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Este año, además, hemos enfrentado otro terrible desastre: lasmuertes de mujeres por efecto de la eliminación del abortoterapéutico. También han enlutado a muchas familias. Niñas yniños huérfanos llora la ausencia de sus madres y los hombreslloran la muerte de sus parejas muertas por una causa evitable.Vidas truncadas de mujeres de carne y hueso iguales a cada unade nosotras.No podemos dejar de mencionar el desastre que representan losabusos sexuales cometidos contra niñas y niños y los asesinatosde mujeres que se agudizaron en este año.Igual de preocupante es la respuesta violenta e intimidatoriaque dieron las autoridades policiales a la protesta pacíficade mujeres organizadas a inicios de octubre, demandando larestitución del aborto terapéutico, frente a la reunión de lasCortes de Justicia del mundo. Otros actos pacíficos de valorde mujeres con la misma demanda en actos públicos, tuvieroncomo respuesta la intolerancia de líderes que reaccionaron demanera violenta contra ellas. ¿Por qué ante protestas pacíficashay respuestas agresivas? Esta actitud violenta el derechode las y los ciudadanos de nuestro país a expresar pública ypacíficamente nuestras demandas para cambiar situaciones quenos perjudican.Con nuestro accionar ciudadano hemos enfrentado estosdesastres de diferentes maneras. En los territorios las mujereshemos realizado y seguiremos realizando movilizaciones parahacer sentir nuestras voces; continuaremos desarrollandoacciones educativas e informativas para aclarar a lascomunidades sobre políticas públicas que nos atañen;e investigando y monitoreando el efecto de medidasgubernamentales como la eliminación del aborto terapéutico.2 La Boletina No. 70