14 Juegos de mesa. Fotografía cortesía de Planeta LoZ El tiempo libre también puede ser productivo ¡Tiempo de jugar! Cómo se promueven las actividades lúdicas en Concepción Bajo la premisa de aprovechar su potencial social, profesionales han apostado por acercar los juegos de mesa a diferentes públicos en el Gran Concepción y demostrar que éstos son compatibles con la vida diaria. Los juegos de mesa, considerados como parte del tiempo de ocio de una persona, son una manera efectiva de proveer a la sociedad, momentos de esparcimiento sanos y aptos para toda clase de público. Así lo creen Paulina Fernández y Gonzalo Espinoza, dos de los cuatro fundadores de Planeta LoZ, una tienda en línea de artículos lúdicos que se encarga de acercar el juego a la comunidad. En la calle San Martín se ubica Urban Station, un centro con salas de reuniones y espacios habilitados para trabajo de oficina y, por supuesto, actividades lúdicas; todo acompañado de una decoración agradable que brinda un ambiente ideal. Allí, tras ofrecerme un café, el sicólogo Gonzalo Espinoza, contó que Planeta LoZ nació en noviembre de 2<strong>01</strong>5, de una serie de conversaciones junto a Daniela Bornhardt, su esposa y colega, y sus amigos Paulina Fernández y Pablo González. La idea inicial era abrir una tienda de juegos de mesa, pero no pudieron conseguir un lugar físico estable. A través de los meses, en lugar de aquello, prefirieron apropiarse de otros espacios públicos y organizar jornadas de demostraciones con el fin de acercarse al público. Espinoza afirmó que los juegos de mesa son un aporte no sólo a la diversión, sino que a diferentes dinámicas sociales e incluso académicas. También explicó cómo buscan llegar a un público muy diverso: “Hemos trabajado con tiendas, cafés, restaurants, incluso jardines infantiles” comentó. Esto con la finalidad de combinar ésta actividad con otras de la vida cotidiana y presentarla como algo cercano y accesible. Paulina Fernández, también sicóloga, agregó que la aceptación de la gente ha sido muy buena: “Tenemos un público regular que viene casi siempre, pero también hay gente nueva que llega porque los invitó un amigo o porque andan buscando un juego. Al final los que llegan solos conocen a otras personas y siguen juntándose en nuestros eventos. Tenemos hasta una mesa de tercera edad, donde hay un grupo que siempre viene a jugar”. A lo largo de una conversación amena, González y Fernández comentaron que su intención principal es promover el empleo del tiempo libre en una actividad que resulta mucho más provechosa que, por ejemplo, mirar televisión. “Nosotros queremos que la gente venga a jugar con nosotros, pero que también vayan armando una ludoteca en sus casas y con sus familias, o incluso en los trabajos. Así como se promueve tener libros en la casa, queremos que tengan juegos de mesa”, afirmó González. Además aclararon que Planeta LoZ ofrece alternativas para todos los gustos y edades. Desde juegos simples y rápidos de aprender, hasta otros más profundos que requieren tiempo y algo de estudio. En definitiva, el único requisito son las ganas de aprender y de pasar un rato agradable. También existen en Concepción, tiendas que cuentan con un espacio físico fijo disponible para todo tipo de juegos de mesa o de cartas. Una de ellas es El Calabozo, ubicada en calle Freire, que se especializa en éste rubro a un nivel competitivo y ofrece juegos de alta complejidad y dedicación a través del tiempo, pero que no deja de crear espacios para el público casual. Alex Fariña, dueño de la tienda, contó que averigua detenidamente qué juegos traer a su tienda para asegurarse de brindar experiencias divertidas Por Tomás Cid a sus clientes. A pesar de que su fuerte son juegos con mayor nivel de competitividad, Alex aseguró que ha tenido una buena experiencia enseñando juegos de mesa y que muchas veces es su clientela regular la que se anima a probar cosas nuevas. En medio de una partida de Magic, un juego de cartas que simula duelos entre hechiceros, y que él aceptó con mucho gusto, Fariña comentó que a su tienda llega un público predominantemente joven, pero con intereses diversos; “Una vez llegó alguien que andaba buscando un regalo para sus abuelos, y terminó llevándose un juego”. A él le gusta estar familiarizado con los juegos que El Calabozo ofrece, por lo que no es nada raro encontrarlo jugando con sus clientes y amigos durante horas de trabajo. Aquello le permite crear lazos que escapan a la relación vendedor-comprador. Ya sea mediante la intervención de espacios públicos, como hace Planeta LoZ, o a través de un espacio fijo habilitado para jugar, como el de El Calabozo, todos coinciden en que antes de una tienda, lo importante es crear una comunidad fiel a la cual ofrecer experiencias.
Felipe Benitez, estudiante universitario y bailarín “Me gustaría ir a Estados Unidos y luego volver a Concepción a hacer clases” Por Nicole Escobar y Yessenia Márquez 15