32 El Ballet Folklórico Kora, <strong>de</strong> Senegal, presentó sus danzas tradicionales en la Plaza <strong>de</strong> las Pasiegas. Fotografías: Silvia Jiménez, Raquel Clausi
LOS INICIOS DE UNA CARRERA pue<strong>de</strong>n estar en una <strong>de</strong>cisión aparentemente menor. Hoy actúa en un palacete granadino, el <strong>de</strong> Quinta Alegre, una violinista aún adolescente. Cuando tenía cinco años comenzó a tocar el violín «porque no era caro y tampoco ocupaba mucho espacio» (la propia María <strong>de</strong>l Mar Vargas se referirá así a sus inicios en una entrevista concedida a Granada Hoy). El caso es que, acompañada al piano por Alba Ventura, llega con un programa don<strong>de</strong> se suman Turina, Ravel, Falla y Sarasate. El público queda contento y pi<strong>de</strong> más; ese más va a ser una pieza emblemática: Adiós a la Alhambra, <strong>de</strong> Jesús <strong>de</strong> Monasterio: «Pieza i<strong>de</strong>al en estos días <strong>de</strong> votaciones alhambrinas [por las Nuevas Siete Maravillas <strong>de</strong>l Mundo] y broche sonoro a una velada juvenil y muy musical <strong>de</strong>s<strong>de</strong> Quinta Alegre» (Andrés Molinari en I<strong>de</strong>al <strong>de</strong>l 27 <strong>de</strong> junio). Parte también <strong>de</strong> la programación reunida en torno al FEX (extensión <strong>de</strong>l <strong>Festival</strong> buscando otros espacios urbanos, otros públicos; en ocasiones, intérpretes o grupos alternativos también), es la presencia <strong>de</strong>l pianista Bruno Fontaine en el Crucero <strong>de</strong>l Hospital Real, con un repertorio circunscrito a Mozart pero trufado con improvisaciones. Fontaine «se encontró con un público variado, con gente mayor, joven, algunos chavales y unos cuantos abanicos […]» (Luis Arronte en La Opinión <strong>de</strong> Granada, 27 <strong>de</strong> junio). 26 JUNIO Con Fontaine «hay un fuerte sentido <strong>de</strong> la complicidad. En algunos momentos vemos a ese Mozart vehemente, juguetón, burlón, único, tan apartado <strong>de</strong>l tontaina que nos presentara Milos Forman en su, por otra parte admirable, Ama<strong>de</strong>us» (José Antonio Lacárcel en I<strong>de</strong>al, 27 <strong>de</strong> junio). Quizá sea a<strong>de</strong>cuado aquí un breve intermedio reflexivo para <strong>de</strong>jar subrayado algo que, aun pudiendo resultar obvio, no aflora en la consciencia <strong>de</strong> todos: una ciudad que vive un <strong>Festival</strong> como el <strong>de</strong> <strong>Música</strong> y <strong>Danza</strong> <strong>de</strong> Granada vive a la par una experiencia cultural y artística que exce<strong>de</strong> con mucho la mera suma <strong>de</strong> conciertos o espectáculos concentrados en varios días. Así, por ejemplo, las danzas populares y tradicionales <strong>de</strong> Senegal llevadas a un espacio público como la granadina Plaza <strong>de</strong> las Pasiegas otorgan la posibilidad <strong>de</strong> una comunión con ritmos y símbolos ajenos pero que tocan nuestra común raíz interior como humanos. Acerca <strong>de</strong> la «apoteosis africana» —en expresión <strong>de</strong> Pedro Guajardo en La Opinión <strong>de</strong> Granada <strong>de</strong>l 28 <strong>de</strong> junio—, este mismo crítico va a explicar: «Todo este repertorio [<strong>de</strong>l Ballet Folklórico Kora] consta <strong>de</strong> una riqueza rítmica propia <strong>de</strong>l continente africano, en el que no existe una palabra que diferencie a la música <strong>de</strong> la danza, no pudiendo concebirse la una sin la otra». Ya sea con danzas guerreras o para celebrar la cosecha, con la presencia ancestral <strong>de</strong>l fuego o con la figura próxima a los misterios <strong>de</strong>l chamán, el grupo senegalés arrastró a los presentes y, en palabras <strong>de</strong> Pedro Guajardo, «hizo que el público que les flanqueaba por todos los costados participara <strong>de</strong> manera activa durante todo el concierto, obteniendo una integración y comunicación que pocos lenguajes musicales pue<strong>de</strong>n conseguir». Esta noche da inicio el ciclo sinfónico —pilar indiscutible <strong>de</strong>l <strong>Festival</strong>— con la orquesta local y su director titular, el francés Jean–Jacques Kantorow. El concierto nos ofrece reflejos <strong>de</strong> España en la música francesa con obras compuestas en tres siglos diferentes, como bien apunta Yvan Nommick en las notas al programa: la Symphonie espagnole (1874) <strong>de</strong> Lalo, el Caprice andalou (1904) <strong>de</strong> Saint–Saëns y Otra noche. Recordando a Manuel <strong>de</strong> Falla (20<strong>07</strong>) <strong>de</strong> Vincent Paulet. Aquí cabe reseñar lo que, a propósito <strong>de</strong> las propuestas <strong>de</strong> este <strong>Festival</strong> armado sobre el eje «Españoles en París», escribirá Joaquín García en la revista Scherzo (en su número <strong>de</strong>l mes <strong>de</strong> septiembre): «Hubiera sido fácil caer en la españolada, a la que tan proclives han sido nuestros vecinos galos, pero los programas, […], mostraron un cuidado equilibrio entre lo evi<strong>de</strong>nte y lo menos conocido que hemos <strong>de</strong> agra<strong>de</strong>cer». El crítico <strong>de</strong> El Mundo Juan María Rodríguez publicará el 28 <strong>de</strong> junio: «Lo mejor <strong>de</strong> la noche fue la nueva visión francesa <strong>de</strong> España; no la antigua, <strong>de</strong>sfasada y pintoresca. El homenaje <strong>de</strong>l pujante Vincent Paulet (1962) a Manuel <strong>de</strong> Falla, Otra noche, […], estreno en Granada, es <strong>de</strong> una rara y fascinante poética noctívaga asaltada por hachazos frenéticos». Protagonista también <strong>de</strong> la velada en el Palacio <strong>de</strong> Carlos V, el violinista Renaud Capuçon estuvo «espléndido tanto en la conocida Sinfonía española <strong>de</strong> Lalo como en el poco frecuente Capricho andaluz <strong>de</strong> Saint–Saëns» (Joaquín García en Scherzo). No es poco el orgullo <strong>de</strong> los granadinos ante su Orquesta Ciudad <strong>de</strong> Granada, orgullo justificado. Por eso, cuando la ocasión lo merece —y ésta bien lo merecía— el primer aplauso va para la orquesta y su director. Des<strong>de</strong> las páginas <strong>de</strong> Granada Hoy, Juan José Ruiz Molinero se va a mostrar el 28 <strong>de</strong> junio entusiasmado con la formación sinfónica y su titular: «Si la orquesta granadina reveló su sapiencia, Kantorow <strong>de</strong>mostró su profundo conocimiento <strong>de</strong> las partituras y su dirección fue impecable». 33
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