05.02.2017 Views

1 Cincuenta de Grey

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

es más importante. ¿Qué pasa con los <strong>Grey</strong>? ¿Qué los hace tan absorbentes, tan<br />

<strong>de</strong>voradores y tan irresistibles? Doy otro trago <strong>de</strong> vino.<br />

Hago zapping en busca <strong>de</strong> algún programa, pero en el fondo sé que estoy<br />

<strong>de</strong>morándome a propósito. El contrato echa humo <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> mi bolso. ¿Tendré las<br />

fuerzas y lo que hay que tener para leerlo esta noche?<br />

Apoyo la cabeza en las manos. Tanto José como Christian quieren algo <strong>de</strong> mí.<br />

Con José es fácil, pero Christian… Manejar y enten<strong>de</strong>r a Christian es otra cosa. Una<br />

parte <strong>de</strong> mí quiere salir corriendo y escon<strong>de</strong>rse. ¿Qué voy a hacer? Pienso en sus<br />

ardientes ojos grises, en su intensa y provocativa mirada, y me pongo tensa. Sofoco<br />

un grito. Ni siquiera está aquí y ya estoy a cien. No pue<strong>de</strong> ser solo sexo, ¿verdad?<br />

Pienso en sus bromas amables <strong>de</strong> esta mañana, en el <strong>de</strong>sayuno, en su alegría al<br />

verme encantada con el viaje en helicóptero, en cómo tocaba el piano, esa música<br />

tan triste, dulce y conmovedora…<br />

Es un hombre muy complicado. Y ahora he empezado a enten<strong>de</strong>r por qué. Un<br />

chico privado <strong>de</strong> adolescencia, <strong>de</strong>l que abusa sexualmente una malvada señora<br />

Robinson… No es extraño que parezca mayor <strong>de</strong> lo que es. Me entristece pensar en<br />

lo que <strong>de</strong>be <strong>de</strong> haber pasado. Soy <strong>de</strong>masiado ingenua para saber exactamente <strong>de</strong><br />

qué se trata, pero la investigación arrojará algo <strong>de</strong> luz. Aunque ¿<strong>de</strong> verdad quiero<br />

saber? ¿Quiero explorar ese mundo <strong>de</strong>l que no sé nada? Es un paso muy<br />

importante.<br />

Si no lo hubiera conocido, seguiría tan feliz, ajena a todo esto. Mi mente se<br />

traslada a la noche <strong>de</strong> ayer y a esta mañana… a la increíble y sensual sexualidad<br />

que he experimentado. ¿Quiero <strong>de</strong>spedirme <strong>de</strong> ella? ¡No!, exclama mi<br />

subconsciente… La diosa que llevo <strong>de</strong>ntro, sumida en un silencio zen, asiente para<br />

mostrar que está <strong>de</strong> acuerdo con ella.<br />

Kate vuelve al comedor sonriendo <strong>de</strong> oreja a oreja. Quizá esté enamorada. La<br />

miro boquiabierta. Nunca se ha comportado así.<br />

—Ana, me voy a la cama. Estoy muy cansada.<br />

—Yo también, Kate.<br />

Me abraza.<br />

—Me alegro <strong>de</strong> que hayas vuelto sana y salva. Hay algo raro en Christian<br />

—aña<strong>de</strong> en voz baja, en tono <strong>de</strong> disculpa.<br />

Sonrío para tranquilizarla, aunque pienso: ¿Cómo <strong>de</strong>monios lo sabe? Por eso<br />

será una buenísima periodista, por su infalible intuición.<br />

Cojo el bolso y me voy a mi habitación con paso <strong>de</strong>sganado. Los esfuerzos sexuales

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!