13.07.2015 Views

leer-una-muestra-de-aevum

leer-una-muestra-de-aevum

leer-una-muestra-de-aevum

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

AEVUM – ©Lena Blau<strong>de</strong> comprar aquel coche y me moría <strong>de</strong> ganas <strong>de</strong> probarlo. Anthony me había ofrecido hacerlocuando nos <strong>de</strong>spedimos la noche anterior en el Spotted Cat, pero <strong>de</strong>cliné la oferta. No quería ver elcoche hasta tener la certeza <strong>de</strong> que su pasado era fiable. Sería <strong>de</strong>masiado <strong>de</strong>cepcionanteencapricharme con él y que luego la policía me dijera que tenía multas pendientes o había estadoinvolucrado en algún aparatoso acci<strong>de</strong>nte. Conocía más <strong>de</strong> <strong>una</strong> historia <strong>de</strong> gente que habíacomprado un coche <strong>de</strong> segunda mano sin cerciorarse <strong>de</strong> su historial y luego se encontraba consorpresas <strong>de</strong>sagradables. De hecho, Jenna me había contado hacía poco que un amigo suyo habíatenido que pagar <strong>una</strong> fort<strong>una</strong> por tener que hacerse cargo <strong>de</strong> las muchas multas <strong>de</strong> aparcamientoque tenía pendientes el coche que había adquirido.Cuando candé la bici a la barandilla <strong>de</strong> las escaleras que se dirigían a la comisaría, estabasudada y sedienta. Lo mío no es hacer ejercicio, así que necesitaba cuanto antes un vehículo conmotor y aire acondicionado. Una vez estuve <strong>de</strong>ntro, aguardé a que la gruesa policía <strong>de</strong> raza negrame atendiera. Cuando por fin me <strong>de</strong>dicó su atención, le expliqué el motivo que me habíaconducido allí. Me dijo que esperara unos minutos y que en cuanto quedara un agente libre meaten<strong>de</strong>rían. Por lo visto ella era <strong>una</strong> simple recepcionista. Un rato <strong>de</strong>spués, un hombre blanco <strong>de</strong>mediana edad salió a recibirme.―¿Daniela Wells? ―preguntó para cerciorarse <strong>de</strong> que yo era la persona que buscaba.―Sí, soy yo.―Hola, Daniela, soy el agente Smith. Sígame, por favor ―me pidió amablemente.Me condujo por un anodino pasillo iluminado por unos horribles fluorescentes quehacían daño a la vista. Me pregunté por qué la mayoría <strong>de</strong> las oficinas oficiales tenían que sersiempre tan lúgubres y <strong>de</strong>primentes. El agente finalmente se <strong>de</strong>tuvo junto a la puerta <strong>de</strong> un<strong>de</strong>spacho, esperando caballerosamente a que yo pasara primero. Aquella estancia, que miraba haciael pequeño parque situado al otro lado <strong>de</strong> la calle, era algo más alegre y acogedora que el resto <strong>de</strong> lacomisaría. Él tomó asiento tras el escritorio <strong>de</strong> ma<strong>de</strong>ra y yo lo imité, acomodándome en <strong>una</strong> <strong>de</strong> lassillas <strong>de</strong>stinadas a las visitas.―Me han dicho que quería pedir un informe sobre un coche ―comenzó a <strong>de</strong>cir.―Sí. Estoy pensando en comprarlo, pero antes <strong>de</strong> nada me gustaría saber si suexpediente está limpio ―respondí―. ¿Pue<strong>de</strong>n darme uste<strong>de</strong>s esa información o tendría que haberido al DMV?―Has hecho bien en venir aquí ―respondió con <strong>una</strong> sonrisa―. Nosotros tenemos másbases <strong>de</strong> datos que el DMV. Si ese coche ha estado involucrado en cualquier asunto turbio elor<strong>de</strong>nador me lo dirá. ¿Tienes la matrícula?35

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!