02.02.2017 Views

colaborar

hk68sk4

hk68sk4

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Las nuevas formas de la guerra y el cuerpo de las mujeres 75<br />

©<br />

se permite la copia<br />

Será por tanto inevitable la pregunta: ¿y qué fuerzas y qué tipo de violencia<br />

protegen la cuantiosa y enormemente variada propiedad en el nivel subterráneo<br />

de la segunda economía? Llegamos, a través de esa pregunta, a postular<br />

la existencia de dos realidades: una Primera Realidad, constituida por todo<br />

aquello regido por la esfera del Estado, todo aquello declarado al Estado, visible<br />

en las cuentas de la nación y en las páginas de Internet de la «Transparencia<br />

en gestión pública», las propiedades inmuebles residenciales, comerciales<br />

e industriales compradas o heredadas; los impuestos recaudados; los sueldos<br />

públicos y privados, los pagos «en blanco»; todo lo producido y comercializado;<br />

las empresas, sociedades de lucro y ONG registradas, etc. Para su protección,<br />

ese universo cuenta con las fuerzas policiales y militares, instituciones<br />

y políticas de seguridad pública, sistema judiciario y carcelario que protegen<br />

ese caudal legítimo, legal.<br />

Por otro lado, en el subsuelo de ese mundo de supuestas transparencias,<br />

se encuentra lo que en mi ensayo sobre Ciudad Juárez (2006) llamé<br />

Segundo Estado, y que hoy prefiero llamar Segunda Realidad, pues es una<br />

realidad especular con relación a la primera: con monto de capital y caudal<br />

de circulante probablemente idéntico, y con fuerzas de seguridad propias,<br />

es decir, corporaciones armadas ocupadas en proteger para sus «dueños»<br />

la propiedad sobre la riqueza incalculable que en ese universo se produce<br />

y administra.<br />

No podemos entender la violencia como nos la presentan los medios,<br />

es decir, como dispersa, esporádica y anómala. Tenemos que percibir la<br />

sistematicidad de esta gigantesca estructura que vincula elementos aparentemente<br />

muy distantes de la sociedad y atrapa a la propia democracia<br />

representativa. Y, si pensamos un poco más, concluiremos que necesariamente<br />

esa estructura tiene una extensión global y una importancia política,<br />

es decir, que interfiere en la política e influencia los gobiernos, como<br />

también es interferida por estos, tanto en las cabeceras nacionales como en<br />

los centros imperiales. En el ámbito nacional, porque su impacto es determinante<br />

en los pleitos electorales y sus vencedores quedan cautivos de los<br />

pactos que celebraron para elegirse. Y en el ámbito global porque, por un<br />

lado, prestigiosos bancos del Norte lavan el dinero que produce y acumula<br />

la segunda economía y no es posible investigarlos y procesarlos con todo<br />

el rigor de la ley, allá, en el mismo Norte, ya que, como afirmó en 2013 el<br />

propio fiscal general de Estados Unidos, Eric Holder, los actos de corrupción<br />

y fraude cometidos por los ejecutivos de los bancos norteamericanos<br />

no pueden ser judicializados debido al tamaño de esas instituciones y su

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!