka<br />
(o Nishisaka, como se<br />
escribe originalmente).<br />
Esa investigación de entrecasa<br />
la ha llevado a conocer<br />
tíos en tierras lejanas, a encontrar<br />
parientes perdidos, a recopilar<br />
fotografías antiguas y a<br />
comprender mejor el origen de<br />
una familia que tiene miembros<br />
en Tokio, Madre de Dios,<br />
Motupe y Wolfsberg (Austria),<br />
donde ella reside y se dedica a<br />
dar clases de economía. Rastrear<br />
a los parientes Nishisaka<br />
es toda una aventura.<br />
Ella y su papá, José Vicente,<br />
un curtido periodista norteño<br />
y compositor de marineras,<br />
son los cultores de las ramificadas<br />
historias del árbol genealógico<br />
de una familia cuyas<br />
raíces están en Fukushima, en<br />
un templo budista zen; pero<br />
también en la histórica Nagasaki,<br />
de donde provendría su<br />
apellido, y muy posiblemente<br />
en las leyendas samuráis.<br />
En agosto, Lucero y José Vicente<br />
convocaron en Lima a<br />
todos los familiares conocidos<br />
para partir a Motupe, donde<br />
realizaron una romería hacia<br />
el camposanto Nuestra Señora<br />
del Carmen. Allí visitaron la<br />
tumba de Eiran, el abuelo, un<br />
empresario transportista que<br />
es el eje de esta familia y del<br />
gran libro sin escribir de los<br />
Nishisaka. Esta crónica es sólo<br />
un boceto en capítulos con algunos<br />
de sus recuerdos.<br />
CAPÍTULO UNO:<br />
EL ABUELO EIRAN<br />
Eiran fue un pionero del trans-<br />
porte en el norte del Perú. Un<br />
inmigrante japonés que llegó<br />
al país en 1913, con apenas 18<br />
años, buscando nuevos horizontes.<br />
Eran tiempos en que<br />
la mayoría de los japoneses se<br />
dedicaban a la agricultura, al<br />
cultivo de la caña de azúcar, en<br />
la costa norte.<br />
No fue su caso, aunque sí<br />
llegó al norte, al distrito lambayecano<br />
de Motupe, pero<br />
para ser el guía espiritual de<br />
la comunidad japonesa que<br />
se afincó en esta región. Ser el<br />
hijo de un sacerdote budista<br />
le fue de mucha ayuda, pero<br />
en tierras donde el progreso<br />
aún no llegaba, el joven Eiran<br />
necesitó algo más para salir<br />
adelante.<br />
Para hacerle camino al<br />
progreso, Eiran aprovechó el<br />
aprecio de José Paz, un empresario<br />
de cierta edad de Chiclayo,<br />
quien lo acogió y apoyó en<br />
sus sueños de grandeza. Gracias<br />
a él, y al magnate nipón<br />
Seguma Kitsutani, abrió una<br />
tienda de abarrotes, un negocio<br />
de telas, una barbería, una<br />
12 SETIEMBRE <strong>2012</strong> KAIKAN