10.07.2015 Views

1egSrsH

1egSrsH

1egSrsH

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Rodolf o UrbirJo. Bur.9os-sucede en Ancud con los relojes públicos -se quejaba la prensa en1913- No pasa semana que no se adelanten o se atrasen mediahora, produciendo en la población. como es natural. un verdaderorevolutis . sobre tod o en los establecimientos de instnIcción que seguian por la hora pública~561 .En Castro no era necesario el reloj públíco. Pero había caba11el'06que usaban relojes con no poca ostentación. Eran grandes y pesado;aquellos de bolsillo que en 1919 se compraban en la tienda deBemardlno Triviño y. según aseguraba la propaganda. la cuerdaduraba ocho días. Usarlo era darse aires de moderradad. y habiaque lucirlo en el chaleco con una caden ita de oro prendida del ojaly caminar echado para atrás con tres dedos de cada mano metidosen los bolsillos superiores del chaleco. Sin embargo. todos seguiaban por la campana porque marcaba los tres hitos del dia: lasocho de la mañana. las doce al mediodía. y las seis. u hora de laoración . aunque sin ninguna exactitud. porque la hora quedaba acrite rio del campanero . En esto de medir el tiempo. no habíacambiad o mucho desde el siglo XIX. Por Charles Darwin sabemosque en 1835. las campanas de la iglesia de Ancud repicaban amediodia o "sexta". con variación de diez o mas minutos respectode la hora real. porque por esos años para dar los repiques no seusaba reloj. sino "la opinión de un anciano~ 568 • En Castro tambíen.El mismo Darwín dice: "Ninguno de ellos (los castre ñoel posee unreloj de bolsillo ni péndulo, y un anciano. que tiene fama paracalcular bienel tiempo. da las horas con lacampana de la iglesia enabsolu to cuando a él le p lac e~ 569 .Pero . hablaba la campana. Mas elocu ente no podía ser aprincipios de siglo con sus repiques con pausas largas y pausascortas. Todo lo decía con suficiente claridad . Para eso sí que loscastreños tenían el oído ate nto y nadie Ignoraba los tres tiemposdel día, como tampoco el signíficado del alegre y festivo "talán talán"- La Cruzdel Sur,Ancud. 2S de mayo de 1913 .- Vn-gara Qutroz. Sergio, "El tiempo . la V1da y la muerte en Chile Colonial", en:Var10s AutoR'3, H lsloria w. /as men1 o /lrlndes. vefpararso. &l eva], 1986, p. 75.nota 13 .- DanIrtn , Char'es. Dnn.W1 en Chfle rJ832· /835/. Vi

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!