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64<br />
CANNABIS MEDICINAL<br />
ALCOHOL VS CANNABIS<br />
ANCESTRALES<br />
ENFRENTADOS<br />
El alcohol y el cannabis tienen<br />
una serie de efectos en el cuerpo<br />
que bien vale la pena conocerlos.<br />
Cada droga pasará por el cuerpo<br />
de la persona dejando sus marcas.<br />
Conviene saber qué parte de<br />
nuestros cuerpos y nuestros<br />
reflejos se ven disminuidos por<br />
estas sustancias.<br />
por Dr. M. García de Palau<br />
El alcohol afecta a las personas y las<br />
sociedades de diferentes maneras y<br />
sus efectos están básicamente relacionados<br />
con el volumen consumido,<br />
con los hábitos de consumo, y en casos<br />
con la calidad del alcohol consumido.<br />
El cannabis afecta de manera diferente<br />
según las dosis y las características de<br />
la variedad que utilicemos en relación<br />
al porcentaje de cannabinoides que<br />
contenga. Actualmente se consumen<br />
variedades con altos porcentajes de<br />
THC (15 a 25%), lo que determina que<br />
la intoxicación y los efectos no deseables<br />
aparezcan antes. La calidad de la<br />
hierba puede influir en el resultado del<br />
consumo. Puede estar contaminada con<br />
pesticidas, metales pesados, hongos,<br />
bacterias. Una correcta prevención de<br />
riesgos empieza por la calidad del cannabis<br />
que vamos a consumir.<br />
Evidentemente la repercusión del consumo<br />
nocivo de alcohol afecta a la<br />
salud del individuo así como a su entorno<br />
familiar, amigos, compañeros de<br />
trabajo y desconocidos. También desde<br />
el punto de vista económico supone<br />
una carga sanitaria, social y económica<br />
para el conjunto de la sociedad.<br />
El consumo nocivo de alcohol puede ser<br />
una causa de más de 200 enfermedades<br />
y trastornos. Podemos encontrar serios<br />
problemas de salud mental y alteraciones<br />
del comportamiento, incluido el<br />
alcoholismo, además de enfermedades<br />
no transmisibles como la cirrosis hepática,<br />
algunos tipos de cáncer, enfermedades<br />
cardiovasculares y traumatismos<br />
derivados de la violencia o de los<br />
accidentes de tránsito. Tanto a nivel<br />
individual, como social, hay múltiples<br />
factores que influyen en los niveles y<br />
hábitos del consumo, hay comunidades<br />
más sensibles que otras en función<br />
del desarrollo económico, la cultura y<br />
disponibilidad de alcohol, así como los<br />
niveles de aplicación y cumplimiento<br />
de las legislaciones propias de cada<br />
país. Cuantos más factores de riesgo<br />
convergen sobre el individuo, más pro-<br />
babilidades hay de que se desarrolle un<br />
consumo nocivo. Siempre los efectos<br />
del consumo de alcohol dependen de<br />
dos factores predominantes: el volumen<br />
consumido y las características<br />
del uso o forma de beber.<br />
ALCOHOL ETÍLICO<br />
Es un tóxico de alto riesgo para la<br />
salud humana socialmente aceptado.<br />
El etanol ejerce acción sobre diferentes<br />
neurotransmisores como GABA, dopamina,<br />
norepinefrina y serotonina. Al<br />
interferir sobre éstos neurotransmisores<br />
aparecen los diferentes síndromes<br />
clínico-neurológicos característicos del<br />
alcoholismo crónico. Se produce una<br />
disminución de la actividad funcional<br />
del Sistema Nervioso Central (SNC). Se<br />
incrementa la síntesis de ácidos grasos<br />
y triglicéridos, aumentando los lípidos y<br />
apareciendo la degeneración grasa del<br />
hígado. Se produce un descenso de las<br />
proteínas en sangre o hipoproteinemia<br />
y también un déficit de vitamina B1. Se<br />
produce un aumento de la resistencia<br />
a la insulina. Se altera la absorción de<br />
tiamina y otros nutrientes, disminuyendo<br />
el rendimiento energético de la<br />
glucosa a nivel cerebral.<br />
INTOXICACIÓN AGUDA<br />
Las alteraciones del SNC dependen de<br />
la dosis de consumo, 250 centímetros<br />
cúbicos de cerveza con un 5% de alcohol,<br />
aportan 12,5 gramos de etanol.<br />
Una copa de licor, con 45 % de alcohol,<br />
en 100 mililitros aporta 45 gramos de<br />
etanol. Una persona se considera alcohólica<br />
si consume más de 80 gramos de<br />
alcohol al día.<br />
ALTERACIONES GASTROINTESTINALES<br />
Disminuye la absorción de electrolitos<br />
y agua. Gastritis, esofagitis, úlceras<br />
que pueden acabar en hemorragia<br />
de vías digestivas, vómitos. La ingesta<br />
en ayuno de etanol produce una hipoglicemia<br />
(baja de glucosa en sangre),<br />
puede durar de seis a 36 horas y en<br />
niños puede provocar convulsiones. El<br />
etanol carece de valor nutricional, un<br />
gramo de etanol equivale a 7,1 calorías.<br />
Puede provocar pancreatitis aguda,<br />
una patología producto del aumento de<br />
secreción de proenzimas pancreáticas<br />
que cuenta con una tasa de mortalidad<br />
importante. Otra de las consecuencias<br />
del abuso de alcohol es la crisis o<br />
ataque agudo de gota. Se debe a la<br />
disminución de la excreción renal de<br />
ácido úrico que genera hiperuricemia o<br />
aumento del ácido úrico en sangre.<br />
Aparición de politraumatismos por la<br />
depresión del SNC que produce ataxia<br />
o descoordinación motora, por lo que el<br />
individuo intoxicado puede sufrir caídas<br />
o contusiones, incluso craneales que<br />
pueden derivar en hematomas intracraneales.<br />
Además, en estos casos la<br />
aparición de infecciones pulmonares<br />
es más frecuente como complicación<br />
del cuadro.<br />
CANNABIS<br />
De acuerdo a las estadísticas, no existe<br />
constancia de muertes en las que el<br />
cannabis sea la causa directa. La dificultad<br />
para llegar a la dosis letal hace<br />
que sea prácticamente imposible consumir<br />
la cantidad necesaria de canna-