You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
— Porque estaba sola, Erika. Todos los que alguna vez<br />
amé o formaron parte de mi vida murieron dejándome vacía<br />
por dentro. Incapaz de sentir. Viviendo únicamente por inercia.<br />
Pero cuando ellos me ofrecieron esto también me ofrecieron<br />
un sentido para mi vida. Desde el día que este pequeño brotó<br />
en mi interior no he estado sola. Ya nada me aflige el corazón.<br />
Ya nada hace peligrar mi alma. Desde ese día solo he conocido<br />
la felicidad —baja la cabeza para mirar su vientre—. Desde ese<br />
día solo he vivido para proporcionarle lo que yo más deseaba<br />
para mí. Para darle esperanza, seguridad... y amor.<br />
— Eres idiota, Adune —escupo lo que menos se<br />
merece—. Yo también estoy sola, ¿sabes? Y puede que jamás<br />
sea capaz de retomar un contacto social propiamente dicho,<br />
pero nunca me sacrificaría de esa manera. ¿Qué crees que<br />
pensará el crío cuando descubra lo que te hizo?<br />
— Lo aceptará igual que yo lo acepté a él —contesta<br />
sin una pizca de enfado—. Además, Erika tú no estás sola<br />
en absoluto.<br />
— Los robots no cuentan.<br />
— No me estoy refiriendo a los robots. Me refiero<br />
a Robert. ¿De quién crees que ha estado hablando todo el<br />
trayecto hasta aquí? —niego con la cabeza pues no quiero<br />
oírlo. Ella continúa de todos modos—. De ti. Y he visto<br />
cómo te ha mirado nada más bajar de la nave. No, Erika. Tú<br />
no estás sola en el universo. Tan solo ciega. Tal vez por eso la<br />
nave aún no está completa. Tal vez por eso no...<br />
Las palabras de Adune se cortan de raíz y cae de<br />
rodillas aferrándose el vientre. Yo salto en su ayuda al instante<br />
sin saber siquiera si puedo serle de asistencia. Y cuando me<br />
percato sobre lo que me he parado se que este no es mi lugar.<br />
— Has... has roto aguas —digo con más miedo del<br />
que he tenido en mi vida— ¡Pero es demasiado pronto!<br />
— Creo que la vida no entiende de horarios, Erika.<br />
¡Ah! —la segunda contracción le arrebata el color del rostro—<br />
115