contaminación <strong>de</strong> la atmósfera y los cuerpos <strong>de</strong> agua, <strong>de</strong>gradación <strong>de</strong>l suelo, agotamiento <strong>de</strong>acuíferos y <strong>de</strong> recursos energéticos, extinción <strong>de</strong> especies, etc. Todos estamos convencidos <strong>de</strong> quees preciso conservar los ecosistemas y las especies y que se <strong>de</strong>be evitar la contaminación.Ahora bien, ¿quién es el responsable <strong>de</strong> este problema?, ¿a quién le afecta?, ¿quién <strong>de</strong>be tomarcartas en el asunto para exigir el cambio y para obrarlo? En una primera fase <strong>de</strong>l movimientoambientalista se señaló a los gran<strong>de</strong>s contaminadores como los responsables <strong>de</strong>l problema y sepudieron tomar medidas para mitigar sus efectos sobre el ambiente, en ese momento era fácilapoyar al movimiento y sentirse parte <strong>de</strong> él. Estos contaminadores concretos se <strong>de</strong>nominan fuentespuntuales 81 , en contraste con las fuentes difusas: todos nosotros, los habitantes <strong>de</strong> la al<strong>de</strong>a global,que en la medida <strong>de</strong> nuestras costumbres y elecciones, generamos un impacto ambiental mayor omenor en todos nuestros actos. Este impacto pue<strong>de</strong> parecer insignificante pero la suma <strong>de</strong> todas lascontribuciones no lo es. Algunos estudios concluyen que cada año, el <strong>de</strong>secho ina<strong>de</strong>cuado <strong>de</strong>l aceite<strong>de</strong> los automóviles exce<strong>de</strong> los <strong>de</strong>rrames <strong>de</strong> los buques petroleros en el mar 82 .Estamos ahora en un segundo momento <strong>de</strong> la toma <strong>de</strong> conciencia acerca <strong>de</strong>l problema ambiental, enque se nos empieza a hablar <strong>de</strong> la corresponsabilidad que tenemos todos <strong>de</strong> seguir agravando elproblema o empezar a implementar soluciones, pero esta vez no se trata únicamente <strong>de</strong> tener unaactitud favorable, sino <strong>de</strong> empezar a cambiar hábitos para vivir más sustentablemente.El concepto <strong>de</strong> sustentabilidad o sostenibilidad originalmente se acuñó para hablar <strong>de</strong> producciónpiscícola, agrícola y forestal, más tar<strong>de</strong> se generalizó para el tan visitado concepto <strong>de</strong> <strong>de</strong>sarrollosustentable y algunos autores prosiguen ampliando el concepto hacia sociedad sostenible 83 . Yoquisiera agregar en este or<strong>de</strong>n <strong>de</strong> i<strong>de</strong>as, el término estilo <strong>de</strong> vida sustentable.Con el fin <strong>de</strong> enten<strong>de</strong>r el contexto en el que surge el concepto <strong>de</strong> producción sustentable, vale lapena acudir al siguiente párrafo:Cuando la ecología <strong>de</strong>muestra que todo ecosistema es un conjunto en el que los organismos, los flujos<strong>de</strong> energía y los ciclos biogeoquímicos se hallan en un “equilibrio inestable”, es <strong>de</strong>cir, que sonentida<strong>de</strong>s capaces <strong>de</strong> automantenerse, autorregularse y autorrepararse in<strong>de</strong>pendientemente <strong>de</strong> loshombres y <strong>de</strong> las socieda<strong>de</strong>s y bajo leyes y principios naturales, no hace más que revelar losmecanismos por los que la “maquinaria” <strong>de</strong> la naturaleza se renueva continuamente. (...) Cadafragmento <strong>de</strong>l espacio natural posee un límite (teóricamente reconocible) para su a<strong>de</strong>cuada81 Ibid, p. 8.82 Ibi<strong>de</strong>m.83 Ibid, p. 14. 110
apropiación, más allá <strong>de</strong>l cual se atenta contra la renovabilidad y contra la existencia misma <strong>de</strong>lecosistema. (...) Sólo una producción que permita y que aproveche la continua renovación <strong>de</strong> su basematerial será una producción autosostenida y permanente 84 .La explicación anterior es rica pues nos habla <strong>de</strong> la capacidad <strong>de</strong> regeneración que tiene lanaturaleza y que en la historia <strong>de</strong> la humanidad fue confundida con la creencia <strong>de</strong> que la naturalezaera inagotable 85 ; hoy sabemos que no lo es. La naturaleza es sumamente generosa: <strong>de</strong> un solo granoproduce una espiga, <strong>de</strong> una sola semilla se obtiene mucho fruto; sin embargo, si la explotación oaprovechamiento <strong>de</strong> los recursos naturales se efectúa por encima <strong>de</strong> su capacidad <strong>de</strong> regeneración osi se contamina por encima <strong>de</strong> su capacidad <strong>de</strong> procesar los <strong>de</strong>sechos, se está provocando unforzamiento ecológico 86 .Po<strong>de</strong>mos enten<strong>de</strong>r pues, la sustentabilidad, como vivir <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la capacidad <strong>de</strong>automantenimiento, autorregulación y autorreparación <strong>de</strong> la Tierra, o como generalmente se ha<strong>de</strong>finido: satisfacer las necesida<strong>de</strong>s actuales sin comprometer la satisfacción <strong>de</strong> las necesida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>lfuturo 87 .Respecto <strong>de</strong>l <strong>de</strong>sarrollo sustentable, hay varias discusiones en torno a si se pue<strong>de</strong> llamar <strong>de</strong>sarrolloa la urbanización y a la industrialización, que ciertamente con gran<strong>de</strong>s mejoras a la calidad <strong>de</strong> vida<strong>de</strong> algunos, también suelen acarrear marginación y pobreza para otros, especialmente cuando sellevan a cabo <strong>de</strong> manera <strong>de</strong>sor<strong>de</strong>nada. Es indispensable reflexionar sobre nuestra noción <strong>de</strong><strong>de</strong>sarrollo, pues “el objetivo simple <strong>de</strong>l crecimiento económico resulta insuficiente para garantizarel <strong>de</strong>sarrollo humano” 88 .Pablo VI tenía una visión articulada <strong>de</strong>l <strong>de</strong>sarrollo. Con el término «<strong>de</strong>sarrollo» quiso indicar antetodo el objetivo <strong>de</strong> que los pueblos salieran <strong>de</strong>l hambre, la miseria, las enfermeda<strong>de</strong>s endémicas y elanalfabetismo. Des<strong>de</strong> el punto <strong>de</strong> vista económico, eso significaba su participación activa y encondiciones <strong>de</strong> igualdad en el proceso económico internacional; <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el punto <strong>de</strong> vista social, su84 TOLEDO, Víctor Manuel, et. al.: Ecología y autosuficiencia alimentaria. Hacia una opción basada en la diversidadbiológica, ecológica y cultural <strong>de</strong> México, 3ª ed. México: Siglo XXI Editores, 1991, p. 15-16.85 Cfr. CAMPBELL, Bernard: Ecología Humana. La posición <strong>de</strong>l hombre en la naturaleza, Barcelona: Salvat, 1985, p.271.86 TOLEDO, Op. Cit., p.17.87 Cfr. Informe <strong>de</strong> la Comisión Mundial sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo (Comisión Brundtland): NuestroFuturo Común, Oxford: Oxford University Press, 1987, citado en “Definición <strong>de</strong>l Desarroll (sic) sostenible”;consultado en: http://www.worldbank.org/<strong>de</strong>pweb/spanish/sd.html (16 <strong>de</strong> noviembre <strong>de</strong> 2009).88 DELORS, Jacques, et. al.: La Educación encierra un tesoro. Informe a la UNESCO <strong>de</strong> la Comisión Internacionalsobre la Educación para el siglo XXI, presidida por Jacques Delors, México: Correo <strong>de</strong> la UNESCO, 1997, p. 79. 111
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