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Los problemas transicionales se pueden dar cuando se producen
cambios originados en la evolución de los miembros de
la familia y por diferentes cambios en su composición. Cuando
las familias acuden a terapia se pueden observar las negociaciones
bloqueadas para transitar a otra etapa de crecimiento.
4. Tensiones referentes a problemas de idiosincrasia:
Al momento de acercarse a la realidad de un familia,
se debe tener cuidado de tomar en cuenta todas las
circunstancias y las pautas transaccionales disfuncionales
que se presentan. Se pueden observar problemas
de idiosincrasia transitorios pero que se deben detectar
para buscar un cambio benéfico.
Las familias aparentemente normales presentan una constante
transformación a lo largo del tiempo, buscando mejores
adaptaciones y reestructurándose continuamente, con lo que
asegura su funcionamiento. La estructura familiar sólo puede
observarse en movimiento, y es por esta razón que la fortaleza
del sistema depende de su capacidad de movilizar sus pautas
transaccionales alternativas cuando las condiciones externas
e internas de la familia así lo exijan (Minuchin, 1974). Ante toda
nueva reestructuración, los límites deben ser claros y firmes,
pero sin ser rígidos, que le permitan una modificación continua
cuando las condiciones y las circunstancias cambian.
La manera peculiar en la que una familia se adapta a las
tensiones debe asegurarle la continuidad, al mismo tiempo
que les permita a los miembros lograr una mejor reestructuración.
Si responde con rigidez a las tensiones, se comenzarán
a presentar pautas disfuncionales, lo que requeriría
de la intervención de un profesional en el área de terapia
familiar.
El enfoque estructural no puede reducir a una familia a los
aspectos biopsicodinámicos individuales de sus miembros
(Minuchin, 1974). Cada uno se vincula de tal manera que
dichas relaciones están gobernadas por ciertas disposiciones
en las transacciones. La realidad de la estructura familiar
pertenece a un orden diferente a la realidad individual. Al
asociarse con la familia, el terapeuta puede lograr recabar
una gran información si logra asociarse con ésta, lo cual le
ayudará a mejorar su diagnóstico estructural.
El terapeuta familiar puede responder a los acontecimientos
que se producen en la familia y puede ir elaborando hipótesis
acerca del funcionamiento de la estructura familiar. Podrá
señalar los límites y las pautas transaccionales, estableciendo,
de esta manera, un mapa familiar que le servirá de
esquema organizativo y donde podrá organizar los datos
que recoge. Este nuevo esquema permite formular hipótesis
acerca de las áreas dentro de la familia que pueden estar
funcionando correctamente y en las que no sucede así.
Se pueden determinar los objetivos terapéuticos que son
cruciales para las intervenciones posteriores.
Al momento de interactuar con la familia, el terapeuta se
siente como un miembro activo en relación con el sistema
terapéutico. Existe una marcada diferencia entre la concepción
del enfoque psicodinámico y el enfoque estructural,
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