13.07.2015 Views

leer-una-muestra-de-aevum

leer-una-muestra-de-aevum

leer-una-muestra-de-aevum

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

AEVUM – ©Lena Blau―Soy alguien que valora más <strong>de</strong> lo que imaginas la vida humana ―respondióimperturbable―. Y no me gusta ver cómo la gente infravalora la suerte que tienen <strong>de</strong> estar vivos.―Perdona, pero yo no infravaloro mi vida ―le espeté cada vez más irritada. Su actitudautosuficiente e imperativa me estaba poniendo <strong>de</strong> los nervios.―Pues no es eso lo que aparentas ―continuó diciendo mientras bebía <strong>de</strong> su vaso <strong>de</strong>cerveza. Me miró <strong>de</strong>tenidamente, observándome <strong>de</strong> arriba abajo con <strong>de</strong>scaro―. Si valorares esecuerpo, no lo echarías a per<strong>de</strong>r con un hábito tan dañino.―¿Sabes qué? No tienes absolutamente ni i<strong>de</strong>a <strong>de</strong> quién soy ni <strong>de</strong> cómo me cabrea queme <strong>de</strong>n lecciones, así que más te vale disculparte por meterte en mis asuntos.―No pienso disculparme ―me aseguró muy serio―. Te he hecho un favor.―Pues yo te voy a hacer otro ―<strong>de</strong>claré comenzando a alejarme <strong>de</strong> él―. Me voy hacia elescenario antes <strong>de</strong> per<strong>de</strong>r los estribos. Y te aviso: <strong>de</strong>ja <strong>de</strong> meterte don<strong>de</strong> no te llaman.―¿Y si lo sigo haciendo? ―me <strong>de</strong>safió. Aquellos ojos ambarinos parecían brillar en laoscuridad <strong>de</strong>l local.―No lo hagas; te arrepentirás ―le avisé con uno <strong>de</strong> mis tonos más ásperos.―No me amenaces, preciosa. No te conviene.―Lo que no me conviene es seguir discutiendo contigo ―suspiré exasperada―. Todoesto es absurdo. Ni siquiera me conoces.Encendí otro cigarro en sus narices y exhalé el humo, echándoselo a la cara. Me miró conun gesto <strong>de</strong> <strong>de</strong>saprobación, aunque pu<strong>de</strong> adivinar un rastro <strong>de</strong> diversión en su mirada.Me alejé <strong>de</strong> su lado muy alterada y me aproximé al escenario. La actuación <strong>de</strong> Swamp Soulestaba a punto <strong>de</strong> comenzar y quería disfrutar <strong>de</strong> su música y olvidarme <strong>de</strong> aquel episodio tansurrealista. Axel era un entrometido y un pedante. No podía permitir que su prepotente actitud meaguara la fiesta. Pero aunque intenté olvidarme <strong>de</strong>l asunto, no me fue <strong>de</strong>l todo posible ya que,mientras trataba <strong>de</strong> disfrutar <strong>de</strong>l envolvente sonido <strong>de</strong>l jazz, me crucé con su peligrosa mirada envarias ocasiones.∼Al día siguiente, en cuanto terminó la última clase, me dirigí en la bici que me habíaprestado Jenna hacia la comisaría más cercana. No había visto a Anthony en todo el día. Nocoincidimos porque ning<strong>una</strong> <strong>de</strong> las dos largas clases que había tenido esa mañana eran asignaturasobligatorias y me imaginé que él no habría escogido ning<strong>una</strong> <strong>de</strong> ellas para su programa <strong>de</strong> estudios.Mientras pedaleaba bajo el sofocante y húmedo calor <strong>de</strong> aquel día, recé por que el Minino tuviera nada pendiente con las autorida<strong>de</strong>s. Me había ido ilusionando cada vez más con la i<strong>de</strong>a34

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!