Salud laboralvarios cursos, allá. Ponía las fechas, pero a veces se mezclaba. <strong>La</strong> señora ya no mequería buscar trabajo y yo salí sola a buscar. En una <strong>de</strong> las casas, <strong>de</strong>cía: «se necesitaempleada» y yo toco (la puerta). <strong>La</strong> señora mira mi cara y como tenía una cara <strong>de</strong> chibola(chiquilla), la primera cosa que me preguntó era cuantos años tengo, (porque ella) noquería (contratar a una) menor <strong>de</strong> edad. Fui a buscar más, como (trabajar) en casa era elúnico trabajo para mí, eso ya había más o menos aprendido: limpiar, cocinar. Encontré otracasa, don<strong>de</strong> dijo: «se necesita empleada». Toco y la señorita que abrió la puerta me dijo:«es para Lima. Si tú aceptas ahorita, me confirmas que sí, vas a ir con nosotros». Mepreguntó si yo sé cocinar y yo le contesté que no mucho, porque eso era la verdad. Todosmis papeles hicieron, porque era menor <strong>de</strong> edad; no les hacía importancia. Sin condicionesella me ayudó, me dijo: «si quieres estudiar, te voy a trasladar, te voy a enseñar». EnLima, me dijo: «te voy a pagar poco, pero te voy a dar estudios». Como me había ido tanmal me olvidé rápido mi pasado, no extrañaba nada. Me pusieron al colegio, me tratabanbien, me hacían acostumbrar en Lima. Como antes era tan triste, en Lima me cambié.Acabé mi primaria y secundaria y cosmetología básica. Ahora, me falta cosmetologíaavanzado. Actualmente, estoy estudiando computación en <strong>La</strong> <strong>Casa</strong> <strong>de</strong> <strong>Panchita</strong> y llevocursos <strong>de</strong> turismo.(Rina, 21 años, educación secundaria completa)<strong>La</strong> meta <strong>de</strong> casi todas las niñas y adolescentes que migran para ser trabajadoras <strong>de</strong>lhogar, es superarse, salir a<strong>de</strong>lante, ser algo en la vida. <strong>La</strong> mayoría consi<strong>de</strong>ra 18 que, elmejor medio para lograrlo, es a través <strong>de</strong> los estudios. Venir a Lima significa para casitodas, la posibilidad <strong>de</strong> estudiar. Esta meta les da fuerzas para continuar y no regresar asu tierra, a pesar <strong>de</strong> los problemas y maltratos que pue<strong>de</strong>n encontrar en Lima. Es elcomienzo <strong>de</strong>l proceso <strong>de</strong> <strong>de</strong>sarraigo, por el cual van abandonando poco a poco su i<strong>de</strong>ntidad<strong>de</strong> origen.Mis papás, son más que todo los que impulsan a <strong>de</strong>cirme: «no te que<strong>de</strong>s como yo, fuiagricultor nada más. Sé mejor que yo». Hace tres meses fui a Lima. Más que todopara trabajar, ganar mi dinero; para apren<strong>de</strong>r algo y luego para regresar a mi pueblo.Mi prima me llamó y dijo que aquí había trabajo. Antes no había venido a Lima.Acabé el colegio allá. No, tampoco pensaba venir. Me llamó mi prima, (me preguntó)si podría venir: «vamos a estar juntas; yo quisiera estar con alguien aquí, hablar».Triste estuve, mi patrona es mala, me trata mal, son bien diferentes, te hacen <strong>de</strong>lado (te discriminan). Si tú eres <strong>de</strong> sierra, a un lado te hacen. Así me llamó (miprima), y yo vengo.(Wara, 20 años, educación secundaria completa)18Al igual que la gran mayoría <strong>de</strong> peruanos.39
<strong>LA</strong> SALUD: <strong>de</strong>recho violado40